Reacciones | Campamento mestizo

Potena (lemon)

POTENA RE HOT 😏😏😏

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LEMON
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Pedido

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-Yo puedo controlar el agua, y tú sabes mucho. Así que podemos disfrutar una gran cantidad.

-¿No se enterará nadie?

-Nadie.-le respondió Poseidón.

Al oír su respuesta la diosa se quitó el casco, dejando ver ahora quién era.

-Te juro por el río Estigio que si alguien se entera de esto...

-Los libros nunca se mojaran al caer a mi reino.-repitió con cansancio el dios de los mares.- Ya me lo has dicho...-se puso a pensar, para luego sonreír sarcásticamente.- ¿Cuántas veces has gemido mi nombre y pedías más?

-Dioses.-se quejó Atenea.- ¿Porque hago esto?

-Porque te mojas mucho al verme.-la diosa de la sabiduría le miró sorprendida.- Controlo muchos líquidos, así que lo noto. Y tampoco hace falta ser Eros para darse cuenta.

-Calla y follemos.

-Lo típico es decir calla y bésame, pero me gusta más esta versión.

La diosa se acercó con fiereza al dios, para luego estampar sus labios contra los suyos. Sus manos se acercaron al torso descubierto del dios de los mares, para luego apegarse a él.

La diosa, ayudada por él, se quitó la camiseta. El dios lamió seductoramente su labio inferior al ver lo que llevaba.

-Me gusta más la ropa moderna para este tipo de eventos.

Se acercó al cuello del dios, para empezar a morder por esa zona.

-¡Ohhh!-gemía Poseidón.

Ahora las manos de la diosa fueron hacia su espalda, para volver a retornar esos besos con gran pasión que se daban. El labio menor de Poseidón se encontraba entre los de Atenea, para luego soltarlo.

Ahora los besos aumentaron, y cada uno llevaba a la otra persona más calor que un termómetro en pleno agosto. Por cada beso que se daban cada uno sentía un cosquilleo por todo su cuerpo; el cual terminaba como una mini explosión en sus partes.

La boca del dios de los mares se encontraba en el escote de la diosa de la sabiduría, mientras que la de ella estaba en el cuello del dios; mientras disfrutaba reconociendo el buen terreno del que estaba hecho su esculpido torso.

De sus esculpidos pectorales pasó a los abdominales, los cuales estaban más o igual de marcados que sus pectorales.

Ahora el dios se encontraba contra la pared, y entre sus brazos gigantes estaba una Atenea versión humana. La diosa levantó la vista y vió al dios en versión Olímpica, para luego bajar su mano por su cuello hasta su pecho.

-Vuelve a la estatura humana, por favor.

-Anda.-Poseidón en ese momento se oyó como un niño pequeño.- Si ya te gusta mi polla en estatura humana, imagínate tú así y yo en modo olímpico.-empezó a mirarla con ojos de foca bebé.- ¡Porfiiii!

Atenea suspiró cansada, para luego taparle los ojos.

-Me lo pensaré.

El dios volvió a su estatura normal, para luego teletransportar a los dos hasta.... ¿un baño del Olimpo?

-¿Qué hacemos aquí?

El dios se puso detrás de ella, para luego besar con ferocidad su cuello y estrujar con sus manos sus pechos. Apretaba un pezón, mientras al otro le daba masajes circulares.