CAPÍTULO 50

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La preocupación de saga estaba aumentando al ver que no podía acabar tan fácil con su rival, pero eso no permitiría que acabaran con sus planes.

ambos enemigos estaban frente a frente, el poder de saga había incrementado al combinarse con el cosmos que le había robado a camus.

saga había creído que había ganado la batalla y no solo eso empezaría con todos sus macabros planes, pero todas esas ideas fueron desapareciendo al ver que el caballero de escorpión aun seguía en pie, trataba de ocultar su expresión de asombro pero no permitiría que el fura aun un obstáculo en su camino, acabaría con el ahora y esta vez para siempre.

-¿que pasa saga?- pregunto el heleno teniendo una pequeña sonrisa irónica.

-no tengo tiempo para esto- exclamo saga con un tono de voz de enfado, -difícil de matar o no te voy a matar y esta vez me voy a asegurar de no fallar-.

La expresión de milo era de enfado, no veía la hora de verlo acabado -yo no creo que te daré ese privilegio, primero te acabo yo con mis propias manos, pero antes quiero hacerte pagar por todo lo que le has hecho a camus-.

-milo, tu no eres un rival digno para mi ahora, tengo mucha mas poder y fuerza que tu gracias al cosmos de camus, te matare fácilmente o prefieres morir aplastado cual bicho, acabare contigo- exclamo saga con mucha seguridad.

la ira de milo iba aumentando con cada palabra que salía de la asquerosa boca de saga, -¿aun sigues soñando con eso saga?-. -realmente crees que te voy a cumplir ese deseo, lamento mucho tener que bajarte de las nubes en las que estas pero lo que pasara ahora es que tomare a camus y los sacare a los dos, mi amado cubito y mi pequeño bichito mientras que tu te retuerces del dolor y sufrimiento que te causara mi mortal aguja escarlata, es tu fin saga-.

-aun sigues creyendo que es tu hijo milo-.

-no lo creo, lo se-.

-como puedes estar tan seguro de eso, acaso quieres que te diga de todas las veces que hice a camus mío, que pude tenerlo en mis brazos, todas esas noches de placer entre ambos, lo que espera el es el resultado de todas esas veces que lo hice mío-.

milo se enfado aun mas al escuchar cada palabra de saga, su cabeza empezaba a reflejar todos esos momentos, estaba que perdía el control, algo dentro del heleno quería salir a flote y acabar con todo de una buena vez sin importar nada, su sed de venganza crecía cada vez mas.

-tu solo dices muchas estupideces saga, pero al final sigo ganando yo por que  como sea los sacare de este maldito infierno en el que tu lo llevaste-. exclamo milo alzando un poco su voz.

saga solo soltó una pequeña sonrisa burlona mientras su mirada aun se posaba en la mirada enfadada del heleno, el cosmos de saga empezaba a arder, -enserio seguirás creyendo eso, bueno tendré el gran honor de explotar esa burbuja que te as hecho y decir que eso no se podrá hacer, tengo la libertad de acabar contigo y con camus-.

-no eres capaz de atacar a camus, no que tanto lo quieres saga-.

-de hecho milo, si mi hermano y yo no podemos tenerlos, entonces nadie los tendrá, ustedes dos estarán juntos para su muerte-.

NARRA MILO

ahora muchas cosas tenían sentido después de lo que me había contado el viejo maestro sabia ya perfectamente lo que habían planeado y eso yo no se los iba a perdonar, pero al saber de que saga era capaz de matar a camus por no tenerlo a su lado provocaba que yo sintiera algo de miedo pero después ese miedo se transformo en una ardiente furia que inundaba todo mi ser, mi deber era proteger a mi amado esposo y a mi hijo, iba hacer que saga y kanon pagaran por todo una poderosa batalla de mil días estaba por empezar pero estaba batalla terminaría cuando un caballero caiga sin vida al suelo.

-saga, crees que vas a ganar pro en realidad eres un asqueroso ser que a llegado a arruinar la vida perfecta que tu nunca podrás tener-.

-milo, estas tan..-

-CALLATE QUE ESTOY HABLANDO YO!!- grito milo interrumpiendo a saga y mandándolo a callar de una buena vez. -todo esto fue un plan que tu y tu hermano hicieron con en el de separarnos a camus y a mi, debo admitirlo aun que eso me enfade de que lograron engañarnos perfectamente creyeron que se había acabado todo y que ustedes saldrían triunfando al final, patéticos, podrán separar nuestros cuerpos pero jamás podrán evitar que mi corazón arda de amor por camus, jamás podrían evitar nuestro amor pedazos de mier-...


era claro que la ira de milo cada vez aumentaba mas, estaba en juego no solo su vida si no que tambien la de su amado, una poderosa batalla iba a comenzar.

UNA FUERTE UKEADA 🌌 MiloxCamusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora