28 Días Para Enamorarte

Día 5

Cuando el golpe llegó con más fuerza de la que esperaba Karin tuvo que morderse el labio inferior y sin evitarlo jalo de las cadenas que aprisionaban sus manos unidas a la cabecera de la cama, apenas se recuperó otro golpe en su glúteo llegó teniendo el mismo efecto en ella, se sonrojó sin poder evitarlo quería pedir más dolor porque sabía que eso traería consigo más placer y que Neji Hyuga lo ocasionara era lo que más le excitaba de todo.

Algo en la fuerza de los golpes con la fusta le dio a entender lo enojado que Neji se encontraba, al principio eso no le molestó en lo absoluto pero cuando sintió que los golpes no tenían una pausa entre ellos fue cuando empezó a incomodarse.

—Rojo —habló de inmediato después de último azote, pero Neji no pareció escuchar la palabra de seguridad al darle otro más así que se retorció un poco y habló molesta— cariño basta, me estás lastimando mucho.

Neji paró al darse cuenta que no se encontraba presente del todo, su mente había divagado por unos instantes recordando la expresión de furia de cierta castaña, sus palabras y sus acciones de desprecio hacía él aún sin conocerlo del todo, con la fusta en la mano practicando una sesión de sexo y dolor con Karin se había dejado llevar por el enojo y frustración que sentía desde aquella mañana.

—Lo lamento —se disculpó apartándose de ella dejando la fusta sobre el mueble más cercano, en ese momento sus ganas de seguir con aquello se habían espumado como nunca antes en su vida y todo porque no podía sacarse de la cabeza la mirada furiosa de Tenten hacía él.

—No importa, ahora desatame por favor —Karin sonrió con algo de irritación pero aún así pensó en que Neji seguiría con el juego y le diría que se callara, pero aquello no pasó, con la venda aún en los ojos sintió como Neji la desató segundos después de haberselo pedido, Karin frunció el ceño de inmediato quitándose la venda de los ojos para ver a Neji sentado en la orilla de la cama con una expresión pensativa y algo frustrada— ¿Qué es lo que sucede cariño?, esto no duró lo tanto como te gusta que dure apenas es el juego previo.

—Siento haberte hecho perder tu tiempo al venir, pero no puedo continuar —cerró los ojos hundiendo la cara en sus manos tratando de tranquilizar su estrés.

—Bien, sabes que esta relación no es mucho de hablar pero podemos hacerlo —Karin sonrió acercándose a él por detrás, colocó sus manos en su espalda en una clase de abrazo, Neji se apartó de inmediato como si el contacto le quemara la miró molesto de inmediato, Karin con algo de sorpresa recordó que él no le gustaba aquello— lo siento, sin tocarte lo olvidé, de cualquier forma acerca de hablar podemos hacerlo aún.

Karin se aproximó a tomar sus lentes de la mesa de descanso junto a la cama para después revisar las notificaciones de su celular.

—Esta maldita apuesta con mi tío tenía un truco para hacerla difícil, debí haberlo imaginado bajé la guardia — desvío la mirada con frustración sentándose de nuevo en la cama— se me acaba el tiempo y ella lo único que hace es mirarme con odio, pensé que quizás él le dijo algo sobre mi para odiarme pero mi tío no suele jugar sucio de esa manera.

—¿Ya le dijiste quién eres? — cuestionó Karin con una sonrisa divertida.

—Parece no importarle en lo más mínimo, incluso cuando se lo dije en esa cafetería el miedo de despedirla de su empleo no estaba ahí —Neji recordó la negativa de Tenten a tomarle la orden— y por si fuera poco esta mañana me enteré de que tiene una clase de un perro guardián a su lado que parece mirarla como si le perteneciera de toda la vida, esto solo lo hace más molesto dandome menos oportunidades de estar con ella a solas, maldita sea mi tío lo hizo a propósito, debió de investigarla antes.

—Suena a una persona muy tonta si me lo preguntas —Karin se burló mientras se acómodaba sus lentes y se comenzó a vestir— incluso después de saber quién eres y rechazarte así nada más, realmente no sabe la suerte que tiene de que le pongas un mínimo de atención aunque sea, cualquier mujer en su lugar estaría complacida de eso.

—Tengo que pensar en como llamar su atención, quién soy no funciona en ella.

—Si no funciona quién eres entonces demuestrale lo que puedes darle —Karin colocó frente a él ya vestida y sonrió cómplice— joyas, ropa, restaurantes que nisiquiera se imagina que existan, todo lo que puedes darle si se queda a tu lado mientras la convences de que le dirá a Hiashi sobre ti sin que se de cuenta, ninguna mujer con dos dedos en la frente podría resistir a todo eso— se arregló el cabello desordenado frente al espejo— date prisa antes de que a Itachi Uchiha se le ocurra lo mismo, no lo querrás dándote órdenes todos los años que restan de tu vida mientras trabajas para él, ¿no es así?

—Por supuesto que no, esa compañía le pertenece a los Hyuga —Neji sonrió confiado hacía ella— gracias por el consejo, creo que ya sé que hacer.

—Fue un placer cariño —le sonrió con seducción tomando su bolso dispuesta a irse— sólo espero que yo sea tu primera opción en tus relaciones personales cuando tomes el control de la empresa, no me molestaria para nada cargar el apellido Hyuga algún día en el futuro como agradecimiento a mis servicios prestados.

Karin se fue dejándolo solo, él sonrió confiado mientras ideaba lo mejor en lo que pudo pensar para ganar el juego y tomó su celular marcando a su asistente personal.

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Sasuke despertó con el ruido de la puerta del apartamento cerrandose, ni siquiera se molestó en ver a su hermano entrar ni cambiar la posición de descanso en la que se encontraba sabía que era él de todas formas.

—Si te encuentras tan aburrido deberías ir a conocer a la chica que Hiashi eligió —Itachi se colocó en la mesa de la cocina sonriendo mientras sacaba las cosas del supermercado una por una.

—No me interesa su estúpida apuesta —Sasuke respondió por debajo del libro que le cubría el rostro y solo dejaba ver su boca con una mueca de molestia.

—Ella es la clase de persona que me imaginé que Hiashi elegiría no tan a la ligera para estas situaciones —Itachi guardó varios vegetales en el refrigerador antes de continuar hablando— ya la conocí ese mismo día, es muy gracioso tiene una inocencia que confundes por un momento con algo de ingenuidad pero cuando habla es todo lo contrario a eso, es una persona interesante en verdad.

—Bien.

—¿Bien? — interrogó Itachi con curiosidad a su hermano mientras esté se levantaba del sofá con una actitud desinteresada— ¿es lo único que dirás?, ¿no te interesa convertirte en el dueño total de la compañía de los Hyuga solo por coquetear con una colegiala?

—Esto saldrá mal y lo sabes —frunció el ceño hacia él— las personas no son juguetes.

Itachi rio ligeramente divertido hacia su hermano.

—Claro que no lo son, ¿quién dijo algo de jugar?, yo iré en serio por eso me encargué de conocerla antes.

Sasuke no respondió tomó su libro de historia y se dispuso a irse a su habitación.

—Deberías conocerla en serio —casi se detuvo al oír a Itachi hablar de nuevo pero no lo hizo— su sonrisa es igual a la de Izumi.

Sasuke cerró la puerta de su habitación sin escuchar más a su hermano, se recargó en la puerta e hizo un gesto molesto, se recostó en su cama y siguió leyendo su libro en silencio.