Fall in You

13. Noche inolvidable.

Apenas salimos de la casa de Kyle, tomamos camino directo a la casa donde se iba a propinar la fiesta.
Estaba un poco nerviosa, a pesar de que ya llevaba un buen tiempo saliendo con Kyle, aún no estaba acostumbrada a ese mundo en donde las drogas y el alcohol era la mayor prioridad de las personas.
En realidad, creo que ese era un mundo completamente desconocido para mi y al cual no pensaba acostumbrarme nunca. Solo iba a aquellas fiestas para acompañar a Kyle y estar al pendiente de que no se pasara de copas, sin embargo prefería estar en mi casa, recostada en mi cama, viendo unas cuantas series.

Perdí el hilo de mis pensamientos al escuchar que alguien había abierto la puerta del copiloto.

- Llegamos, Madison -, dice Kyle con un destello de exasperación en su ronca voz.

Los párpados me pesaban, tenía mucho sueño, a decir verdad quería salir corriendo de aquel lugar en donde me encontraba.
A pesar del terrible cansancio que poseía mi cuerpo, salí del auto para luego entrar a aquella gigante casa.

Al entrar, noto que es una casa un poco similar a la de Kyle, costosas lámparas de cristal por todos lados, numerosas decoraciones de porcelana en cada rincón, sin duda, era una casa de ensueño.

- Vamos, amor - me da un pequeño empujón hacia adelante -, ¿ no quieres entrar ? - pregunta al tiempo que acaricia mi rostro.

Doy unos cuantos pasos dentro de aquella casa y me encuentro con un terrible panorama: chicas semidesnudas bailándoles sensualmente a los compañeros de Kyle, chicos bebiendo como si su vida dependiese de ello y en el fondo pude divisar a unos cuantos grupos de personas drogándose.
En definitiva, Madison Hope no pertenecía a este mundo.pero Kyle lo vale y aunque el tampoco pertenezca al mio lo intenta.

En el fondo del salón, diviso las siluetas de Ryan y Kath, hablando mientras sueltan una que otra carcajada, por lo que inmediatamente doy pasos acelerados hacia ellos.

- Hola - mi respiración es un caos.

- ¡Mad! - saluda Kath con emoción -te busque como loca ¿ donde estabas ? - pregunta.

- bueno esque tuvimos muchas complicaciones al terminar el partido ¿no te enteraste? - le pregunto aunque es posible que Ryan ya le alla dicho - por cierto este lugar esta horrible - digo señalando mi alrededor.

- ¿que si no me entere? lo que yo hubiese dado por ver a Kylie en esas - dice con burla provocando que Ryan ria con ella  pero yo de inmediato les lanzo una mirada reprochante - oye y pense que ya te habías acostumbrado a esto,es mas no sabes el infierno que pase porque aquí el joven presente-señala a Ryan- se esfumo y quede sola-dice pero noto algo en su mirada hasta podría jurar que un brillo se asomo por un segundo en ella;y Ryan solo le da una mirada a modo de disculpa.

- no aun no me acostumbro y no creo poder hacerlo - refuto y alguien llama a Ryan quien enseguida se va despidiéndose de nosotras

-Mad...aprovechando que Ryan se fue necesito contarte algo-en cuento dice eso noto algo en su mirada que nunca había visto parecía hasta asustada;pero algo llama mi antencion antes de que pueda responderle a Kath,asi que miro a mi izquierda que es donde se encuentra Kyle junto con sus amigos pero veo que uno de ellos le esta ofreciendo un cigarrillo pero ese no era cualquier cigarrillo asi que todos las alarmas se encienden en mi.

-Kath te prometo que hablaremos luego esque tengo que ir con Kyle-le señalo donde Kyle se encuentra y se que eso no le agradara pero ella tiene que entenderme-adios Kath hablamos mañana ¿ok?-digo y me alejo de ella apenas me asiente para dirigirme asía donde esta Kyle

- ¡ Kyle ! - grito a lo lejos.

Inmediatamente Kyle dirige su mirada hacia mi cara de horror por lo que se aleja de sus amigos afortunadamente rechazando lo que le ofrecian.

