28 Días Para Enamorarte

Día 15

Tenten inconsciente miró hacia la esquina de nuevo, cerró los ojos molesta consigo misma al haberlo hecho.

—Maldita sea...

—Parece que alguien se levantó más amargada de lo normal —Ino pasó detrás de ella depositando la bandeja de servicio en su lugar, que colocó a su lado y tomó los hombros de Tenten de espaldas volviendo a reír divertida —o tal vez tenga que ver con la ausencia de cierta persona desde hace dos días...

—No digas tonterías Ino.

—Del odio al amor sólo hay un paso, lo dicen mucho por ahí en las películas —Ino alcanzó a beber de un térmo de agua personal de sus cosas debajo de la barra y después siguió hablando— no creo que sea sólo para venderlas, el odio hacia alguien también ocupa un lugar especial en nuestras cabezas... aparte de que nos enseña el peor lado de la persona y opino que eso en realidad es bueno ya que no esperas el lado que es mejor así que cuando lo descubres... —alzó las manos despreocupada hacia ella— bueno, ya sabes te tomará tanto por sorpresa que hasta que podrías enamorarte perdidamente.

—Jamás me enamoraría de un sujeto así —Tenten respondió irritada cerrando los ojos.

—Bien, lo que tú digas jefa — Ino se fue a tomar un pequeño descanso al almacén aprovechando el flujo bajó de clientes.

Tenten siguió limpiando su área de trabajo, minutos después no pudo evitar voltear hacia la esquina vacía, maldijo de nuevo en voz alta.

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Entró a la quinta tienda que visitó sin encontrar nada que la convenciera de que sería suficiente para comprarlo.
Se sentía frustrada en realidad, después de todo se preguntó a si misma, ¿qué te podía regalar a una persona que ya tenía el suficiente dinero como para comprar todo lo que quería?, ¿que podría regalarle a alguien que parecía tenerlo todo y que apenas conocía?

Había pasado su examen con éxito, esa mañana había sido llamada por Kakashi para entregarle el examen, gritó de emoción y ella sólo pudo pensar en una cosa.

Una persona.

Agradecer siempre había sido de las principales lecciones que su padre le había enseñado, fue al centro de la cuidad para poder encontrar algo que regalarle a Sasuke para agradecer sus asesorías gratuitas.

Vio de reojo la tienda de libros, recordó que Sasuke le había dicho que leía en su habitación un viernes por la noche, seguramente porque le gustaba hacerlo, no pensó mucho y entró, busco con curiosidad libros de negocios pero al final no vio uno interesante.

Después paso su mano por la estantería de novelas de historia, reconoció un libro grande de edición especial sobre una batalla épica en tiempos antiguos, la portada era color dorado por completo con el emblema de una casa de caballeros en la portada, sintió un buen presentimiento acerca de el y lo llevo a la caja para pagarlo.

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Sasuke esperó en la entrada del edificio de la empresa de los Hyuga con algo de molestia, ella se había retrasado ya, él no toleraba la impuntualidad en las personas ni en el mismo, consideraba una falta de respeto hacia el tiempo de las demás personas.

Dio la vuelta para ingresar de nuevo al edificio.

—¡Sasuke espera!

Tenten llegó corriendo desde la esquina de la calle con la respiración agitada.

—Lo lamento, el taxi dio muchas vueltas.

—Ya tienes edad suficiente para tener un carro —le miró sin interés.

—Si... lo sé pero no he tenido tiempo para buscar uno... jeje me tiene sin cuidado en realidad —Tenten sonrió incómoda recuperando el aliento y después recordó y sacó de su mochila el examen que realizó hace días— ¡mira!, ¿es asombroso no?, sólo una mala de diez y todo gracias a ti.

Sasuke tomó el examen en sus manos y lo leyó con rapidez, después alzó la mirada inexpresiva hacia Tenten de nuevo.

—¿Y bien?, ¿no vas a felicitarme? —Tenten sonrió entusiasmada de escuchar el cumplido de su asesor.

Sasuke suspiró con molestia y levantó la mano hacia el rostro de Tenten, formó rápidamente un círculo con su dedo pulgar e índice de su mano derecha dejando los tres dedos restantes al aire, dirigió el pequeño golpe de su dedo índice hacia la frente de la chica.

—¡Auch!, ¿por qué rayos fue eso Sasuke? —Tenten sobó su frente de inmediato mirándolo molesta.

—Ésta es la fórmula que te expliqué al final, esa la última noche en mi departamento —Señaló la única respuesta mal en el examen— eres una idiota.

—¡No es justo Sasuke, debes felicitarme es un examen casi perfecto!, me gané tu cumplido con mi esfuerzo, ahora dámelo —reclamó la chica con una expresión infantil.

—No te ganaste nada —cruzó los brazos molesto luego de entregarle el examen de nuevo— La próxima vez será, esfuérzate más.

—Mmmm bueno... —Tenten abrió los ojos recordando cuando metió el examen de nuevo en su mochila, sacó el libro envuelto en papel para regalo y se lo extendió al chico, Sasuke abrió ligeramente los ojos al verlo— es para ti, para agradecerte por tomar tu tiempo libre para enseñarme, deberías ser maestro algún día, hiciste que entendiera en días lo que una distraída como yo no entiende en todo un semestre sin ayuda.

Sasuke sostuvo el libro viendolo con detenimiento.

—Espero que te guste, mencionaste que leías un viernes en la noche en lugar de salir con tus amigos... supongo que lo hacías porque te gusta hacerlo —Tenten desvío la mirada sonriendo poco después.

Segundos después Sasuke volvió a pegar un ligero golpe en su frente justo como antes.

—¡Auch!, basta de hacer eso, me causarás dolor de cabeza el resto del día, ¿y ahora eso por qué fue? —La castaña frunció el ceño hacia él sobándose la frente de nuevo.

—Nada en especial, liberaba estrés antes de regresar al trabajo —Sonrió con malicia hacia ella y Tenten lo miró con molestia.

—Un gracias sería suficiente, grosero.

—Tal vez la próxima vez —Sasuke sonrió y dio la vuelta de nuevo para entrar al edificio.

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No muy lejos de ahí Itachi observaba la escena con un maletín de trabajo en su mano, apenas llegó para ver qué aquel encuentro terminaba, se detuvo en seco cuando vio a Sasuke sonreír por unos segundos ya sin mirar a Tenten antes de entrar al edificio, y luego segundos después desvío su vista a Tenten quién hacia un puchero infantil viendo a Sasuke entrar al edificio pero segundos después antes de dar la vuelta e irse sonrió ligeramente sonrojada.

—Vaya... realmente lo planteaste muy bien ¿no es así, Izumi?, sólo espero que sepas lo que haces... aunque siempre parecías saberlo perfectamente, era lo que más amaba de ti —habló para si mismo antes de dirigirse a entrar al edificio para su reunión con Hiashi Hyuga aquella mañana.

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Gracias por sus comentarios y sus votos para esta historia, aunque no la comparto con fines de que los reciba de ustedes, en serio me pone muy feliz escribir cuando los leo, gracias por tomarse el tiempo de hacerlo, en serio gracias de corazón ❤️🤗❤️🤗❤️🤗 nos estamos leyendo pronto en otro capítulo❤️