Código Binario. (CH) (PAUSADA)

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De este capítulo en adelante los capítulos serán escritos por mí (y mi artblock aja).
No tendré guía para narrar asique si hay algún error de ortografía o algo parecido realmente agradecería que lo dijeran, me harían un favor <3.
¡Disfruten!

🌞____⭐

Rápidamente el uruguayo hizo un resúmen de las notas del argentino antes de dejar el cuaderno tal cual lo había encontrado e ir corriendo hacia su cuarto, claro que llevando algo para picar y así estar más entretenido. Una vez allí comenzó a relacionar todo con sus amigos y conocidos, también con los del argentino aunque no era que los conociera a todos.

Agarró su celular y vio sus contactos (que no es que justamente fuesen pocos) y vio uno por uno, pensando y reflexionando cuáles podrían estar relacionados o cuáles no con las características de esas cartas.

Alguien cercano tenía que estar enviando las cartas.

Alguien misterioso tenía que estar enviando las cartas.

Alguien meticuloso para que no le descubran.

Alguien que sea bastante cercano a su hermano como para saber dónde dejar esas cartas para que el argentino la vea.

. . .

"¿Alguien muy cercano?"

Agarró sus notas de nuevo y las volvió a revisar, notando que al parecer su hermano no anotó aquello último.

Estaba más adelantado que el argentino, su hermano, el mismo que se mataba la cabeza investigando cosas que le daban curiosidad.

"Pero . . . no cualquiera sabe este código, pero si cualquiera lo puede buscar. . . "

Era obvio ahora que cualquiera pudo escribir aquello . . . ¡al igual que cualquiera podría buscarlo! Hasta él podrí. . . . . .

¿Él?

. . .

El chileno estaba a punto de irse a su zona de trabajo hasta que escuchó el timbre de su casa sonar, haciendo el típico ding dong que resonó por toda la vacía casa. Chile fue a abrir, denotando sorpresa el que aquél país haya llegado a su casa, más que nada el que haya entrado así sin más al haberlo empujado un poco para hacerle espacio.

-¿Uru? ¿Qué hací aquí, poh? -preguntó el dueño de la casa con obvia duda.

- "No veo la necesidad de decírtelo a la cara,

asique te lo diré por estas cartas. "

El chileno quedó pálido al escuchar eso y ver que el de menor estatura sacaba una carta escrita con código binario de su libreta, leyendo aquello que dijo por las notas.

- ¿Sabés de esto? -por fin le dirigió directamente la palabra al país mayor, volteandose para mostrarle mejor la carta.

-Eh. . .

-Respondé.

Estaba claro que Chile no sabía que respoder, no sabía si el hermano de "su crush" se había dado cuenta de que fue él o si sospechaba que fuese cómplice de quien hacía las cartas, aunque en parte si que era el cómplice, ¿no?

-Ya se que sos vos, boludo, dejá mejor de firmar las cartas estas porque mi hermano se va a dar cuenta.

-Ah -suspiró de alivio, sentándose en su sillón y dándole un poco de espacio a su invitado por si este quería hacerle preguntas o solamente sentarse.

-Entonces mi hermano, ¿eh? -rió mientras lo veía con una mirada divertida, ¡no se creía eso del chileno! y menos que justamente le guste su hermano.

-Cierra el hocico mejor -le dio un golpecito en la cabeza, ua veía que si le hacía mal le denunciaba y a la mierda sus oportunidades,

aunque el menor rió más por eso.

-Boh, ¿quién más lo sabe? -dijo tras reírse bastante fuerte para luego sentarse alado del chileno.

-Brasil.

-Ah. . .

-¿Qué pasa?

-No. . . nada.

El momento ya se había vuelto incómodo tras esa muy diminuta conversación entre ambos países, aunque el mayor de allí sospechaba que algo tenía el uruguayo contra el brasileño, lo sospechaba, pero tal vez no era más que un repentino pensamiento.

Por otra parte, Argentina llegó a su casa con la compra, llamó a su hermano para saber donde estaba pero no recibió respuesta, a lo mejor y se quedó dormido aunque era ya de mediodía en esa parte del mundo.

Avanzó un poco más y notó bastantes latas de cerveza, sabía que su hermano bebía bastante pero vamos, ¿todas las latas? ¡ahora tendría que comprar más!

Por alguna razón su mirada terminó en su libreta, juraría que la dejó abajo de las cartas de su admirador secreto pero en cambió, esas cartas ya no estaban, y más extraño aún: la contratapa tenía manchas amarillas.