Confia en mi

Capítulo 19

Asintiendo mientras respiraba profundamente, Hipo suspiró. —Sé que lo has visto. Y Elinor, junto con mi mamá y mi papá. Qué está pasando conmigo y con Mérida—

Asintiendo mientras le daba una mirada seria al chico, Fergus se cruzó de brazos. —Lo he visto. ¿Qué pasa con eso?—

Manteniendo la cabeza alta, Hipo respiró hondo. —Amo a tu hija. No estoy seguro de cómo sucedió tan rápido, pero sé que no quiero perderla. Ahora no. No hasta que termine la pelea, Macintosh se enfrenta a Alvin y  Los marginados estaran fuera para siempre. Pero formalmente les pido permiso para casarme con su hija—

Dándole una mirada severa, Fergus esperó un momento para ver si vacilaba. Ni siquiera pestañeó. Luego se relajó mientras sonreía y le tendió la mano al niño. —Has demostrado que eres confiable con ella una y otra vez. Elinor y yo ya hemos hablado de esto. Permiso concedido. No creo que pueda pedirle a alguien mejor—

Extendiéndose y tomando su mano, Hipo sonrió mientras respiraba profundamente. —Gracias. Significa mucho—

Cuando dejó de estrecharle la mano, Fergus asintió mientras miraba hacia la puerta. —No le has mostrado nada más que respeto hasta donde podemos ver. Y lo veo en sus ojos, ella te ama tanto como lo veo en tus ojos por ella. Pero sí quiero saber. ¿Qué vas a hacer? con ella en la pelea?—

Cruzando sus propios brazos, suspiró. —No está contenta con eso, pero es un compromiso ayudar a mantener a su madre a gusto también. Nos estamos instalando en cinco islas que no están lejos de aquí. No queremos tener que reconstruir Berk nuevamente. Mamá y Elinor llevarán a todos los que no están luchando a algunas cuevas más lejos. Cuevas que ni siquiera Alvin conoce. El papel de Mérida será enviar mensajes por las islas—

Dándole una mirada severa y preocupada, Fergus suspiró. —Pero mientras ella va de isla en isla, ¿eso no la expondría?—

Sacudiendo la cabeza cuando se agachó y sacó su mapa y se arrodilló para desplegarlo. —No. Las islas en las que estamos estableciendo están en un círculo, y tal vez si tienes suerte, de playa en playa está a solo unos seis metros de distancia. Hay una caverna bajo el agua, pero gracias a que Chimuelo es un dragón Alfa, pudimos hacer amigos con varios dragones de tipo agua que patrullarán el agua. Aquí mismo—

Mirando el mapa, Fergus asintió. —Ya veo. Eso funcionaría. Ese es un buen mapa—

—Gracias. Empecé esto cuando tenía dieciséis años— Hipo luego se puso de pie mientras miraba su mapa y lo rodeaba. —Ahora me pregunto—

Mirándolo con una mirada extraña, Fergus parpadeó. —¿De qué estás hablando? ¿De qué te preguntas?—

Deteniéndose en una esquina diferente del mapa, Hipo se arrodilló y señaló una isla. —Esta es la isla en la que me atraparon. Esta fue la isla en dónde nos conocimos. Intenté regresar pensando que Chimuelo estaba allí. Sin saber dónde estaba una vez que nos liberamos, Mérida me dijo lo que tú le contaste acerca de seguir al sol para llegar a casa en esta época del año si se perdía. En esta época del año, la luna sale de este lado de Berk—

Hipo tocó el costado de Berk en el que salió la luna. —Entonces cuando llegamos a Berk venimos de esta dirección—Moviendo su mano por el mapa, se detuvo al final. —Esta forma de llegar a casa desde donde está la isla de Alvin es diferente. Eso estaría a casi medio día de esta isla aquí, en esa dirección—

Asintiendo mientras caminaba y miraba el mapa, Fergus pensó que sabía a dónde iba ahora. —¿Entonces estás pensando que podría haber una forma diferente de que entren en la pelea?—

Asintiendo mientras corría por su mapa, lo fulminó con la mirada. —Sí. Los dragones que tiene bajo su control, sin embargo. ¡Maldita sea, ¿por qué no vi esto antes?—

—¿Mira qué?—

Levantando la vista cuando sus padres junto con Elinor salieron por la puerta con Mérida, Hipo se levantó. —Tenemos que cambiar todo. Necesitamos trasladar a todos a lugares que no estén cerca de aquí en absoluto. Y tenemos que hacerlo ahora—

—¿Hipo?—Moviéndose para pararse a su lado, Mérida le dirigió una mirada extraña. —Hipo, ¿de qué estás hablando?—

Cayendo de rodillas, señaló y movió su mano alrededor del mapa. —Esta es la forma en que Mérida y yo volvimos a Berk. La isla en la que Alvin nos tuvo fue unos días de esta manera. Justo aquí, en algún lugar, encontramos a Chimuelo y Wisp. Pero aquí, esta es la isla que obtuvieron. Pero es en lo que nunca pensé. Tienen el mismo tipo de dragones de agua que nosotros en su mayor parte. Además de Muertes Susurrantes. No hay forma de que Alvin, incluso con la ayuda de Mildew, haya podido ellos solos—

Con los ojos muy abiertos, Valka solo miró a su hijo con una mirada extraña. —¿Crees que tiene una Bestia Desconcertante como Drago?—

—Esa debería ser la única respuesta. Nuestros dragones están a salvo de su control debido a Chimuelo. Pero esa debe ser la razón por la que tiene todos los dragones—Levantándose de nuevo, Hipo tenía la mente acelerada mientras miraba el mapa. Tenían que estar en un lugar diferente. 
—Tenemos que pelear la pelea en otro lugar. No podemos hacerlo en las islas como pensábamos—

Con un jadeo, Mérida miró a su padre. —¿Qué pasa en Dumbroch? Estoy segura de que si hablamos con ellos, los clanes DingWall y MacGuffin nos ayudarán. Sé que Macintosh está en camino aquí, pero podemos conseguir dragones para que traigan sus naves con nosotros más rápido. Como lo hicieron para mamá y Valka—

—Pero nuestra gente ya está escondida allí Mérida. ¿Qué vamos a hacer con ellos?—

Mirando a su madre, Mérida negó con la cabeza. —No en tierra firme. La isla— En cuanto a Hipo, Mérida tenía ojos serios. —Hay una isla en el océano justo antes de llegar al castillo. Es al menos cincuenta veces más grande que esta isla en la que se encuentra Berk. Lleno de bosques, acantilados y cuevas. El fondo y el núcleo son casi sólidos. piedra con túneles de agua que lo atraviesan—

Pensando por un momento, más grande que Berk, más trampas. Mérida parecía conocer la isla, podía mostrarles dónde están las diferentes cosas. Alvin no esperaría eso de ellos. —Creo que eso funcionaría. ¿Mamá? ¿Papá? ¿Fergus? ¿Elinor? ¿Eso estaría bien?—

Asintiendo, Fergus suspiró. —Sí, creo que estará bien, hijo. Conocemos esa isla y podemos mostrarte a ti y a los de Berk a su alrededor con bastante facilidad. Y lo suficientemente rápido con los dragones—

—Bien. Alvin nunca esperaría que simplemente no estuviéramos aquí en Berk. Esto lo pondrá a prueba y esperamos que se equivoque—Con los ojos entrecerrados, Hipo suspiró. 
—Realmente espero que si él tiene una bestia desconcertante, sea la que tenía Drago. Ese ya conoce el vínculo que Chimuelo y yo tenemos, y es a quien derrotó para convertirse en un dragón Alfa—