Confia en mi

Capítulo 22

Mirando hacia arriba, Mérida sonrió cuando Hipo entró con una sonrisa. 
-¿Hipo?-

Sonriendo mientras se movía para sentarse a su lado, Hipo suspiró con una sonrisa. -Ya terminé. No me llevó tanto tiempo como pensé que lo haría. Estaban muy concentrados en eso-

Riendo, Mérida se acercó a él y suspiró. -¿Que tipo?-

Riendo y luego bajando la cabeza, Hipo les dio una media sonrisa. -Traté de dirigirlos. Realmente lo hice. Pero parecían tener sus propias ideas. Los tres Nadders, uno de ellos fue por uno exótico-

Dando una mirada extraña a la joven pareja, Elinor parpadeó. -Se dan cuenta de que ustedes dos están hablando en código en este momento, ¿verdad? ¿De qué están hablando?-

Aunque antes de que alguien pudiera decir algo, la puerta de la enorme carpa se abrió de golpe y voló Hubert, Hamish y Harris cada uno en su propio dragón. Hubert terminó con uno de los niños más nuevos de Stormfly que se parecía a ella. Hamish obtuvo a su hermano del mismo grupo que era más verde que azul, y Harris consiguió a su otro hermano, una niña que era de color rojo brillante con marcas azules brillantes.

Con los ojos muy abiertos, Elinor observó cómo los tres aterrizaban. Sus dragones parecían la mitad de los que ella veía así. ¡Pero no! Ya era bastante malo que su hija tuviera uno, ¡no había forma de que dejara que sus hijos tuvieran uno cada uno! ¡Ni siquiera uno para compartir! Sacudiendo la cabeza mientras cruzaba los brazos, Elinor cerró los ojos. -¡No! ¡No! ¡No! ¡No! Estaba mortificada cuando Mérida apareció con un dragón. ¡No los dejaré! Están ...-

-Has estado cerca de ellos el tiempo suficiente Elinor para que sepas que no son viciosos y peligrosos a menos que estén en las manos equivocadas-Hipo se puso de pie con Mérida y fue hacia la entrada de la tienda. -He estado trabajando con ellos todo el día, y han creado un vínculo con esos tres dragones que es lo mismo que Mérida con Wisp. Vamos muchachos, vamos a mostrarle a tu madre cómo funciona-

Con una risa, Valka tuvo que empujar a Elinor fuera de la tienda. -Vamos. Solo observa y podrías cambiar de opinión, especialmente con lo que sucederá en unas pocas semanas-

Cruzando los brazos mientras suspiraba, Elinor la fulminó con la mirada. -No lo tendré, Valka. No lo tendré en ...- Pero luego palideció cuando otros seis dragones aterrizaron con sus jinetes, todos parecían los mismos dragones que tenían los niños. -Qué son…..-

Con un suspiro mientras rodeaba a Mérida con un brazo, Hipo le puso el otro brazo en la cintura y asintió. -Lo primero que sucede cuando un dragón te acepta como jinete y consigue ese vínculo instantáneo contigo, es que se vuelven devotos y leales a ti. Mejor que cualquier perro. Siempre quieren estar contigo. Y se apresurarán a protegerte-

Tirando de la mano de Valka cuando vio a los dragones escupir fuego hacia sus hijos, ¡Elinor sintió que su corazón iba a saltar de su garganta! -¡No! ¿Qué estás haciendo?-

-Sólo mira- Hipo esperó unos segundos y luego levantó la mano para que se detuvieran. -Ahora mira dónde están los muchachos-

Parpadeando cuando los tres dragones más pequeños se movieron, y sentados allí, ilesos, ni un pelo fuera de lugar estaban sus muchachos. Y los dragones también parecían ilesos. 
-¿Detuvieron el fuego?-

-Está bien-Astrid luego voló Stormfly en el aire y sonrió mientras se cernía. -Y debido a que están más allá de la cría, sus instintos para hacer cosas así son más altos. Y sus colas disparan a sus espinas-Luego se volvió hacia los muchachos mientras se movía para que la cola de Stormfly los enfrentara. -Dos de ustedes se mueven y se acercan a Hipo- Una vez que uno estaba allí, ella sonrió. 
-¿Listo?-Cuando él asintió, ella tocó a Stormfly. -Vamos chica.-

Su corazón se detuvo nuevamente cuando las espinas se dispararon hacia su hijo, luego jadeó con los ojos muy abiertos cuando el dragón verde voló hacia él y giró en un círculo con un rugido mientras miraba y disparaba espinas hacia el que estaba en el aire. Todo para proteger a su hijo. -Es solo….-

