No me rendiré; Chaennie[Finalizada]

III

-Entonces ¿cómo la conociste?- volvió a preguntar Yeri al ver que Jennie no se inmutaba, estaba tan metida en sus propios pensamientos que las palabras no salían de su boca.

Flash Back

Los señores Kim se bajaron del auto seguido por su hija quien no dejaba de tararear la canción que venía puesta en el auto, el chofer del auto cerró la puerta y se paró a un lado con las manos detrás de su espalda y Jennie le lanzó una divertida mirada, Su chofer siempre se mantenía firme y con la mirada al frente a la disposición de la familia, pero lo que no sabían los señores Kim era que más de una vez Jennie lo había encontrado dormido en el auto en horas de trabajo y que muchas veces lo había usado sin permiso para uso propio.

-Jennie quiero que estés atenta a todo lo que digamos y solo opines si tu comentario crees que es acertado o inteligente- le dijo Jeong con un semblante serio e impaciente cuando se detuvieron en el Lobby del restaurante- estas son personas muy importantes y no quiero que su primera impresión sea de que tenga una hija tonta y que no entiende de negocios.

-Si padre entendí, solo abrir la boca para Saludarlo y decir que son personas increíbles.

-No estoy para juegos- dijo el hombre algo enojado.

-Jeong por favor relájate estás actuando como un verdadero cretino- el hombre aspiró fuertemente y relajó sus facciones.

-Estoy algo presionado por esto- dijo excusándose.

-Lo sabemos pero si no te calmas prefiero decirle a Marcus que me lleve a casa.

El hombre asintió y se relajó, las reuniones de trabajo lo sacaban de quicio, era dueño de un banco y casi a diario vivía de reuniones en reuniones sin embargo no se le daban, él era más un hombre callado y reservado que prefería decir solo lo justo y necesario pero desde que heredó el negocio familiar tuvo que hacer un esfuerzo monumental para llevar las riendas del lugar.

Jennie llegó a la mesa donde ya estaban esperando los empresarios canadienses y los saludó cortésmente, estuvieron varios minutos preguntando cosas superficiales como que tan cansado estaban los hombres por el viaje o si fue cómodo, Jennie río internamente al pensar que su padre preguntaba tonterías al estar nerviosos, su viaje tuvo que haber sido fabulosos si viajaron en primera clase, no esperaron en líneas ni bajaron equipajes, ellos simplemente siempre tienen privilegios.

-Entonces Jennie, ¿Estás estudiando?- preguntó el hombre de cabello gris sin embargo no parecía tan viejo.

-Si mi hija está estudiando administración de empresas y luego negocios internacionales, es una de las primeras de su clase y estamos orgullosos de ella- parloteo Jeong apresuradamente ganándose unas miradas extrañas de los canadienses.

Jennie río por lo bajo y sonrío que alguien se acercaba por su espalda.

-Buenas noches, hoy voy a ser su camarera- dijo la chica con tono cortés- ¿quieren algo de beber antes de ordenar?

Jennie miro el perfil de la chica y le pareció realmente linda.

-Si por favor traigamos una botella de vino blanco por ahora- pidió uno de los canadienses que Jennie a duras penas recordaba sus nombres- cuando estemos para ordenar se lo haremos saber.

Jennie vio a la rubia alejarse y le sonrió ganándose una de vuelta, no estaba segura de sí era por cortesía o porque realmente la mesera quería hacerlo.

-Son muy buenas carreras Jennie- hablo el canadiense- ¿Estás preparándote para llevar las riendas del banco o me equivoco?

-Está en lo cierto sin embargo creo que no estudiare negocios internacionales en un futuro- dijo desconcertando a Jeong- ya tendré tiempo de pensar si quiero otra carrera después de Administración de Empresas.