Blossom.

Dragon's mouth

Salen en 3 2 1

La plataforma subió, la música comenzó y las fans gritaron hasta que se quedaron sin pulmones.

Amaba esto.

— ¡UNICORN!

Las fans gritaron.

— ¿Esperarán por nosotros? ¡UNIQ tendré su comeback pronto! 

Las fans enloquecieron.

Yixuan trato de calmarlas pero no cambian en su emoción, Yibo y yo simplemente nos reímos.

— ¡Esto fue You and Me, UNIQ! Adiós Changsha, nos veremos pronto.

Las luces se apagan, seguían gritando ¿No lastimarían sus cuerdas vocales? Como sea, ellas realmente son eufóricas, siempre.

— Chengyan, vamos, hay que ir a cambiarnos.

Wenhan lo arrastró por los pasillos y en el camino se sumó Yibo.

En el camerino ya estaban todos, rápidamente nos cambiamos de vestuario mientras les avisaban que seis VIP vendrían. Era un poco agotador pero también interesante.

— Yohan que demo-.

Levanto la mirada con curiosidad y encontró a dos chicos mirándolo, uno de ellos sorprendido, quien previamente había hablado y el otro, sonreía ampliamente, emocionado tal vez.

— Cao Chengyan, soy Kim Yohan ¡Estoy muy contento de conocerte al fin! Soy tu fan.

El tipo hablaba de forma emocionada y torpe, mientras el otro no salía de su sorpresa, era bastante curioso todo esto.

— Oh, Kim Yohan ¿Eres coreano?

Preguntó, era lógico, además parecía haber escuchado antes su nombre, tal vez era un atleta por la forma de su cuerpo.

— ¡Si! Ahora estoy de vacaciones, vine de Seúl para verte, este es mi compañero Junho.

Golpeó al más bajo en el hombro y pareció reaccionar, aunque aún lo miraba de forma extraña.

— Vaya, que bueno, espero que hayas disfrutado mucho de nuestro Show.

— ¡Lo hice! Realmente espero ansioso tu comeback ¡Compraré muchos albums!

El chico prácticamente vibraba de emoción, era lindo, bueno, el era muy guapo.

— Muchas gracias, espero verte la siguiente vez entonces.

Sonrió cálidamente antes de darle una palmada a su amigo en el hombro, iba a hacer lo mismo con él moreno pero antes de darse cuenta, estaba siendo abrazado.

Vaya que el chico tenía fuerza, lo estaba asfixiando un poco. Gracias a Dios lo soltó antes de que empezará a tornarse morado.

Ambos se despidieron y lo dejaron solo, entonces comenzó a arreglar todo y al final se reunió con los demás miembros en la Van.

— Chengyan, escuché que te toco dos.

Comentó Yixuan, quien lo veían con bastante diversión. Era el mayor de todos y si bien los cuidaba bien y era un buen líder, siempre lo tenía en la mira ya que solía ser revoltoso.

— Así es Gege, al contrario de ustedes que tuvieron uno cada uno. Aunque el otro chico era un poco extraño, casi un robot, la única emoción que ví fue asombro. Fue divertido.

Todos pusieron los ojos en blanco y rieron, mientras viajaban camino a casa.

1 mes después.

— Esta es la última vez que tenemos sexo en lugares así.

Se quejó Yohan, Chengyan por su parte solo se rió, sudado y agotado después de una intensa actividad sexual.

Estaba en un auto alquilado cerca de un parque en Beijing, eran las 2 AM por lo que nadie estaba alrededor.

Nadie más que ellos.

— No le eches la culpa al zorro cuando el conejo es quien lo provoca.

Respondió, dejando un beso en su hombro y luego apartándose para poder vestirse. Era incómodo pero habían elegido ponerse calientes en el auto, entonces tenían que sufrir las consecuencias.

— Chengyan, es la novena vez que pasa.

Volvió a recriminarle mientras se vestía, y no podía decir nada a ello, el chico respiraba y él ya estaba deseando ponerle las manos encima.

— Es el destino, cariño. Además, tu querías venir aquí.

— Si, pero para una cita, no para tener sexo.

Se rió nuevamente, tenía razón en estar enojado, pero su fama y su horario así todo difícil y que el sea naturalmente sexy lo empeoraba.

— Está bien, Conejito. La próxima vez te llevaré a un Motel.

Recibió un golpe como respuesta y luego, el menor simplemente comenzó a reírse, contagiandolo a él.

— Eres un idiota, no se ni por qué estoy contigo.

— Yo si, porque soy guapo, alto, sexy, hago todo bien, eres mi fan y me amas.

Y sonaba un poco egocéntrico, pero en el último mes ambos habían terminado encontrándose en todos lados que ya estaban acostumbrados a verse. Tanto que no supo en que momento termino en el baño de un bar con las inmaculadas piernas del menor alrededor de su cintura y perdido en su calidez.

— Y tú me amas a mi.

El respondió con el mismo tono, pero en el fondo sabían que las palabras significaban.

Sabían que era real.

Y tal vez fue el hilo del destino, porque cuando lo tuvo en sus brazos espero sentir culpa, pero al contrario, se sintió bien, se sintió correcto.

Tal vez no crea en reencarnaciones pero siente como si lo conociera desde otra vida.