𝘽𝘼𝘿 𝙄𝘿𝙀𝘼 ➻ Cedric Diggory

Cap.9-Celos por el Quidditch.

La clase ha terminado, debo aceptar que fue muy divertida. Sobre todo ver a Mae y a los demás bailar.

Cho Chang, de cuarto grado en Ravenclaw. Es muy agradable, además de inteligente. La chica ha platicado conmigo casi toda la clase y supongo que es buena persona.

Todos están recogiendo sus cosas y se despiden los unos de los otros. La castaña aun espera a que salgan los demás y me da una mirada nerviosa.

—Adios Cedric —Se despide Chang y yo le hago un gesto con una mano.

—¿Que te pareció? —Pregunta Mae, una vez que está cerca de mí. Con mucho entusiasmo me observa, esperando alguna respuesta. Pero me he perdido mirando a Cho irse.

—¡Me gustó mucho! —Exclame —Fue muy divertido.

—Te dije que la clase era buena —Contesto ella —He visto un par de chicas mirar por la puerta. Supongo que son pretendientes tuyas. Lo que resulta doblemente genial.

—¡Solo me utilizas! —Exclame en tono de broma

—Tal vez un poco.

Ambos salimos del salón para el pasillo. A esta hora siguen muchos estudiantes caminando por todas partes.

No me he ofrecido a llevar a Mae hasta su sala común, pero creo que ya lo supone porque es a donde nos dirigimos ahora.

—¿Mae? —Dije sin siquiera pensar en que le diria, solo quiero hablar con ella.

Sus ojos azules se despegan de las arañas del techo y me mira esperando alguna palabra. Pero me quedo congelado, una vez más.

Por Helga Hufflepuff debe pensar que soy un idiota.

—¿Que sucede?

—Ah... ¿Te gustan los animales? —Pregunte ansioso. Ella asiente con la cabeza, dejando ver sus pequeños dientes —Pensaba, que si no tienes algo que hacer ¿Podrías venir próxima semana a ver una lechuza gigante? En Hogsmeade.

—Si, sería divertido.

Acepto ir.

¿Ahora que me pongo?

—Ah, lo olvide. Tengo un Oliver. Siempre salgo con el a Hogsmeade.

Olvidenlo.

—Tambien puede venir —Dije inseguro.

Ella alza los hombros sin darle importancia y deja a flote el tema.

Yo también había olvidado que ella tenía un Oliver.

Seguimos caminado, casi involuntariamente. Esto se ha vuelto más incómodo de lo que parece. No sé si le molesta mi presencia o si yo estoy demasiado nervioso.

Estamos a punto de cruzar el pasillo principal para subir a la torre de Gryffindor. Pero antes de hacerlo, un Olvider Wood aparece a mitad de la puerta con su túnica mal puesta y la escoba sostenida como puede.

El mira a su novia y corre directamente a ella con sudor en la frente.

—Dime que te diriges a la clase ahora mismo. —Dice el con ilusión.

—¿Quieres que te ayude con eso? —Pregunte señalando la escoba.

—No necesito ayuda, Diggory.

Mae se queda callada por unos segundos y amenazó con irme del lugar. Pero ella misma me sostiene del brazo.

—Ya terminó. Cedric me hizo el favor de acompañarme esta vez. —Dijo la castaña con una sonrisa.

En realidad parece que me utilizan para darle celos. Aunque en otra parte parece que lo hace con el afán de dar una buena noticia.

—¿Así que te acompaño el?

—Debiste verlo estuvo genial. Muchos entrarán a la clase gracias a él y salvará el taller. ¿No es grandioso?

Oliver me lanza una mirada indiferente. Tal vez preguntándose porque he pasado mucho tiempo con su novia.

No lo culpo.

—Demaciado genial. —El Gryffindor hace que Mae sostenga su escoba mientras se pone correctamente la túnica. Todo esto sin dejar de verme con una mirada amenazante.

—Linda escoba —Dije sonriendo.

—Gracias, la utilizaré en el partido contra Hufflepuff.

—Me parece emocionante competir con ustedes creo que será divertido. —Mi sonrisa es sincera. Quiero enrojecer ahora que Mae también lo hace. Pero Oliver lo ha tomado a mal.

—Tal vez lo sea. Un juego justo —Dice Oliver cada vez más insistente. —Tan solo si alguien no estuviera tratando de saber las tácticas del equipo rival.

Este hombre si que está mal. Amigo quiero quitarte la novia, no las tácticas para ganar un partido de Quidditch.

Aunque eso también este mal.

Ordena tus prioridades.

Clearwater, que presta poca atención se acaba de ofender y frunce el seño bastante rápido.

—Oh, no... —Dije soltando una risa  incrédula —Yo solo trataba de ayudar a su taller. No busco sabotear nada.

—Oliver, cariño. Creo que es hora de irnos.

—No estoy muy seguro de eso.

El chico ignora a su novia, lo que la hace enfadar más. Pero yo no me inmutó. 

—Cedric jamás a hablado conmigo de Quidditch. Así que puedes estar tranquilo. Ahora vámonos.

La Gryffindor toma el brazo de su novio para tirar de el. Pero se safa de su agarré y se queda fijo en mi.

Aunque puede que intimide un poco, es más bajo que yo. Por lo que me mantengo seguro, para evitar problemas.

—Tu vete a la Torre, yo tengo algo que arreglar aquí. —Mando Wood con exasperación.

—Estas haciendo problemas dónde no los hay. —Mae se niega y vuele a insistir.

—Mo abra problemas solo quiero hablar con el de chico a chico.

Miro a la pequeña y le doy una sonrisa de que todo estaba bien. Dándole seguridad, pero aún así duda un poco antes de irse.

Cuando está lejos, el chico vuelve a tomar su postura.

—No quiero pelear Diggory. Pero es raro que quieras estar todo el tiempo con mi novia. ¿Sabes?

—Tampoco quiero problemas, es mi amiga. No quiero sus estrategias para ganar ni nada de eso. Es mejor la satisfacción de saber que has hecho un buen trabajo justo y limpio.

—Si, lo que tú digas. Solo ten cuidado, si me entero que te metes con mi equipo, te las verás conmigo. Mae es mi novia y no dudará en decirme algo.

—Me pregunto si ella se pondría igual que tú, si hubiera conocido a Noel.

El castaño se congela por un segundo y me mira por última vez para irse detrás de su chica.

Que ridículo.

Por un segundo creí que me golpearía por su chica, no por el partido de Quidditch que se viene próximamente.