faltaba poco para " el día de la cosecha", los terricolas pronto terminarian su periodo de adaptabilidad y se convertirian oficialmente en Shures. oliver estaba tan adelantado que no necesitaba todas las terapias del programa, por ende tenia mucho tiempo libre, sin embargo el resto de los terrestres no, asique frecuentemente se sentia solo. paseaba por las instalaciones y evocaba recuerdos de la tierra, uno en especial. tendria cerca de 8 años cuando su tío le compro su primera computadora, fue a esa tierna edad que exploro cada parte de aquel maravilloso mundo cibernético, su amor por la programación y la tecnologia era justo lo que mantenía su cordura en sus momentos de soledad, cada unidad y formula le hacian sentir que el era un importante engranaje de la maquinaria mas grande del mundo, que su existencia tenia sentido, algo que la escasa atención familiar y su entorno estudiantil dificilmente le habian transmitido. Entre computadoras el sentia que era necesario, mientras que la sociedad lo trataba como un parea, como si no importara si estaba vivo o muerto. ¿como podria alguien sobrevivir a la extenuante soledad? el aprendio el lenguaje de unos y ceros para comunicarse con sus queridas maquinas, mientras otros tenian fiestas de alcohol, el se encerraba en su habitacion a tener su propia fiesta de numeros, las computadoras acataban sus ordenes, lo escuchaban mejor que cualquier humano. al recordar su olvidada pasion derramo una lagrima, sentia que de cierta forma traicionaba a la persona que fue y a sus sueños para el futuro.
hundido en aquella desdicha no pudo percatarse de cuando una mano enorme tomo su muñeca y tiro de el adentrandolo en una habitación desconocida. los brazos musculosos de el capitan rodeaban la delgada cintura de oliver y le mostró una brillante sonrisa de dientes perfectos.
- te extrañé como un loco, no podía esperar para verte.
La sola frase paralizó el corazón de oliver. El gigante acarició la mejilla del menor y sin pedir perdon o permiso, prosiguió a plantarle un beso, devoró los labios de oliver con toda la energia que su cuerpo contenía. la apasionada escena borro los sentimientos de angustia, los recuerdos y los complejos, el capitan fue capaz de deshacerse de todo. siendo sostenido con firmeza en aquellos brazos musculosos, rodeado por el agobiante calor corporal de wheren, no pudo sentirse mas que protegido, tanto de quienes lo lastimaron en el pasado como de si mismo, aquel gigante tomaba todos sus miedos y rencores y los transformaba en esperanza y dulsura. queria a este sujeto, su corazón se afitaba de solo imaginar que esta seria su vida, enterrado en los fuertes brazos de el capitan, rodeado sus dulces palabras y bendecido con tanto amor como solo aquel gigante era capaz de dar.
- wheren es el principio, wheren es el final.
Los pensamientos escaparon por su boca y solo se dio cuenta por la confundida mirada de su amante quien habia dejado un camino de besos hasta su cuello, solo detenido por la sorpresiva frase de una voz temblorosa.
- ¿como?
Una sonrisa dudosa junto con ojos intrigantes acosaron a el avergonzado terricola, quien intentaba esconder sus rojas mejillas entre sus palidas manos.
- "el principio y el final, contigo volé al espacio y contigo empece a amar, contigo dejo el pasado, contigo quiero continuar"... es un soneto... lo pense para ti. no lo planee ni nada, solo lo pensé.
oliver jamas se había interesado por la poesia, poco sabia sobre las rimas y aun menos sobre los sentimientos que estas encerraban, pero aun así se sentia inspirado, por extraño que sonara, el amor y la dulzura que wheren le profesaba, le hicieron descubrir una parte poetica que el no sabia que tenia. podria facilmente comparar a su gigante con la mas encantadora musa, queria escribir, diseñar y crear para el. era algo tan poderoso y energizante, algo que jamas habia sentido por nada ni nadie.
algo se removió en el interior del capitan, la esperanza y la felicidad tenían su cabeza hecha un desastre, la creatura mas perfecta a sus ojos le profesaba su amor, era deseado, correspondido, amado. sentia que era justo el momento exacto en su vida, ese momento en el que estas tan lleno de felicidad que no es comparable con ningun otro, un segundo en el que el tiempo se detenia para grabarlo todo a fuego en su alma, en donde solo existe el sentimiento de estar completo e inquebrantable, donde nada podría derribarte.
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Saturno necesita pasivos (BL)
Ciencia Ficción«¿Que harías si un extraterrestre te secuestra? Probablemente no levantarías el culo suplicándole para que te embarace. ¿Entonces por que yo si?» Oliver no era más que un simple estudiante de programación hasta que Extraterrestres vinieron a la tier...