- ¿ qué pasa, nena ? - pregunta con preocupación.

- No pasa nada, es solo que no quiero estar más aquí, Kyle - pronuncio cabizbaja.

- oh... - acaricia la comisura de mis labios -, si quieres podemos ir a mi casa - propone.

- ¿ y podemos comer algo también ?, tengo hambre -, digo con vergüenza.

- Claro que si, preciosa - sonríe -, solo déjame despedirme de mis amigos y nos vamos. Espérame en la puerta - dice mientras se aleja de mi para ir a despedirse de sus amigos.

Obedezco y me dirijo a la puerta principal a esperar a Kyle.

20 minutos después/Casa de Kyle.

Nos encontrábamos tumbados en el sofá de la lujosa sala, comiendo unas deliciosas hamburguesas mientras veíamos una serie.
De repente Kyle voltea su rostro y clava su mirada en la mía por lo que yo me pongo nerviosa

— ¿ qué pas... — ni siquiera me da tiempo de terminar la frase que estaba a punto de decir porque unos calidos labios no me lo permitieron.

Los labios de Kyle se sincronizaban ferozmente con los míos mientras apretaba cada parte de mis muslos. Con cada caricia de Kyle, sentía que una corriente se expandía por cada parte de mis venas, con cada segundo que pasaba en esas condiciones, sentía que quería más, estaba perdiendo mis estribos, sin embargo no me importaba, no ahora.

— ¿ tienes condones ? — suelto en medio de jadeos pero muy segura de lo que quiero hacer.

Kyle, mete su mano en su bolsillo izquierdo y de el saca un condón.

no sé en que momento terminé encima de Kyle, es más ni siquiera sé en que momento deje mi hamburguesa en la mesa.
Lo único de lo que si estaba segura, era de que estaba a punto de llegar a lo que suelen llamarle el punto máximo, más conocido como climax; meneaba una y otra vez mi cadera encima de Kyle, mientras nuestros sonoros gemidos se sincronizaban al igual que nuestros besos salvajes.

— sigue así, Madison — dice Kyle en medio de jadeos.

De repente Kyle se monta encima de mi y comienza a besarme ferozmente el cuello, como si su vida dependiese de ello, mientras me estampa contra la cama.
Enrollo mis piernas en sus caderas, acto seguido, Kyle estampa una nalgada en mi trasero, inconscientemente arqueo mi espalda mientras suelto un sonoro gemido lleno de placer.

— ¡ Oh Dios, Kyle ! — jadeo perdiendo el control.

— Vamos, gime mi nombre, Madison — dice Kyle perdiendo los estribos de si mismo.

— No — respondo con picardía.

— ¿ No ? — sonríe Kyle con malicia.

Recibo otra inesperada nalgada, a lo que gimo, esta vez más fuerte.

— ¡ Dios, Kyle ! — Jadeo.

De repente, siento que llego a ese punto máximo, sintiendo así como una bomba de placer estalla dentro de mi.

— Oh, Madison — gime, mientras besa mis labios con rapidez — ¿ segura que esta es tu primera vez ? — pregunta al tiempo que suelto una pequeña carcajada.

— claro que si, ¿ por qué ? — lo observo con lujuria.

— eres muy buena, incluso más de lo que pensé — declara, besando mi cuello.

Los segundos pasan, al igual que aquella sensación de placer.

— Te amo, Kyle — pronuncio al tiempo que mis mejillas se encienden.

— Yo también te amo, Madison — deposita un beso lleno de amor en mis labios.

— me iré a bañar — digo levantándome de el lugar en donde me encontraba recostada.

Kyle toma mi muñeca, impidiendo que saliera de la cama.

— ¿ podemos bañarnos juntos ? — pregunta con un toque de picardía.

— Claro que si — respondo.

1 hora después.

Nunca llegué a imaginar que todo esto sucedería, sin embargo, la mejor decisión de mi vida, fué haberle entregado mi virginidad a ese chico que me ha demostrado su amor en estos últimos meses.
Justo ahora, nos encontrábamos tumbados en la cama, abrazados.
Podría decir que esta ha sido la mejor noche de mi vida.