P9: Amor eterno.

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Cuando Celina abrió los ojos a la mañana siguiente lo primero que vio fueron los labios de Richard muy de cerca. Esbozó una pequeña sonrisa mientras su esposo dejaba un pequeño beso sobre su frente.

—Buenos días, señora Camacho.—la saludó sin perder la sonrisa del rostro.

—Un momento.—pidió la pelirroja alejándose de él. Richard se quedó quieto en la cama mientras esperaba por su esposa. Soltó un largo suspiro y cuando le sonrió cuando ella apareció por la puerta del baño.—¡Estoy lista!—anunció sonriéndole ampliamente.

Richard frunció su entrecejo.—¿Lista...?

—Para poder besarte.—agregó haciéndolo reír. Una amplia sonrisa se instaló en los labios del muchacho antes de recibirla con los brazos abiertos y besarla con fervor.—Buenos días, por cierto... —murmuró sobre sus labios.

—Así que esa es la primera regla, eh.—comentó apartándose de ella un momento. Celina rio en voz baja.

—Pues claro. Es antihigiénico...—añadió encogiéndose se de hombros. Richard se rio de nueva cuenta y la volvió a besar.

—Eres increíble.—le dijo depositando otro pequeño beso en la punta de su nariz.—¿Dormiste bien?—cuestionó mirándola fijamente.

—Sí. Dormí como un bebé.—respondió de inmediato.—Gracias por la increíble noche que me regalaste...

—No tienes que darme las gracias por nada.—musitó él.—lo hice porque de verdad te quiero...te amo...—le recordó.—Y en todo caso quién tendría que darte las gracias aquí soy yo...

Celina sonrió. —También te amo...

—¿Estás lista para volver a Miami?—cuestionó mirándola a los ojos.

Celina llevó su mano hasta la áspera mejilla de Richard provocado por la ligera barba que estaba comenzando a aparecer sobre ella.—Si...—respondió con media sonrisa.—Estoy ansiosa y emocionada por ver a mamá y a Gonzalo...—anunció en voz baja.

—Me encanta la sonrisa que tienes cuando hablas de tu familia...—comentó sonriéndole débilmente.

—Son lo mejor que tengo, no hay manera de que hable de ellos sin sonreír...—respondió.

—Me gustaría que nos quedásemos a vivir en Sonoma...—murmuró el muchacho.—Es realmente bello y la verdad es que nunca había disfrutado tanto de un viaje como lo hice con este...—rio.—pero sé que no podemos porque no soy tan egoísta como para separarte de tu familia...

—Eres el ser más maravilloso del mundo, Richard...—anunció Celina. Richard negó un poco y luego dejó un beso sobre sus labios.

—Nuestro vuelo sale en un par de horas así que creo que tenemos que ponernos de pie de una vez...—musitó el muchacho ofreciéndole una pequeña sonrisa.—podemos ir a desayunar a algún lugar bonito ¿no crees...?

—Me gusta la idea.—respondió la muchacha. Richard se quedó en silencio observando los lindos ojos grises de Celina un largo momento.—¿Qué pasa...?

—Nada...sólo...me gustan tus ojos...—anunció provocando en el acto que las mejillas de la chica se colorearan de un color rojo intenso. Amaba verla sonrojarse; era la cosa más linda y adorable de toda.

—Basta, Richard.—se quejó. Él rio y la volvió a besar fugazmente.—haces que me sonroje...

—No quiero que te sonrojes...—le dijo él.—Lo que quiero en verdad es que te enamores de mi...

—Enamorada ya estoy, créeme...

(...)

Dos semanas después...

SE BUSCA ESPOSA ¡URGENTE! (SSB #5)|RICHARD CAMACHO|Completa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora