M Y L A D Y

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-- ¿Estas son horas de llegar?-- su esposa estaba asada,ya iban semanas desde que su esposo llegaba a las 7:00 de la mañana.

-- Solo vine por unos documentos-- dijo sin mas, no tenia tiempo para su esposa.

-- ¡No te importa nuestro hijo!

--Me importa y es por eso que trabajo; trato que la compañía siga en pie por nuestro hijo...

Salio hecho humos hacia su oficina solo quería sacar los benditos bocetos de la nueva linea ropa de primavera e irse a casa de su lindo pelinegro.

¿Qué estará haciendo?

Tal vez ya este despierto leyendo la pequeña nota que dejo en su mesita de noche, o, de seguro estaría esperándolo con el desayuno servido.

Sus pensamientos pasaron al sur de su amante, ese culo que se traía no debía ser desperdiciado por mucho tiempo.

- ¡Vas a dejarme de nuevo!- el grito que pego su esposa lo sacó de su transe- ¡Eren Jeaguer me estas engañando!

"Si y con mucho gusto".pensó responder pero decido no hacerle caso.

- Has planeado irte de viaje a Europa el mismo mes en que nace nuestro hijo, no estarás presente en su nacimiento.

- Mikasa, no es tan importante como lo pintan en los comerciales, tengo toda una vida para verlo no seas exagerada...

Su esposa hecha un manojo de ira empezó a insultar lo de las peores maneras mientras que este le era indiferente, no tenia tiempo para escucharla tenia que volver con su amor no quería dejarlo solo por mucho tiempo.

-¡Eres tan insensible! ¡DESEARÍA NO HABERME CASADO CONTIGO!

- Ya somos dos, querida...- suspiro.

Ante la mirada atónita y cristalizada de su esposa se fue sin decir nada importándole muy poco escuchar como sus piernas flaqueaban y caía al piso de rodillas para ponerse a llorar siendo consolada por los criados.

I N F I E L [Ereri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora