de tu mirada caí cautivo...
de tu sonrisa me volví fiel devoto...
de tus caricias tu mas ferviente esclavo...
y de tu lejanía... fui tu cruel verdugo
Los personajes son pertenecientes a Eiichiro Oda.
solo la historia es creación mía.
Pd. las actual...
La decisión estaba tomada, y a paso firme aquel joven de cabellos verdes retomó sus pasos a su antigua vida... solo con un único propósito... darle fin. A cada paso los recuerdos de la noche anterior lo seguían, había sido un estúpido al guardar silencio... había sido un idiota al no pedirle que se quedara... había sido un tonto al perderla de nuevo... pero todo eso está a punto de cambiar... ya estaba cansado de aquella farsa en la que vivía, ya estaba cansado de tocar a aquella mujer que era su esposa, ya estaba cansado de seguir atado a toda aquella miseria, simplemente ya estaba harto de esconder todo aquello.
La mañana siguió su curso y al llegar a su hogar una muy enojada mujer lo recibió... no se había aparecido en toda la noche... no había dicho dónde iba... y ahora regresaba con una luz en sus ojos... luz que nunca vio con ella... luz que ahora le indicaba que todo estaba por acabar... luz que le gritaba que había perdido... sin siquiera tener una oportunidad.
Aquella mujer lo amaba... no podía negarlo... pero sabía que él no, muchas veces quiso dejarlo... pero siempre creyó que con el tiempo él llegaría a amarla... pero ahora entiende que eso jamás pasará... él tiene a alguien más en su corazón... y no es ella, con dolor guarda su enojo y lo hace pasar, toman asiento en aquella mesa donde tantas mañanas compartieron en silencio... donde miles de esperanzas se formaban en ella a la espera de que él llegara a amarla... donde ahora todo llegaría a su fin.
Palabra a palabra va sintiendo como su corazón se rompe... no lo puede evitar... duele... duele como el mismo fuego del infierno... duele como la más grave herida en el alma... pero no puede hacer nada... él ha tomado una decisión... decisión que sabía que tarde o temprano llegaría, lágrimas adornan su rostro... quiere gritar... quiere recriminarle... pero el dolor no la deja... con paso tranquilo se levanta de aquella mesa, no sabe qué hacer... quiere retenerlo pero sabe que será inútil.
Con mucha dificultad pronuncia aquellas palabras que jamás creyó decir... pero que ahora se veía forzada a hacerlo.
MIYAKI: eres libre Zoro...
Aquellas simples palabras fueron duros golpes en su corazón... estaba dejando ir a la persona a la cual amaba... pero que más podía hacer si él ya había decidido... que más podía hacer si él tenía claro a quien amaba... deseaba culparlo... deseaba recriminarle... pero no podía... con calma tomó sus cosas y antes de dejar aquella casa lo vio una última vez... y antes de salir unas últimas palabras fueron pronunciadas.
MIYAKI: adiós Zoro... espero seas feliz a su lado
Unas últimas lágrimas fue todo lo que logro ver, antes de que aquella puerta se cerrara por completo... poniéndole fin a toda esa farsa... poniéndole fin a todo ese daño... no podía evitarlo... le dolía haberla engañado... le dolía haberle mentido... pero no podía hacer más... al fin había tomado una decisión y era hora de terminar con todo aquello.
POV. ZORO
Al fin había terminado con esta farsa... al fin liberaba a aquella mujer de este cruel castigo... sé que no fui justo... sé que fui duro... pero no podía seguir con esto... no después de todo lo ocurrido, el ver sus lágrimas me dolía... el ver la tristeza en su rostro me llenaba de culpa y no era para menos... fui un egoísta al ilusionarla todo este tiempo... fui un idiota por mentirle de esta manera... lo sé... sé que no tengo perdón... sé que está en todo su derecho de odiarme... lo sé... pero no podía seguir con esto.
Con calma me levanto de aquella mesa y me dirijo a mi habitación... habitación que ahora se hallaba vacía... tan vacía como siempre la sentía... no puedo negar que fue buena esposa... pero no era justo seguir con este engaño... no la amaba... pero creí que con el tiempo lo haría... que tonto fui.
Sentando en mi cama una vez más las lágrimas vienen a mi... al fin era libre... al fin había terminado con esta farsa... al fin había dejado en libertad a aquella pobre alma que me amaba... al fin le daba la libertad que ella merecía... con cada lagrima el peso en mi corazón disminuye... no puedo negarlo... me siento mucho mejor ahora que ella se ha ido.
Las lágrimas cesan... y por un instante la felicidad me inunda... al fin era libre... libre para poder buscarte... libre para luchar por tu amor... amor que jamás debí perder... amor que jamás debí ignorar... amor que jamás debí tratar de olvidar. El día pasa... y junto a este mi dolor se aleja... al fin había terminado con aquella mentira y era hora de dar un paso al frente... paso que en su momento no di... paso que en más de una ocasión retrocedí... paso del cual ahora me arrepiento de no dar... era hora de tenerte de regreso a mi lado... era hora de volver a aquellos tiempos donde nos amábamos en silencio... donde escondimos el amor y disfrutamos de la pasión... era hora de regresar a aquellos tiempos donde tú eras mía y yo era tuyo... es hora de regresa a esos tiempos y no dejarte ir.
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