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Mateo estaba gruñendo en mi oído mientras se movía encima mío, tenía mis manos recorriendo su espalda sintiendo como se adentraba en mi interior soltando leves gemidos. Eran cerca de las 11 y estábamos en mi departamento desde la noche de ayer, mateo venía llegando de Paraguay y paso a verme un rato hasta que se le hizo tarde y le dije que se quedará a dormir. Sentía a Mateo tensarse encima mío hasta que soltó un leve jadeó mordiendo mi cuello terminando dentro mío, siguió dando embestidas hasta que  llegue al orgasmo gritando su nombre. Teo se apoyó en mi pecho respirando agitadamente mientras intentaba regular su respiración, dejé caer una mano en sus rulos dando leves caricias en ellos. El rapero se levantó luego de unos minutos para ir al baño y quitarse el preservativo. Tome la remera que estaba en el suelo para ponermela y fui hasta mi placard sacando un conjunto deportivo Adidas negro con las rayas blancas a los lados y unos tenis blancos. Una vez listo espere a que mateo se terminara de bañar mientras sacaba ropa interior del mueble a un lado del tocador. Espere paciente hasta que salió del cuarto de baño con una toalla a su cintura y con el pelo mojado, sonreí pasando por al lado de el y antes de entrar al baño me toma de la cintura dejando un beso sobre mis labios.

Una vez lista, salí de la ducha poniéndome la ropa interior que traje hasta el baño y salí del cuarto dándome como campo de visión a Mateo recostado en la cama ya vestido con su celular en mano y a rayo a su lado buscando llamar su atención con un peluche chiquito que tenía en la boca. Fui hasta el conjunto que anteriormente había elegido y comencé a cambiarme dándole la espalda al morocho, sentí su silbido y reí dándome la vuelta mostrándole mi dedo del medio.

Mira a rayo nene-dije negando y tome el top negro- quiere jugar con vos mateo

Quiere jugar todo el día boluda-dijo quejándose a la vez que le quitaba el peluche al cachorro para tirarlo al otro extremo del cuarto y este corría a por el

Y si sacamos a darle una vuelta?-pregunte sentándome a un lado de él tomando un peine para comenzar a desenredar mi pelo- pasamos por tina y vamos a la plaza cerca de tu casa, que decís?

Dónde está su correa?-dijo asintiendo mientras se paraba yendo a las cosas del cachorro a un lado de la cama- Decile que salga amor

Rayo vení-dije dando golpecitos en la cama haciendo que el perro corriera hasta donde estaba moviendo la cola de un lado a otro, se quedó a los pies de la cama esperando a que lo subieran, ya que es muy pequeño aún y no alcanza a saltar para subir- oww mi bebé!

Te quedas en mi casa después-dijo mirándome desde un extremo con las cosas del perro en la mano- más tarde va Camilo a jugar a la play

Esta bien-accedí a la petición del morocho tomando entre mis brazos al cachorro que no paraba de moverse al notar que saldría con nosotros- llevare un cambio

Si ya tenes ropa allá-dijo soltando una risita dándose la vuelta para mirarme

Pero no ropa interior-dije mirándolo antes de ir hasta mi mueble donde estaba la ropa interior y saque un cambio

Te espero abajo con rayo-dijo tomando al cachorro antes de bajar hasta el primer piso

Unos minutos después ya tenia listo la mochila con un cambio para mañana, tome mi celular antes de bajar a la primera planta donde estaba mateo hablando de algo con cazzu, cuando baje del todo se callaron y los mire con el ceño fruncido. Me acerque a Julieta despidiéndome de ella y note que se miraban de reojo y eso me confundió más, tome a Mateo de la mano antes de salir del departamento.

Comenzamos a caminar en silencio hasta el ascensor, una vez dentro mateo marco la primera planta haciendo que se cerraran las puertas para comenzar a bajar. Teo le hacía cariño a rayo tratando de que se quede tranquilo ya que no dejaba de moverse en sus brazos, una vez salimos del edificio mateo me guío hasta un carro que nos esperaba a unos pasos del edificio donde vivía. Subimos al comprobar que era el chófer del Uber y le indico la dirección a la que íbamos, más específicamente, la boca. Nos mantuvimos en silencio todo el camino hasta que se comenzó a ver los dos puentes característicos de la boca, una vez entramos de lleno al barrio comenzó a ir más despacio siguiendo la dirección que estaba en el celular que nos guiaba. Unos 3 minutos más y el auto paro frente a la casa de mateo. Bajamos despidiéndonos del señor que manejaba para adentrarnos a la casa del rapero. La casa estaba totalmente en silencio dando a entender que no había nadie, Teo dejo a rayo en el piso para llevar mi mochila hasta su cuarto, fui hasta la cocina para servirme agua, estaba de espaldas a la entrada llenando el vaso hasta que sentí unas manos en mi cintura y una respiración en mi cuello.

𝐂𝐨𝐥𝐭𝐚 •𝐓𝐑𝐔𝐄𝐍𝐎•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora