Capítulo 22: Debemos esperar

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Al día siguiente el sol brillaba entre las montañas, ya estaban en el mes de Noviembre y llego el aniversario de aquel horrible día donde el Santuario fue corrompido por completo, pero esto nadie lo sabía, nadie más que Seiya y Eliani. Al levantarse Nozomi logra ver que la cama de su prima estaba vacía, esto le llamo mucho la atención pero piensa que quizás la chica había decidido despertar temprano e ir a trotar o algo.

-(Se matará si se esfuerza tanto...)-
La chica se levanta y luego de arreglarse un poco frente al espejo o al menos controlar un poco sus cabellos de color castaño claro, decide bajar al comedor donde a esta hora había comida para desayunar.

Al llegar a la mesa nota como todos le observan, ella solo sonríe con amplitud y la amabilidad de costumbre. Desde pequeña siempre le habían hablado sobre como su energía emitía tranquilidad y una alegría contagiosa.

La chica se sienta entre Hyoga y Shun, la comida pasa tan tranquila y rutinaria como siempre, Hyoga en un momento se acerca a Nozomi para preguntarle sobre el paradero de Eliani algo a lo que ella responde con sinceridad ya que desconocía donde podría estar Eliani en ese momento.

Cuando terminaban de desayunar y Shun junto a Nozomi llevaban los platos a la cocina, suena el timbre de la casa y resultaba ser Seiya quien viene desde el orfanato a visitar.

-Vaya, no pasa ni un día y ya nos extrañas-
Miyuki sonríe un poco cruzandose de brazos

-Pues estoy acustumbrado a la compañia generalmente-
Seiya rasca su cabello mostrando nerviosismo o algo de vergüenza.

Cuando pasan la tarde los chicos deciden ir a dar una vuelta a uno de los centros comerciales de la cuidad, por cosas de seguridad y más que nada diversión, la señorita Saori les acompañaría.
Así fue como Hyoga, Miyuki, Seiya, Shun, Saori, Colin y Nozomi agarran sus cosas para ir a pasar una tarde de jovenes normales por una vez, tenían sus armaduras en las placas colgantes de sus cuellos pero si las cosas resultaban bien no habría razón para usarles.

Los chicos fueron al cine donde vieron una película en la que había muchas batallas entre los héroes y los villanos, un romance en la pareja principal y ,como en la mayoría de las películas, el desenlace termina con un final feliz.

Luego de comer se dirijen al lugar donde venden comidas, todos compran helados de distintos sabores o al menos la mayoría, ya para aquel momento Nozomi comienza a extrañar a Eliani, le envia un par de mensajes los que ni siquiera recibe.

Ya para el final de la tarde todos vuelven a casa llenos de cosas, nueva ropa o más comida aún,había sido una tarde maravillosa, pero algo faltaba en el ambiente. Nozomi regresa a la habitación con la esperanza de encontrar hay a Eliani, pero no es así solo ve sobre su cama el celular llenó de mensajes.

-Vaya... Quizás este...-
Su ánimo se volvió decaído en ese momento, dejó las cosas en su armario para luego volver con los chicos en el salón, Seiya logra notar su mala cara e intenta animarla pero sin éxito, todos quedan extrañados por su ánimo o eso hasta que ella explica el echo de que Eliani no daba pistas de vida desde la noche de ayer.

-Quizás... Deberíamos avisarle a la policía-
Nozomi estab inquieta, comenzaba a mover sus piernas y las manos.

-Debes tranquilizarte, ella es fuerte y sabe defenderte-
Shun agarra las manos de a Nozomi con dulzura para ayudarla
-Lo a demostrado muchas veces quizás solo desea tiempo a solas-

-Si no deses que la encuentren nadie lo hará, además los policías no podrían con ella o ¿acaso olvidas que es una guerrera de atena?-
Miyuki, quien podía llegar a tener un tacto algo brusco o francamente nulo era siempre quien ayudaba a los chicos a volver a tierra y ver las cosas con más lógica.

Guerreras de AtenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora