Suelo ser un desastre, mi cabeza un caos, mis pensamientos una tormenta, todo lo malo que pueden imaginar. No siempre suelo tener calma, siempre vivo agobiado y preocupado por cosas inexistentes y que nunca existirán, es terrible... Pero entre todo ese campo de batalla, entre todo ese terrible mundo existe una esperanza, una luz que me guía a donde voy, una luz que amo. Cuando todo se va a la mierda mi luz me guía a mi salvación, mi luz ilumina mi camino justo cuando pienso que ya todo acabó y me saca de la penumbra de mi infierno.
Todos tenemos infiernos y demonios, somos un saco de carne con más preocupaciones que vida, es triste pero real, sin embargo esta luz de la que tanto hablo, estos fotones a los que recurro son una simple metáfora para algo más grande, para algo más allá de nuestra primitiva comprensión, seres que en el peor momento se inmolan en nuestra llama para darnos vida otra vez. Un padre, una madre, un amigo, un amor, cualquier cosa que te dé esperanzas y te levante es tu luz. Amo mi luz, el amor de mi vida, brillando en mis más oscuros días, cuanto la amo por amarme y salvarme de mí mismo en el peor momento...
Todos tenemos una luz que nos alienta y nos saca del abismo. Y ustedes, ¿cuál es su luz?