Calor

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Se despertó en una habitación con paredes blancas, una silla y un pequeño buró al lado de su cama, el brillo del sol se colaba por una ventana haciendo que la pared lo deslumbrara.

Ahora, Yoongi había estado varias veces en esta situación, como para saber que estaba en el hospital de Corea, ya sea trayendo a algunos de los aprendices a este lugar, cuando no se alimentaban bien, o esa vez que Hoseok se sentía mal y como pudo, lo ayudó cargándolo para poder traer al débil bailarín.

Escuchó un sonido a su lado y rodó la cabeza, asesorando su alrededor, y se dio cuenta de que no estaba solo.

El movimiento alertó a la otra persona que se encontraba dentro de la habitación. Una enfermera.

-Oh, al fin despertaste, iré por el doctor.

-Q-que...- Un ataque de tos lo detuvo de poder hablar, sentía la garganta seca y como si un tren o algo parecido, le hubiera pasado encima.

¿Qué rayos pasó? Fue lo que pretendió articular, antes de que la enfermera saliera del cuarto.

Recordó haber subido al avión y encontrar su asiento. Lo único que tenía en mente durante el viaje, era lo que pudiera diagnosticar el doctor y si esto repercutiría en su salud a la larga o si lo detendría de hacer presentaciones, si es que tendría que quedarse en Corea.

Después de algunas horas, quiso poder distraerse con alguno de los chicos y matar el aburrimiento que sentía en esos momentos, pero recordó que en esta ocasión, solo uno de los managers quien dormía en el asiento de al lado estaba para acompañarlo y la nostalgia le pegó con fuerza al estar lejos de los miembros y se acordó que no tuvo tiempo de despedirse de todos adecuadamente por la falta de tiempo.

Suplicó que la dolencia que estaba empezando a sentir no durara todo el vuelo.

Repentinamente, recordó lo que Seokjin le había dado y sacó el suéter del vocalista de su bolsa de mano, llevando la prenda a su nariz.

Había extrañado el aroma natural a lavanda de Seokjin, después de meses de no olfatear al Alfa, esto era como estar abrazando al mayor.

Cerrando los ojos, enterró su cara aún más en el suéter y poco a poco sintió el perfume de Seokjin apaciguar su dolor físico y mental, calmandolo y arrulladolo para dormir un rato.

Sin embargo después de unas horas, sintió incomodidad y despertó debido a que sus ropas empezaban a sofocarlo, y súbitamente, un calor abrasador se apoderó de su cuerpo, haciéndole sudar. ¿Qué pasó con el aire acondicionado?

Sintió el maldito dolor en su abdomen más fuerte que nunca, haciendo que se encorvara por sentir como sus músculos se contraían, despertándolo por completo cerró los ojos con fuerza, tratando de que las lagrimas no salieran, contó en su cabeza tratando de regular su respiración.

"¡¿Qué me está pasando?!"

El avión estaba bajando de altura y Yoongi se propuso a aguantar un poco más para decirle al mayor que se sentía mal y no hacer un escándalo con toda la gente en el avión para presenciar.

Abrió los ojos de golpe cuando sintió que su ropa interior se humedecía con el lubricante natural que su cuerpo producía en su celo.

"Nonononono".

Sintió tanta ansiedad que empezó a hiperventilar, unas cuantas lágrimas se le escaparon y maldijo por lo bajo.

Inesperado | JinsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora