C a p í t u l o 1 3

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—¿Co-cómo entraste? —le pregunte tímida, el puso la linterna de su celular y agarraba mi mano, ya no lo estaba abrazando pero me daba mucha vergüenza que me viera siendo frágil.

—La ventana de Tae estaba abierta, Dios, siento haber entrado así pero estaba muy preocupado y tú no abrías la puerta. —su voz sonó super ronca. —Entre y con mi celular te busque, estabas en tu cama y no te movías, estaba realmente asustado. —apreto un poco mi mano.

—Gracias por venir a mi. —mire su mano en la mía. —Gracias por apoyarme también. —escuche que soltó un suspiro.

—No me agradezcas, somos amigos, ¿No? —asentí, los dos nos podíamos ver un poco gracias a la luz de su celular.

—¿Porque estás tan frío? —su mano estaba realmente fría. —Sientate a lado mío. —le dije ya que el está de pie en frente de mi y yo sentada en la cama mientras el sujeta mi mano. —Tu mano está cálida aún que estás frío.

—Bueno, que esperabas, vengo corriendo desde casa en medio de una tormenta. —me sentí culpable. —Estoy mojado de toda la ropa, por eso no me siento.

—¿Quieres ropa de Tae? Usa ropa de talla grande, seguro te queda ya que tú tienes más volumen en el cuerpo que… el. —me sonroje ante lo que acabo de decir, ¿En serio? SunHee cállate.

—Esta bien así, me quedaré con la mía. —el soltó una risilla.

—Hm.. te vas a enfermar. —le dije de mala gana. —No quiero ser la culpable de tu resfriado. —el soltó una risilla de nuevo. —Vamos Kooki- —estoy demente, si, lo estoy. —… JungKook.

—¿Cómo me ibas a llamar? —me preguntó, sentí un cosquilleo en mi estómago.

—JungKook.

—No es cierto, vamos, solo dilo. —trague saliva nerviosa.

—Kookie. —el río, me sentí muy avergonzada. —¿Quieres la ropa o no? Oor favor solo vamos por ella.

—Llamame así una vez más y la acepto.

—No, si quieres, no te voy a rogar. —el soltó mi mano, me sentí mal.

—Entonces no. —se cruzó de brazos. —Te dejó con mi celular, te veo mañana. —agito su mano en señal de despedida.

—¡No! —grite agarrándolo de la camisa. —No te vayas.

—Una vez más, por favor.

—Kookie. —sentí mis mejillas arder, el alboroto mi cabello levemente.

—Vamos por la ropa de Tae. —asentí, sin mi permiso agarró mi mano y yo me encargue de alumbrar el camino hasta la habitación de Tae. —¿No crees que se enoje?

—No, está bien, eres su amigo. —busque entre el ropero de Tae ropa que le quede a JungKook. —Aquí está esto.

—Gracias… ¿Dónde me cambio? —mierda, no pensé en eso.

—En el… baño. —el asintió, soltó mi mano y comenzó a caminar. —¡No espera JungKook! —agarre su mano de vuelta asustada, no quiero estar sola.

—¿Que pasa?

—No me dejes sola, cambiate aquí, no te veré lo juro. —me sonroje ante lo que dije, solo la idea de que JungKook se cambie en la habitación donde estoy me pone nerviosa.

—Hmm… está… bien. —trague saliva nerviosa y me gire tapando la luz del celular, todo estaba oscuro de vuelta, mi corazón se agitó.

La lluvia se hacía cada vez más fuerte, mordí mi labio impaciente para que termine de ponerse la ropa. El está detrás mío y yo estoy más cerca de la cama de Tae.

—Mierda, no veo. —le escuché quejarse.

Se escuchó como quitaba su ropa, el movimiento de la tela, escuché como si se hubiese quitado un cinturón.

—Vamos JungKook, rápido. —dije asustada, no me gusta estar a oscuras, estoy cerrando mis ojos muy fuerte y apretando el celular de JungKook entre mis manos.

—No veo, no puedo hacerlo rápido. —seguí escuchando movimiento de tela.

Sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo y un trueno se hizo presente haciendo que se vea la luz por la ventana, me asusto mucho entonces se escuchó un gran ruido en la ventana y a alguien gritar afuera, mi corazón se agitó demasiado y no aguante más, me di la vuelta… y abrace a JungKook.

—Oh, ¡Mierda! ¡Me asustaste! —se quejó, sentí su espalda sin ninguna tela de por medio, mi mejilla chocó con su pecho desnudo y mis manos sintieron su espalda.

—¿No… tie-tienes ropa? —mi rostro se calentó en un santiamén, se sentía cálido abrazarlo así, el estaba calientito del cuerpo.

—No me puse camisa aún. —lo solté de golpe nerviosa y seguramente más roja que el color rojo.

Escuché como se puso la camisa con unos movimientos y agarró mi mano buscando su celular, prendió la linterna de nuevo.

—Lo… siento. —le dije casi en susurro mirando al suelo osea sus pies.

—Esta bien, vayamos abajo. —negue tímidamente.

—Me da miedo estar abajo. —el soltó un suspiro y entonces ahora el fue el que me envolvió en sus brazos.

—No tengas miedo, no pasará nada, ¿Si? —me dijo casi en susurro.

—Me da miedo aún así. —sentí sus brazos apretarme más, cada vez me gusta un poco más que sus brazos rodeen mi cuerpo.

En un abrir y cerrar de ojos la luz volvió, JungKook estaba ayudándome a hacer algo de cenar mientras Tae llegaba, me mando un mensaje disculpándose y dijo que ya venía. Hicimos hotcakes con un poco de chocolate, el hizo el chocolate y yo los hotcakes.

Se quedó a cenar, todo transcurrió normal, Tae regreso y JungKook se fue cuando cenamos, era divertido pasar tiempo con ellos y por supuesto me agradaba conocer cada vez más a JungKook, el y yo no teníamos muchos gustos en común pero podía descubrir cosas nuevas con el, me gustaba su sonrisa y la forma en que se comporta, también ese lado protector que tiene cuando está conmigo y no hay luz, la tranquilidad de tener sus brazos, su colonia, su respiración, sentir su corazón, estaré cerca de el me hace feliz, mucho.

A part of my Heart. (JJK x TN) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora