𝐿𝑜𝓃𝒹𝑜𝓃 𝐿𝑜𝓋𝑒 𝟤 //H.S// Terminada.

CAPITULO 4

- ¡Taxi! - Nathan que parece no inmutarse, detiene un taxi, me abre la puerta y me subo, alcanzo a ver como Jeff sale de la tienda a paso veloz, pero Nathan cierra la puerta tras de él y el coche avanza.

-¿Qué diablos hacía ese imbécil ahí?- da rienda suelta a su enojo.

Yo sigo con la vista al frente, no voy a llorar, no voy a llorar. Creo que estoy en shock.

-Lo mismo me pregunto. - le contesto.

-¿qué te dijo?- me mira con ojos de basilisco - ¿se citaron ahí?-

-no...- mi cara debe ser una oda a la confusión.

- ¿Has estado en contacto con él? - su voz sube varias octavas, está hecho una furia, descarga toda su ira conmigo.

-no...-

-¡¿Grace, por qué hablabas con él?!- me grita en la cara.

-y-yo no lo sé, me tomó por sorpresa, estoy en shock... Nathan, no tenía ni idea...-

Se recarga con brusquedad en el asiento, viendo al otro lado, por la ventana, el taxi le pregunta la dirección y él contesta muy poco amable.

Me giro hacia la ventana, no tengo ganas de esto, hay algo en mi pecho, algo que está luchando con fuerza para vencerme, pero no me voy a dejar, tan solo es un sueño, finjo que lo he soñado.

Hay tres cosas por analizar aquí, la primera es que parece que Beth nunca le dijo dónde estaba, pues parecía genuinamente sorprendido cuando me vio, al igual que dolido por estar con Nathan. La segunda cosa, es que la respuesta de Nate fue bastante ambigua por lo que Harry pensará que la cena de compromiso es para nosotros y no para Spencer y Katty como lo es en realidad, pero no tuve oportunidad de aclararlo, no tuve cabeza para nada. Y, por último, Nathan jugó con una carta bastante cruel, que fue aventarlo a los lobos, supongo que con la intención de que no nos molestara más, siento un poco de tristeza por él. Mi corazón quiere seguir bombeando como desesperado, pero no lo dejo, necesito calmarme.

Cuando llegamos al edificio y entramos en el ascensor, Nate me toma de las manos y me mira, parece que se ha relajado.

-Mira Grace, no voy a ocultar el hecho de que me preocupa que esté aquí y que ahora sepa que tú estás aquí, necesito que por favor – me acaricia el rostro – por favor me prometas que te mantendrás alejada de él... recuerda que te hizo daño, Harry te hizo mucho daño – me mira ferozmente como si quisiera hipnotizarme, sus palabras se sienten como balazos en el pecho – no vuelvas a hablar con él. ¿De acuerdo?-

Asiento.

-bien- suspira mientras me abraza muy fuerte, tiene miedo y celos, tengo que hacerlo sentirse seguro y sobre todo quiero amarlo, de verdad que sí, quiero enamorarme de Nathan y olvidar a... Harry...

-me daré un baño...- le informo cuando entramos.

Él solo asiente, lo escucho entrar en la oficina, así que me voy a mi habitación, me encierro en el baño, dejo correr el agua y me desvisto.

Es curioso como pasas tanto tiempo escondiendo emociones que pueden salir a flote en un minuto. Cierro los ojos y me permito por primera vez en lo que parece haber sido una vida entera, recordarlo y no solo eso, me tiendo en un llanto silencioso, de esos llantos que desgarran mi alma. Parece imposible que después de todos estos meses y después de todos mis esfuerzos, estas emociones salgan a flote con tanta facilidad y con violencia en mí. Es como si me hubieran aventado en agua helada y me hubieran despertado del estado en el que vivo, piloto automático. Fue como una descarga eléctrica... me sentí... viva. Por increíble que parezca, no había rastro de odio, era más añoranza que otro sentimiento, me hubiera gustado mucho abrazarlo y preguntar por su vida... yo... yo... lo extraño tanto.