Every breath you take » rdj

1K 44 145
                                    

One shot dedicado a mi querida downeylovers

- ¡Te has besado con tu ex! -Grita Debby, mientras sale de la habitación y tira mi camisa con carmín encima de la mesa del comedor.

- ¡No! Bueno, ¡Sí! ¡Más o menos! -La mirada de mi chica me taladra, sé que ahora quiere matarme. - Joder, Debby, cariño. Te juro que no fue con sentimiento, ella vino a mi oficina y me pilló desprevenido. -Me acerco a ella, pero me es imposible.

Sé que la he jodido. Tengo claro que no estuvo bien besar a mi ex novia, pero todo había pasado tan rápido desde que comencé a salir con Debany, que jamás me habría imaginado que, gracias a ella, había superado tan rápido a Ashley.

- Me da igual, Robert. ¿Qué va a ser lo próximo? -Ella está alterada, alzo las manos para que intente calmarse un poco. - ¿¡Que te acuestes con ella y me digas que no hubo pasión porque te pilló desprevenido?!

Eso cae por mi espalda como agua fría. Tenso mi mandíbula y pienso una y otra vez que me lo merezco, he sido un cabrón al permitir ese beso con mi ex novia. Pero no es justo, no me deja explicarme, no sabía el antes ni el después de ese beso, no sabía mi reacción, no sabía absolutamente nada porque estaba tan nerviosa que solamente existían sus argumentos.

- Debby, por favor. Creo que te he demostrado lo suficiente que te quiero y que he superado a Ashley. -Mi tono representa la paz que realmente necesitamos en este mismo momento.

Ella, sin embargo, me mira con unos ojos rabiosos de querer clavarme un tenedor en el ojo.

- No me querrás tanto cuando te dejas besar por... Ashley. -Dice el nombre con pudor, yo suspiro. Agacho la cabeza y antes de poder subirla, escucho un portazo y me doy cuenta de que Debby se ha marchado de casa. Nuestra casa.

El hogar que habíamos construido en poco tiempo y que hasta antes de que Ashley volviera a aparecer en mi vida, sentíamos que iba a durar para siempre. Quería a Debby, la había conocido de la peor de las maneras, pero se había convertido en la maldita razón para que yo no me hundiera.

Mi corazón dictaba que era ella y nadie más.

Flashback on.

Una corazonada volvía a mi pecho cuando pensaba en que el cumpleaños de Debby estaba cerca. Había organizado muchas cosas, un salón, algunos regalos y sus amigos de toda la vida para poder disfrutar. Desde que comencé a organizar su cumpleaños, me tiraba encerrado en mi oficina más tiempo de lo normal, pues sabía que, si llevaba todos los preparativos a casa, Debby los descubriría.

¿Por qué tenía que ser tan cotilla esta chica?

De todas maneras, me volvía loco.

Sonreí medianamente cuando una de sus amigas, Alba, me mandó un mensaje y me dijo que todo estaba listo, el salón, los preparativos y la comida estaba pedida para el sábado día 16, así que nada podía salir mal. Iba a darle una gran sorpresa, muchos sospechaban con algo relacionado con un anillo, pero no, es algo totalmente mejor.

Mi mente estaba completamente distraída cuando no escuché los pasos de quien había entrado en mi oficina, y un perfume muy característico me hizo levantar la mirada. No podía ser.

- ¿Ashley? -Le pregunto, un poco confundido.

En efecto, ella está ahí parada. Su cabello rubio pasa por sus hombros y tiene un vestido ajustado de color granate que no me deja mucho a la imaginación. No obstante, no pienso en eso, simplemente la miro a los ojos y alzo una ceja.

𝙾𝙽𝙴 𝚂𝙷𝙾𝚃𝚂 | 𝚁𝙳𝙹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora