Capitulo 9

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No sabia si era porque estábamos en un lugar muy encerrado, o por las copas de vino que nos habíamos tomado, que la temperatura de nuestros cuerpos había subido demasiado rápido y ahora nos encontrábamos en esta situación tan comprometedora.

Minutos antes, Kyuhyun me había sacado de una manera muy extraña del departamento, dejándome fuera del hospital donde trabajaba Hyukjae, diciéndome que fuera directo al consultorio del pediatra.

Al entrar a dicho consultorio me encontré con una mesa, velas y un vino encima de ella. Hyukjae tan directo como siempre solo dijo: ¿Quieres salir conmigo?

Sonrei, porque me gustaba tanto esa faceta suya de siempre decir lo que pensaba en ese momento, sin darle vueltas al asunto. Y así fue como le di mi respuesta, sin pensarlo demasiado me eché a sus brazos, empezando un beso tan suave, muy diferentes a los que ahora nos estábamos dando. Empezamos a beber del vino y de pronto llegamos a este punto.

Yo encima del escritorio, con Hyukjae entre mis piernas, su mano en mi cintura acercando mi cuerpo al suyo y la otra mano sosteniendo mi nuca, profundizando el beso que nos estábamos dando en ese momento.
De pronto deja mis labios para rozar la piel de mi cuello con ellos, su respiración haciéndome cosquillas hace que la piel se me ponga chinita, sube de nuevo a mi oreja, y sus labios vuelven a rozar.

Siento como sus labios toman mi piel suavemente. Cierro mis ojos, jadeo y quiero cerrar mis piernas pero no puedo porque su cuerpo está ahí. Esto es tan frustrante. Él sigue lamiendo, besando y succionando mi cuello. Descargas y descargas recorren mi cuerpo, suben y bajan hasta que se quedan en mi entrepierna y quiero retorcerme mientras el sigue lamiendo, pero no puedo y entre la frustración y lo que siento solo atino a enredar mis piernas a su cintura y acercarme más a él.

Me sofoco y mis manos que no aguantan, suben a su cabeza. Enredo mis dedos entre su cabello, vuelvo a cierro mis ojos y me dejo hacer.

- Hyuk... - gimo y él con la punta de lengua traza una línea que lo lleva hasta mi mentón, demasiado cerca de mis labios.

Sus labios se cierran sobre los míos, y ya no pienso, solo reacciono y lo beso también. Nuestro beso es salvaje, tan necesitado por ambos que solo deseamos devorándonos el uno al otro. Su lengua entra mi boca y rápidamente se encuentra con la mía. Me aferro más fuerte a su cabello y lo tironeo, lo escucho gruñir y sus manos me toman de la cintura fuertemente.
Es un beso húmedo, torpe, con sabor a alcohol, limón, dulce y a Hyukjae...
Oigo caer botellas, creo que una se ha roto o quizás haya sido el vaso.
Vuelve a mi cuello, me besa diferente, ahora parece desesperado. Mi columna se curvea y me retuerzo sobre el escritorio y contra su pelvis que pincha y está caliente. Sus manos se aferran a mis piernas... y de pronto deja de besarme, alejándose, pero no tanto ya que aún puedo sentir su respiración mezclarse con la mía.

Abro los ojos y él me mira. Pero parece que el esta tratando de controlarse. Ahora solo se escucha mi respiración y la suya, no hay nada más aparte de nosotros.

- ¿Qué estás haciendo conmigo, Donghae? - susurra. Y no se que contestarle.

El suelta un fuerte suspiro y se aleja, dejándome encima del escritorio, totalmente confundido. Se acerca de nuevo a la botella de vino y se sirve un vaso tomándolo de una. Lo único que hago es mirarlo, porque sigo sin saber que decir.

Pero no puedo evitar sentir un pequeño nudo en el estomago, ¿porque se había detenido, Hyukjae?

- Tenemos que detenernos - voltea a verme encontrándose de nuevo con mis ojos - No pongas esa cara, Donghae.

Se acerca a donde estoy y toma mis piernas con sus manos para apoyarse, y me mira directo a los ojos.

- Quiero que sepas que me atraes de todas las maneras, pero también quiero que vayamos despacio, ¿esta bien? No quiero que pienses que soy de ese tipo que te pide una relación y al instante ya quiere sexo.

Suspiro y asiento.

- ¿Podemos ir lento? - pregunta tiernamente.

- Si.

Hyukjae sonrei y vuelve a darme un pequeño beso en los labios, después de eso me rodea con sus brazos, mientras yo escondo mi rostro en su pecho.

Estaba de acuerdo con el, y sabía que teníamos que esperar aunque sea un poco, pero entonces porque se seguía sintiendo extraño y sus labios y su piel seguían ardiendo en los lugares donde Hyukjae lo había tocado y besado.








☁️





Se había convertido en todo un adolescente hormonal. No podía seguir de esa forma. No sabia que era lo que estaba pasando, pero cada que se encontraba con Hyukjae y terminaban quedándose solos por cualquier situación, se besaban y llegaban a algún  punto donde sus cuerpos se rozaban sin poder evitarlo, pidiendo más contacto por parte del otro y Donghae sentía que volvía a arder como aquella noche en el consultorio del pediatra.

Pero despues llegaban a un punto donde ambos sabían que estaban pasando los límites y Hyukjae solo se alejaba, suspiraba, le daba un tierno beso y después le dedicaba una tierna sonrisa. Esos eran los momentos que hacían que Donghae se decepcionará un poco, porque muy en el fondo el quería que llegara el día en que Hyukjae solo se dejara llevara junto con el.





☁️




— Pasare por Hyukjae a su trabajo — le dije a Kyuhyun. Esperando que no me hiciera preguntas, pero fracase.

— ¿Y porque tienes que ir por el? ¿Acaso el no conoce el camino? —  pregunto mirándome fijamente.

— Si, pero... —

Joder. ¿Y ahora qué le decía?

— ¿Estas preparando algo para mi cumpleaños? ¿Verdad? — Kyuhyun me interrumpió.

Suspire derrotado. Claro que estaba preparando algo para su cumpleaños, días atrás escuché, mientras el estaba en una llamada que decía que pronto se iría y no pasaría su cumpleaños con nosotros, sino que estaría trabajando. Así que tenía planeado comprarle un pastel y festejarlo antes de que se fuera.

— No sabes mentir, Donghae, así que solo dilo, ¿que estás preparando? Déjame adivinar... ¿será un pastel?

Lo miré molesto.

— Solo no digas más, Kyuhyun y cuando lo traiga, aunque tengas que fingir, quiero ver esa cara de sorprendido.

Fue todo lo que dije antes de salir del departamento.

Entre a la recepción del hospital, encontrándome con esa chica rubia. ¿Cual era su nombre? Ah, ya, Hyoyeon, así era como se llamaba. Desde que me vio entrar no dejo de mirarme de arriba a bajo.

Estaba molesta, lo sabía. Para esto ella ya tenía que saber la relación que tenía con Hyukjae, ya que a veces pasaba por el y Hyukjae al encontrarse conmigo me daba un beso, para después tomar mi mano y salir. Bueno realmente todos los que estaban en el hospital tenían que saberlo ya.

Le mandé un mensaje a Hyukjae diciéndole que ya había llegado, pero parecía que estaba con un paciente, entonces tenía que esperar un poco.

Me recargue en la pared, viendo el celular e intentaba ignorar esa mirada tan odiosa.

— ¿Así que tu eres el amante en turno de Hyukjae?

Voltee a verla y su mirada era burlona. ¿Así que quería hacerme sentir mal?

— ¿Amante en turno? Creo que no te dieron bien la noticia, ya que somos novios, pensé que ya lo sabias — le di una falsa sonrisa.

La sonrisa se borró de su rostro.

— Te recomiendo que no te sientas tan cómodo, porque estoy segura de que Hyukjae esta en esa etapa en que solo quiere probar algo diferente para divertirse un rato, pero cuando se aburra de ti, terminará regresando conmigo.

— Entonces la que no debería de sentirse tan cómoda esperando eres tú, porque estoy seguro que eso no va a pasar, mejor te recomiendo que vayas buscando algo que hacer con tu vida, para que ya dejes de molestar a Hyukjae de una vez por todas.

— Escuchame bien... —

— ¿Que pasa aquí? — interrumpió Hyukjae.

¡Oh mierda!


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 Aprendiendo a ser papá ☁️ EH (HIATUS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora