El mar, la arena y tú: Una historia Juliantina

Un día tranquilo

Hola... por favor no me maten, no había podido actualizar por falta de tiempo y por writer's block. Ya no se enojen conmigo :( Les dejo este cap, espero que les guste!

Valentina se despertó primero, inmediatamente cerrando los ojos de nuevo al sentir la luz del sol impactar contra su rostro. Soltó un leve suspiro y trató de girar en la cama, pero se dio cuenta de que la forma de Juliana la estaba deteniendo.

No sabía en qué momento habían cambiado de posiciones, pero ahora Juliana estaba casi sobre ella, abrazándola por la cintura y con su cabeza en su pecho como si la ojiazul fuera un osito de peluche. Valentina sonrió. Hace apenas unos días estaba segura de que hubiera tomado fotos de la situación para después burlarse de ella, pero ahora las cosas eran diferentes. Se sentía diferente.

La ojiazul trató de incorporarse sin éxito. El agarre de la morena era como el de un koala que no la soltaba por más que tratara.

"Juls," llamó Valentina suavemente. "Despierta."

Juliana no contestó.

"Juuuuls..." Valentina canturreó pasando una de sus manos por su cabello. No sabía cómo, pero a pesar de haber estado casi todo el día de ayer en el mar, su cabello aún conservaba el aroma de su shampoo.

"Ergmmf"

"¿Qué?" rió Valentina ante los balbuceos malhumorados. Juliana simplemente la acercó más a su cuerpo con sus brazos.

"Muy temprano. Vuelve a dormir."

"Pues temprano no es, guapa. Son las 10 de la mañana."

Juliana se ruborizó ante el apodo y abrió los ojos. Se dio cuenta de su posición sobre Valentina e inmediatamente se quitó de encima de ella.

"Perdón," dijo apenada sin mirarla.

"Hey, está bien. Debo ser muy cómoda para que hayas dormido tan cómoda, ¿no?" dijo Valentina riendo tratando de alivianar la situación. Juliana observó cómo la ojiazul se estiraba para despertarse. Estiró sus brazos, piernas, y arqueó su espalda para después soltar un suspiro complacido.

"¿Ya terminaste?" preguntó Juliana divertida al observar toda su rutina de estiramiento.

"Hmmm no. Me falta algo..." dijo Valentina entrecerrando los ojos y fingiendo estar pensativa.

"¿Ah sí? ¿Y qué podría ser eso?" Juliana le siguió el juego.

"Me falta mi beso de buenos días."

Juliana definitivamente no se esperaba eso, ya que sintió que algo se le había atorado en la garganta. Carraspeó un poco para tratar de aliviar la sensación y se ruborizó de nuevo. Se maldijo a sí misma. No llevaba ni diez minutos despierta y Valentina ya la había hecho ruborizar dos veces.

Valentina comenzó a reír ante la expresión aterrorizada de la morena.

"Es broma, tranquila. Aunque nunca estaría mal un beso para comenzar el día," dijo prolongando la burla.

Juliana suspiró para sí. Okay, dos podían jugar este juego.

"¿Quieres que te bese entonces?" dijo Juliana con aparente seguridad, destanteando a Valentina.

Juliana sonrió internamente al notar que ahora Valentina era quien estaba nerviosa. Valentina: 1 – Juliana: 1.

"No lo sé. ¿Tú quieres besarme?" retó Valentina de vuelta.

Valentina: 2 – Juliana: 1.

"Sí."

La respuesta fue completamente inesperada para ambas. Valentina la miró con los ojos abiertos y sorprendida mientras que Juliana estaba teniendo una batalla campal en su cabeza sobre por qué había contestado eso. Sin embargo, la reacción de la ojiazul no tenía precio. A pesar de lo nerviosa que estaba al ponerse en esta situación, Juliana se aplaudió mentalmente por su atrevimiento.