Hipo se echó a reír mientras se movía para pararse detrás de los niños y sus dragones. -Ya los nombraron también. Todos son bebés de Stormfly- Luego miró a Stormfly mientras Astrid aterrizaba a su lado. Mirando hacia abajo se cruzó de brazos. -Dile a todos cómo se llaman-

Como nunca habían hablado mucho, todos los niños sabían que esto sorprendería a su madre. Pero Hubert sonrió mientras saltaba sobre la pequeña silla que Hipo le hizo. -A todos nos gusta Stormfly. Así que elegimos nombres relacionados con tormentas. Su nombre es Thunder-

Sonriendo mientras saltaba sobre su dragón, Hamish frotó el cuello de su dragón. -Y este es el tifón-

Al subirse a su brillante dragón rojo y azul, Harris asintió. -Tengo la única niña, y su nombre se parece más a su madre. Tormentoso-

Al ver las miradas en sus ojos, los ojos en ella, Elinor suspiró mientras bajaba los hombros y les daba una media sonrisa. -No puedo quitármelas después de que se hayan nombrado ahora. Solo promete que no harás nada peligroso mientras estés donde pueda verte-

-¡Hipo! ¡Hipo!-

Girando hacia el cielo para ver el aterrizaje de Patán, Hipo parpadeó. 
-¿Qué es?-

-Hay una enorme flota de barcos que se dirigen hacia aquí. Deberían estar aquí mañana por la tarde. ¡Como si acabaran de salir de ahora!-Señalando en la dirección en que los vio, Patán parpadeó. -Tienen tantos barcos como el tipo de pintura y la misma bandera ondeando. Pero no veo dragones ni nada y Hookfang no sintió ninguno debajo del agua-

Mirando a Mérida mientras ella lo miraba a medias, Hipo solo señaló a Patán.-Te dije que ese nombre no es uno que vamos a recordar-Pero luego se volvió hacia Patán con una mirada fulminante. -¿Sabes dónde está el joven?-

Asintiendo, Patán señaló a la derecha. -En ese lado de la isla. Él no podría verlo incluso si estuvieran encima de nosotros-

Pensando por un momento, Hipo se cruzó de brazos. -Si Alvin no envió a nadie con él, podemos tratarlo con bastante facilidad. El marginado que nos estaba mirando se fue esta mañana. De ninguna manera un Nadder puede regresar a la Isla Marginada-

-Pero, ¿cómo sabes que todavía están en la isla de la que escapaste?-

Girando para encontrar a su padre y Fergus caminando hacia él, Hipo suspiró. -No, pero estoy tomando esa corazonada. Con la excepción de Elinor y los muchachos, todos los demás ya están escondidos en los diferentes lugares. De todos modos, pueden llegar más rápido con los dragones ahora, y mamá puede tomar a Elinor. Pero Alvin, no lo veo salir de esa isla hasta que sepa dónde estamos para poder dirigirse directamente hacia nosotros. Está esperando a todos los hombres que sé que envió a buscarnos una vez que se dio cuenta de que Berk estaba vacío para volver a casa. la isla antes de que él se mude, estaría dispuesto a apostar-

-Entonces permíteme a mí y a mis hombres manejar esto-

Todos los ojos se volvieron hacia Y Macintosh mientras caminaba con su amor en el brazo. Sus ojos duros y serios. -Esto es personal entre mi padre y yo. Lucharé por lo que creo que es correcto y por la mujer que amo. Hipo, ya sabes cómo se siente, estoy seguro. Navegaré con el ejército que tengo y me reuniré. él en el agua. La dejaré contigo y me encargaré de eso. Ponlo en su lugar y luego tal vez, se unirá a nuestro lado y te dará información sobre Alvin que puedes usar-

Asintiendo con la cabeza, Hiccup sonrió a medias. -Sé exactamente de lo que estás hablando por tus razones para pelear. Y eso suena como un buen plan en realidad- Luego se volvió hacia Patán y Astrid. -Ustedes dos, uno van a DingWall y los otros barcos MacGuffin y háganles saber lo que está sucediendo, pero que se queden quietos. Son nuestra arma secreta para cuando Alvin llegue-

Una vez que salieron volando, él dirigió una mirada en la dirección de donde venían los barcos. Si él regresara, entonces esa sería la forma en que Alvin entraría. Esa es la única forma de tratar de esconderse en las islas más pequeñas. Pero, con la ayuda de Mérida, y los dragones de agua que tenían, tenía la esperanza de que había deshabilitado o ralentizado la Muerte Susurrante que Alvin tenía. -Creo que comienza mañana. Al menos la primera parte lo hace-