Mes Jaytim Challenge

Day 23

"Corazon de hierro"

El mundo cada vez avanzo más y más, los viejos vigilantes tuvieron que adaptarse o serian asesinados, ya que sus viejos enemigos eran moscas comparados con los nuevos que venían a imponer su mercado y poderío, la ciudad de New Gotham, fue la mas afectada con ese cambio. Su antiguo vigilante Batman, había dejado de circular hacia años y ahora estaba su manto en manos de uno de sus hijo adolescente aun inexperto en su labor cono vigilante.

Durante su tiempo de retiro, el murciélago estuvo trabajando en un proyecto demasiado descabellado y quizás falto de ética, un proyecto que sabia que aun en esos tiempos se tachaba como una locura extremista, pero no tenia mucho que perder si no lo intentaba. Por ello lo mantuvo en secreto de sus hijos, menos de Terry, el actual Batman, el cual no juzgo su accionar menos si no quería perder su manto.

—¿Estas seguro qué reaccionara? No juzgo ni nada pero un cerebro criogenizado por décadas dudo que reaccione.

Bruce no respondió a su aprendiz e hijo, solo siguió haciendo las evaluaciones y dando algunos choques eléctricos pequeños para que respondiese, aquello que con tanto recelo creo y ahora estaba en un tanque de contención con líquido.

Fue una espera larga demasiado larga para una respuesta de parte de su creación, hasta que este despertó, lo que no espero Bruce fue que este despertara desorientado y agresivo, demasiado agresivo, que ni si quería Terry pudo darle cara al cyborg que había logrado apañárselas el solo de huir de la cueva. Desde ese momento Terry y Bruce trataron de rastrearlo y detenerlo sin mucho éxito, ya que temían que fuera a hacerle a la población un viejo vigilante con un cuerpo más que capas de hacerle frente a un kriptoniano, el cual por muy desorientado estaba en esa nueva época podia apañárselas de huir y mantenerse debajo de las sombras o eso intento por un tiempo, ya que el bajo mundo de New Gotham supo su regreso y lo recibieron de muy mala manera siendo ahora no solo huir del anciano Bruce Wayne y si aprendiz, también debía huir de los nuevos criminales, los cuales eran mas insistentes que su viejo mentor, al punto que algunos lograron dañarlo y sin que nadie lo pudiese curar tuvo que vagar por toda la ciudad hasta sin querer terminando de agotar su batería.

Para cuando volvió en sí, noto que no estaba en un sucio callejón sino que era una habitación, extrañamente tranquila y muy amueblada, intento levantarse pero noto que su cuerpo no respondía cosa que lo asusto, activando una alarma, haciendo peor su inestable deseo de huir creyendo que estaba en peligro, hasta que la puerta se abrió de golpe y entro corriendo un pequeño de aparentes niño de 9 años.

—¡Sino te tranquilizas, no te desconecto! —Advirtió el pequeño chico, que se acerco a una tableta que estaba en la cómoda de la habitación.

—¿Quien eres? ¡Que le hiciste a mi cuerpo! -Grito histérico el cyborg, que no estaba del todo feliz con su parálisis total, haciendo bufar al niño que dejo su atención en la tableta para mirarlo a él.

—Vaya forma que agradeces que te salvara de ese callejón, ya tenias encima a tres vagabundos, ¡Literalmente te robaron piezas y me toco comprarte nuevas! —Le lanzo con enojo por la falta de educación del robot humanoide—. Como sea, la próxima que te encuentre no te ayudare —Con eso dicho, el joven niño desactivo todas las maquinas y aparatos que tenían al cyborg colocadas.

Ya libre, el mitad robot casi salió corriendo de la cama, casi, porque solo alcanzo a sentarse, ya que el ruido de patas y ladridos lo detuvieron para dar presencia a un enorme Gran Danés, pero sus ojos no eran de un animal común menos cuando se puso en modo de ataque apareciendo mas grandes sus caninos, dejando a la vista que era un robot guardián, uno muy raro.

—¡Titus, abajo! — Se escucho la voz esta vez de alguien mayor regañando al canino, el cual se controlo y volvió a su modo pasivo. El muchacho entro al cuarto y el cyborg descubrió que tenia un ligero parecido con el niño, con el que discutió antes— Ya despertó tu invento loco por lo que veo, si se largara que lo haga rápido, ya estorbo mucho en el departamento sino que se vaya al chiquero de tu cuarto —Lanzo despectivo el mayor antes de irse llevándose consigo al can.