Blossom.

Baby's Breath

Río Han, 28 de octubre, 2019.

- Pero qué demonios...

Susurró Seungwoo, atrayendo la mirada de 5 rostros idénticos en shock.

Hace 24 años.

Corre.

Más rápido.

Huye.

El llanto se hace más fuerte.

¿Por qué todo tuvo que complicarse así?

El llanto ahora se había multiplicado, iba a enloquecer.

Encontró la puerta roja, suspiró, dejo la canasta en la puerta y tocó el timbre, entonces huyó.

La puerta se abrió y una monja salió, mirando con pena la canasta, en la cual provenían llantos. Ella sabía que era esto, lo había visto tantas veces que ya era normal.

Tomó la canasta y llamo a las hermanas, todas se reunieron en la sala y la abrieron, sorprendidas.

5 pares de ojos las miraban, rojos del llanto, y envueltos en mantas andrajozas.

- Son hermosos.

Susurró una de ellas mientras tomaba a uno en sus brazos, el resto de hermanas la imitaban.

Los vistieron, alimentaron y cuidaron por unos meses, hasta que el primero se fue y así, poco a poco todos fueron adoptados.

Junho término de hablar, Minhee a su lado estaba encogido, abrazándose a si mismo. Los 5 chicos aún no salían de él shock y el resto, tenían una mirada lastimera en sus rostros.

- ¿Ustedes lo sabían? ¿Todos?

Murmuró Chengyan, saliendo de su estado de shock para mirar a todos.

- Acabo de descubrir esto, fue difícil hacer que las monjas hablarán, nadie sabía que eran adoptados.

Respondió Junho, tratando de atraer la atención pero fallando.

- Pero sabían acerca de nosotros ¿No? Digo, todos se conocen entre sí, menos nosotros.

Negaron, asustado mientras se miraban entre sí, fue Wooseok quien habló.

- No sabíamos quiénes eran, por eso nos sorprendimos al verlos.

- ¿Y luego que? ¡Estuvimos un maldito mes juntos y nunca se te ocurrió decirme "Oh, mira, conozco a alguien idéntico a ti"!

- Yo... Lo siento.

Lloraba, Wooseok, Eunsang y Hangyul se veían desesperado. Yohan, por su parte se había alejado de todos y miraba el suelo, llorando desde hace mucho tiempo.

- Tu lo sabías ¿No es así, Yohan? Por eso veniste a mi emocionado, mientras Junho estaba en shock ¡Jodidamente lo sabías y no dijiste ni una palabra! Eres un... Imbécil.

El llanto era más fuerte, confirmando lo que ya sabía. Enojado, Chengyan se fue de el lugar, seguido por sus mellizos.

Esto era un circo, mentiras y engaños, y al final, mucha gente salió lastimada.

Pero la verdad tenía que saberse, aunque a Minhee se le rompiese el corazón al hacerlo.