Capítulo 4

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Una vez que todos terminaron con la actividad, tuvieron un pequeño descanso en lo que la maestra evaluaba.

-Ves, te dije que Kiibo-chan, siente algo por mi Saihara-chan.- Dijo Ouma señalando al lugar en el que Saihara y Kiibo estaban y se podía notar que Kiibo en ningún momento dejaba de sonreír.

-Eso no comprueba nada, solo le está sonriendo.- Rantaro estaba harto de las quejas de Ouma, ya fuera porque no podía soportar los elogios de Kiibo hacia Saihara o porque se enojaba cuando veía el más mínimo contacto entre ellos.

-Aun así es molesto, ¿no lo crees?

-¿Yo que voy a saber?, a mí no me gusta Saihara-kun.- Se podía notar claramente que Rantaro quería cambiar de tema.- Mejor deja de enojarte y hablemos de cualquier otra cosa, ¿sí?

-¿Cómo de qué?

-No lo sé, pero por favor que no se trate de Saihara-kun.

-Que no se trate de Saihara-chan...mmm... ¿Qué podría ser?

-¿Enserio es muy complicado hablar de cualquier cosa que no sea Saihara-kun?- Pensó Rantaro.

-Ya sé, Amami-chan ¿Hay alguien que te guste?- Pregunto con una notoria curiosidad.

-¿Por qué quieres saber eso?

-Por nada en especial, solo es curiosidad.

-No me gusta nadie.

-¿Qué?, eso es imposible, ¿Cómo no te va gustar nadie?, ¿No me estarás mintiendo Amami-chan?

-No tengo ninguna razón por la cual deba mentirte.

-Eso quiere decir que todavía no has encontrado a esa persona especial.

-Podría decirse que sí.

-No te preocupes una vez que logre mi objetivo de conquistar a Saihara-chan, yo te ayudare a que encuentres a esa persona.- Dijo Ouma tomando las manos de Rantaro.- Confía en mí.

-¿G-gracias?- Contesto algo incómodo.

-¿G-gracias?- Contesto algo incómodo

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-Saihara-kun...

-Saihara-chan, ¿no estas ocupado?- Pregunto Ouma interrumpiendo a Kiibo, algo que fue propósito.

-No, ¿Por qué?

-Quiero invitarte a comer, ¿Qué dices?

- Está bien.

-Que bien.- Ouma abrazo el brazo de Saihara.- Lo siento Kiibo-chan, pero Saihara-chan va a comer conmigo, este comentario hizo que se ganara una mirada de odio por parte de Kiibo, aunque claro eso a Ouma le causo gracia.

Mientras tanto Rantaro veía como Ouma salía con una gran sonrisa.

No te preocupes una vez que logre mi objetivo de conquistar a Saihara-chan, yo te ayudare a que encuentres a esa persona.

Recordó lo que Ouma le había dicho en clase. Y por un momento dirigió su vista a sus manos.

Confía en mí.

Tal vez pasar el tiempo con Ouma le estaba haciendo daño o eso quería creer. 

Fin del capítulo 4

Espero que les haya gustado.

Hasta  la próxima :)

A causa de un rechazoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora