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Louis se ríe y le pasa el Ketchup a Harry.

Vamos, ponle Ketchup, está más buena.- Dice mientras le deja la salsa al lado de su hamburguesa.

Hacía casi una hora que habían llegado al restaurante, no estaba demasiado lejos de sus casas y la comida era deliciosa. Por suerte, las preocupaciones de Louis de quedarse sin temas de que hablar se esfumó en el momento que vio a Harry, pues tenía tantas ganas de hablar con el, que hablarían de cualquier cosa.

Harry llevaba una camiseta blanca, también se había fijado en eso.

Realmente está buena. Pensaba que no sería para tanto.- Harry dice mientras da una mirada por el pequeño local. Era bastante lindo, con un estilo de los años 80, y música de esos años también, la favorita del rizado.- Aunque, relamente lo mejor es el local. Me encanta ésta música.

Louis abre los ojos levemente, como si las palabras del ojiverde le hubieran sorprendido.- A mi también, me encanta la música de los ochenta. En realidad la musica de los sesenta a los ochenta. Junto a escribir, es una de mis cosas favoritas.

Esta vez, el sorprendido era Harry.- ¿Escribes? Vaya... Eso es genial Louis.

Sí.- Dice contento, orgulloso de si mismo.- Ayer fue el último dia que fui al club de lectura y escritura, el profesor dice que es bastante bueno lo que escribo.

Bueno.- Harry le dedica una sonrisa y le mira, esta vez directamente a los ojos. Tiene que esperar dos segundos hasta que se acuerda de lo que iba a decir.- Si él lo dice es bueno... ¿Tienes pensado, no sé, escribir un libro? o ¿trabajar como escritor o algo así?

El ojiazul baja la mirada hacía su plato, del cual ya solo quedan patatas fritas, y niega con la cabeza, desde que estaban juntos era la primera vez que Harry no lo veía tan feliz, y eso le extrañó. Louis llevó una patata a su boca y habló. Intentando hacer como si los acontecimientos de hace unos instantes no hubiesen pasado.- No, no en realidad. Me encantaría pero ya sabes, mis padres no creen que sea algo de lo que pueda vivir. Les gusta que lo haga como un hobbie pero nada más allá. Además escribir y agradarle a todo el mundo es difícil.- Silencio.

A Harry en realidad no le habían gustado esas palabras, pero no se sentía con la confianza suficiente para expresar lo que el creía. Pero al ver otra vez el rostro de Louis, el cual o le había mirado mientras le explicaba, decidió hablar.

¿Puedo decirte lo que pienso, Louis?.- Louis le miró y su mirada quedó sobre la del rizado. Asintió

Mira.-Harry apartó la mirada, sabiendo que si lo miraba a los ojos no iba a poder hablar como una persona coherente. Miro a la mesa vacía de al lado y se percató de que la canción de fondo era Killer Queen, una de sus favoritas.- Supongo que es verdad que escribir y agradarle a todo el mundo es difícil. Pero si escribes lo que a ti te gusta y te llena entonces ya has cumplido, y si además hay gente a la que le gusta lo que le escribes, entonces genial. Pero creo que deberías escribir para ti, no para ellos.
Por otra parte, tu eres el que tiene que vivir tu vida Louis. Nuestros padres nos guían, pero al fin y al cabo, cuando ellos se vayan quedamos nosotros, y tenemos que hacer algo que nos vaya a llenar el resto de nuestra vida, no solo cuando ellos estén para hacerlos sentir orgullosos.- Descansó un momento, dejando procesar sus palabras a Louis, quien lo miraba atentamente.- Mi consejo es que hagas lo que realmente quieres hacer el resto de tu vida. Escribe, y si la vida te da un golpe, entonces será una experiencia, pero te tienes que dar el golpe tu Louis. Si no haces lo que quieres por pensar en qué dirá la gente, no te darás cuenta y tendrás cuarenta años y seguirás en la misma casa de siempre, con el mismo trabajo de mierda y arrepentido por todo lo que no has hecho.- El rizado calla y coge el vaso que tiene delante, pero no bebe. Mira al vaso y después a Louis que parece que aún está procesando lo que ha dicho. El rizado piensa por un momento que no debería haber dicho todo eso y que debería disculparse pero, cuando va a hablar, Louis lo interrumpe.

Vaya...- El castaño sentía como si no le quedaran palabras para decir nada. Pero miró a Harry, que esperaba por su respuesta, y habló.- No sé qué decir Harry, nunca nadie me había alentado tanto a hacer lo que quiero y, supongo que tienes razón. Gracias por esas palabras.
Enserio, cuando necesite un discurso motivacional te llamaré.- Rie, intentando rebajar un poco la tensión que había acumulado, pues, en realidad el discurso de Harry si que lo había tocado.

Entonces... ¿Cual es tu banda favorita?.- Habló el rizado, sabiendo que el tema anterior incomodaba a Louis.

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Pasaron mínimo dos horas más en ese restaurante. Rieron y hablaron de todo, desde música, libros, series, física... Los dos estaban muy felices, pues tenían varias cosas en común y se alegraban de tener a alguien con quien compartir todo eso, sobretodo Harry, que consideraba a Louis su primer amigo.

Media hora más tarde estaban de camino a casa y Harry le contaba a Louis que siempre había sentido interés por estudiar astrología, le gustaban mucho las estrellas y eso a Louis le pareció más que interesante, no había conocido a nadie antes con tanto interés por el cielo y el universo en si.

Enserio Harry, es genial. Tal vez cuando acabes el instituto deberías hacer la carrera de astrología. A mi me encantaría saber algo más sobre ellas.- Calló por un momento.- Bueno, saber algo, para empezar.

Los dos rieron y siguieron hablando de cualquier cosa. Louis le hizo prometer a Harry que un día de esa semana, el más despejado, irían a ver las estrellas a la montaña. Y, el rizado, feliz aceptó,

Algo le decía que esas dos semanas serían las mejores de su vida.

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⏰ Última actualización: Mar 16, 2020 ⏰

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antisocial | larryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora