Tercera mentira.

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— ¡Sid-sensei! Lamentamos, la, demora.

Zack se apoya en sus rodillas tratando de recuperar la respiración lo más rápido posible conmigo detrás de él, de la misma manera. El profesor nos deja pasar, con la advertencia de que si vuelve a ocurrir nos quedaremos fuera.

Nos dirigimos a nuestros asientos en silencio, completamente cansados por haber subido esas estúpidamente infinitas escaleras corriendo. Probablemente en este momento estoy sudando un poco, qué suerte que mi primer día tuve una paciencia tremenda para subir esas escaleras, sino habría muerto.

— Algo tarde, ¿eh? —me susurra Kid, quien se encuentra a mi lado.

— ¿Eh? ¿Qué no Patty estaba al lado mío?

— La convencí de cambiarme el lugar con algunos dulces —la menor de las hermanas Thompson saluda al lado de Kid. Se encuentra haciendo alguna cosa con las hojas de un cuaderno viejo.

— Ya veo —sonrío con leve timidez, sintiendo mi corazón agitarse ante la idea de que quiso sentarse al lado de mí.

No habla más luego de eso, y lo veo anotar algunas cosas en su cuaderno, probablemente tomando notas, así que yo hago lo mismo. Alzo mi vista para ver al profesor Zombie, quien está explicando algo sobre las ondas de alma y cómo las personas pueden afectar las ondas ajenas.

Recuerdo cuando miré a Kid por primera vez. Mi onda de alma tembló en ese momento, y fue probablemente por la impresión que me causó el verlo.

Veo una hoja con los costados perfectamente cortados deslizarse hasta quedar encima de mi cuaderno, y una delicada mano con unas uñas perfectas encima de ella.

"Si hablamos mucho, entonces Sid-sensei nos terminará riñendo, así que podemos hablar así, ¿no?

DTK."

Mi rostro enrojece al terminar de leer como si se tratase de una confesión, pero es suficiente para hacer latir mi corazón de adolescente.

"Se ve como una buena idea ^^, está bien".

"Oye, ¿por qué llegaron tarde? (*゚ー゚)ノ".

"Miramos a un gato en el camino, y le compramos comida (>﹏<)".

Cuando nos dimos cuenta, había sonado la campana que finalizaba la clase. Guardé la nota en mi bolsillo, y bajé de mi asiento junto con Zack, quien hablaba sobre ser demasiado malo en los estudios.

— ¿En serio? —pregunté ante sus quejas, y justamente iba a hacer un comentario sobre ayudarle, pero Kid se adelantó a mí.

— ¿Oh? Yo soy bueno en teoría, podría ayudarte con eso.

— ¿Lo harías? —rápidamente Kid asiente ante la pregunta, y se nos acercan todos los demás, entre ellos los otros dos tontos que apoyan el no saber.

— Podríamos tener una sesión de estudios en mi casa —tiene una linda sonrisa en su rostro cuando lo menciona, y como si se tratase de un impulso, hablo.

Y-yo también necesito un poco de ayuda con lo teórico.

「Mentiras | Death The Kid」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora