Estaba concentrada al cien por ciento en la comida que tenia en la bandeja, mientras mi hermano conversaba con los Collins, Espinosa y Rivera; hasta que agregaron 4 sillas más a la mesa.
-Espero que no les moleste, solo queríamos sumarnos y conocer a los chicos nuevos.-dijo uno.
Levante un poco la mirada y vi a los idiotas , no les tome importancia y seguí jugando con la lechuga en mi tenedor.
-Mi nombre es Taylor, y ellos son mis amigos Nash,Carter y Aaron.—dijo el de la bandana en la cabeza.
Tome un último sorbo de mi caja de jugo y me levante para ir por otro.
—Ian ahora vuelvo voy por uno.—dije señalando la caja vacía evitando el contacto visual con Caniff y sus amigos.
—No te pierdas preciosa.—dijo el de ojos azules.
Bufé y me di media vuelta sin recibir respuesta de mi hermano. Encargue mi bolso con Matthew e hice mi trayecto; observe que la fila de la máquina expendedora era sumamente larga y no quería esperar demasiado así que me dirigí a la barra del almuerzo.
Llegó mi turno y pedí amablemente mi apreciado jugo, volteé hacía atrás y me encontré con dos chicos iguales.
«Cosa de gemelos» pensé.
Me sonrieron amablemente e hice lo mismo, llego la hora de pagar y metí la mano en el bolsillo trasero de mis jeans.
No traía dinero. Mierda esto solo me pasaba a mí.
Rebusque como una loca hasta que pagaron por mi.
—Muchas gracias. No era necesario, pero en fin les debo una.— Sonreí avergonzada a los gemelos frente a mis ojos.
—No hay de que, Alexia.—dijo uno.
—Yo soy Finn.
—Y yo Jack.
Se dieron una mirada rápida y añadieron "Jack y Finn Harries"
—Bueno yo soy Lexi Hale.—respondí.
Caminamos hacia mi mesa, y de repente todo se sintió demasiado incómodo.
Había comenzado una guerra de miradas entre los "idiotas"y los "Harries".
—¿Que sucede?— susurré.
—Grier y sus amigos.—dijo Jack con el ceño más que fruncido.
—Creo que nos veremos luego, Alexia.—dijo Finn besando mi mejilla y prácticamente arrastrando el trasero de su hermano fuera de la cafetería.
Fulmine con la mirada a Caniff quien seguía observando a los gemelos. Y sus amigos solo me dieron su sonrisa arrogante.
Terminé mi comida mas por obligación que por hambre.
Tome las correas de mi bolso y las pase por sobre mis hombros.
—Te veo después de clases; en el estacionamiento, Ian.—le dije.
—Hablando de eso, Lex. —se rascó nerviosamente la nuca.
Bufé.
—Tendrás que irte sola a casa. Me quedaré con ellos, al parecer hay lugares en el equipo de Lacrosse.—dijo tomando su mochila y marchándose con Grier,Caniff,Reynolds y Carpenter.
Hice una rabieta parecida a la de un niño pequeño. Siempre me hace lo mismo.
—Podría llevarte. —se ofreció gentilmente Matthew.
Asentí.
Fui hasta mis últimas clases y al sonar el timbre de salida; fuí hacia mi casillero y tome algunos libros. Me giré para ver a Matthew quien jugaba con sus manos y saque mi móvil que permanecía en vibrador. Tenía un mensaje de Austin "Mataré a Ian cuando llegué no te preocupes. Por cierto ya estoy aquí. Te amo enana no tardes"
"Como que lo matarás? Que ha hecho?"
"Te ha mandado sola ;)"
"Brujillizo, te veo en un rato."
Matthew y yo salimos rumbo el estacionamiento y me llevó hasta mi hogar.
Al llegar me encontré con Austin y Brownies.
—Austin!—dije y solté mi bolso en la entrada.
Corrí hacia él que me esperaba con los brazos abiertos pase de largo rumbo a la bandeja.
Cuando se percató de que iba hacia la preciada bandeja el la retiró en un rápido movimiento, provocando que cayera al piso. Atravesé mi pie causando que tropezará y nuestros amados brownies volaron por los aires en cámara lenta. Ian abrió la puerta principal con la pequeña stephanie mientras los brownies caían sobre ellos como si no hubiera un mañana. Deben imaginar esto en cámara lenta, la expresión de horror en el rostro de Ian, para que después se lanzara al piso y rodara para dramatizar.
No aguante mas y estalle a carcajadas, y la ganadora de todo esto fue más y nada menos que Holly Stephanie.
—Noooo!—grito Austin mientras hacia rabietas en el piso.
—No puede ser que una niña pequeña haya pateado nuestro cu...—deje la palabra en el aire ya que Ian me interrumpió.
—Traseros, Alexia.—dijo fulminandome.
Le enseñe el dedo medio y sonreí descaradamente.
—Hablando de traseros Ian, ¿Porqué abandonaste a mi clon para que un desconocido la trajera de vuelta a casa?—dijo Austin.
—No era un desconocido; era su nuevo amigo Matthew.— dijo Ian restándole importancia al asunto.
—Un amigo el cual acaba de conocer,Ian.
Diablos viendo esta escena juraría que el maduro aquí es Austin y no Ian sin embargo la madura de la familia es Stephanie.
Solté un bostezo y decidí dejar a mis hermanos, de igual forma tarde o temprano Austin se vengaría.
Fui a la cocina con nana y le ayude a preparar la cena y unos brownies para mi.
***
1 hora después de saborear los apreciados brownies, llego Austin a la cocina.
—Alexia, mueve ese regordete trasero; Ian ha despertado.