Mes Jaytim Challenge

Day 14

"Los giros de la vida"

Jason nunca fue hombre de niños, nunca ni en sus más locos sueños se imaginaba con hijos en toda su vida, pero cuando poco tiempo tuvo para procesar que era un omega, tuvo el mismo poco tiempo para procesar que esperaba un niño y menos aun que este fuera hijo de Bruce, un hijo que este creyó muerto cuando el Joker lo asesino en aquel sitio alejado en Medio Oriente. Fue difícil manejarlo, más aun llevar adelante todo el embarazo y tener al cachorro, el cual abandono con un tiempo con la Liga, cuando fue enviado con Ducra, solo para después terminado todo su entrenamiento se arrepintió y regreso a la Liga con la falsa idea de que quería ser parte de estos pero al final solo planeo recuperar a su cachorro y huir, cosa que cumplió cuando se gano la confianza completa de Talia y Ra's.

Su huida lo llevo devuelta a Gotham City, donde no le importo que Bruce siguiera con su vida más aun, que empezara a estrenar al nuevo petirrojo de su equipo. Jason, durante todo ese tiempo acepto su segundo genero, siendo un pequeño paso a su largo camino como padre omega soltero.

Conseguir un empleo sin terminar del todo sus títulos fue difícil pero no imposible, terminado como mesero de un restaurante durante la mañana y por la tarde como parte del equipo de limpieza de un hotel, con mucha suerte su cachorro se quedaba con una niñera que cumplía muy bien su labor a pesar de vivir en un barrio tan pobre. Jason, casi se abstrajo de toda su anterior vida como vigilante, tanto que nunca se detuvo a ver y notar como cierto pajarito lo perseguía a escondidas, casi como si se divirtiera de ver que hacia en su día a día. No lo descubrió hasta que empezó a notar que tenia más dinero o comida del normal en su casa, como extrañas las propinas demasiado altas para un servicio tan pequeño y comida tan barata y mala que servían allí, sin embargo lo descarto como coincidencia y estar completamente centrado en su trabajo.

Durante ese tiempo su niñera de confianza, casi no se lo pensó mucho cuando la joven niñera le dio como referencia a otra persona, que podía perfectamente cuidar al pequeño niño de 3 años, de actual nombre: Thomas (después de casi un año entero de pelear que nombre ponerle, desde que huyo de la Liga de los Asesinos). Aquella persona de referencia de la niñera, era un joven adolescente de apenas 14 años de nombre: Alvin Drape. Al mirarlo por un segundo dudo en dejarle al pequeño pero al final termino cediendo y se fue a su trabajo, aunque paso durante todo el día preocupado por su cachorro, llamo en sus pocos ratos libres y todo parecía bien, cuando llego a casa en verdad aquel chico había cuidado bien al pequeño.

Alvin se quedo como el niñero de titular y de confianza de Jason, o lo fue hasta que Jason descubrió que el nombre del adolescente no era su verdadero nombre, sino que era Timothy Jackson Drake, como lo supo, fue pura casualidad, cuando salió de compras y vio a la lejanía al joven y estaba a punto de saludarlo cuando escucho a una reportera castaña gritar su nombre y comenzar acosarlo. Fue como una traición completa a su persona, tanto que comenzó a confabular su trampa, usando uno de sus día de trabajo al cual se presento enfermo y con suerte le dieron día libre.

—Tenemos que hablar Alvin —Aviso al muchacho usando el nombre falso del chico, para hacerle creer que aun no se enteraba de nada.

—Claro, señor Peterson —Dijo el joven adolescente, que ingenuamente no noto que ya iba a ser confrontado.

Jason guió al chico al cocina, lo suficientemente lejos para que su cachorro no escuchara la conversación, estando allí, el mayor cambio su postura a una más agresiva.

—¿Qué demonios se traen tu y Bruce entre manos reemplazo? —Le preguntó molesto al joven petirrojo, con suerte el menor no mantuvo su alias en pie, sino que también salió a flote su verdadero rostro—. No pueden dejarme en paz, ya tienen todo lo que querían y yo estoy feliz con lo que tengo —Evito tocar el tema del cachorro, porque quería dejar en tela de juicio que tanto sabia Tim y Bruce de su actual renacimiento y segunda vida.

—Bruce, no sabe nada de tu resurrección, menos aún, de tú nueva vida y que yo estoy vigilándote casi las 24 horas del día —Dijo finalmente Tim, usando su voz real y sus propias emociones que eran casi serias y frías, casi como las de un alfa.

El omega gruño molesto y no le hizo falta de nada de saltarle encima al adolescente, agarrarlo por el cuello con una mano y pegarlo de golpe a una de la paredes de la cocina. Estaba molesto por la fanfarronerías del menor, que solo empeoro con saber su engaño y que lo estaban vigilando como si fuera un criminal peligroso, cuando solo era un simple civil con una vida común y corriente.

No se iba a rebajar a pelear con ese alfa, menos pensando que buscaba motivos para quitarle a su hijo o hacerle algo peor que solo joderlo, por lo que solo haciendo alarde de su fuerza y entrenamiento, arrastro o mas bien se llevo colgado del cuello a Tim hasta la puerta de la entrada y lo arrojo al pasillo, con la pura suerte que la pared vieja aguantara la fuerza del impacto.

—No vuelvas a entrar a mi casa, mocoso —Gruño molesto Jason, antes de cerrar la puerta y colocar todos los pasadores en esta.

Los días posteriores, Jason hizo malabares para conseguir otra niñera pero un par de veces le toco llevarse al pequeño consigo a su trabajo, con suerte Thomas no le gustaba meterse en líos mientras estaba con el. Aun notaba la presencia de Tim que lo perseguía, lo ignoro y evito por completo que estuviera cerca de su cachorro, claro siguió encontrándose con dinero y comida extra, los reviso con más paranoia y al estar seguro que no eran peligrosos los usaba.

—¿Podrías dejarnos en paz? —Gruño una noche Jason, casi a la nada. Casi porque Jason sabia que el dirigido lo escuchaba, y no tuvo que tardar mucho para saber que era verdad sus paranoias.

—Solo me aseguro que estén bien los dos, no quiero molestarlos solo venia a dejar lo de la semana —Aviso aquella tercera persona, que se asomo por la ventana que daba a la escalera de emergencia—. Mira, no quiero restregarte ni nada por el estilo, sobre tu dificultad económica o algo parecido, solo quiero darte una mano —Explicó el muchacho, que con libertad abrió la ventana para poder asomarse mas no entro al departamento y solo dejo dentro de este la bolsa.

Jason se le acerco y tomo la bolsa y la revisó, notando que traía no solo comida sino había un pequeño juguete, miro al alfa y tuvo ganas de empujarlo y cerrar la ventana pero...

—Solo por esta vez te dejo entrar -Dijo Jason antes de desaparecer por la cocina para sacar todo de la bolsa, sin poner atención a la pequeña sonrisa de triunfo del vigilante.

Esas mismas palabras las repitió una y otra vez, cada vez que aquel chico se presentaba casi cada 28 del mes, y traía consigo aquella dicho bolsa de víveres a la cual se sumaba unos pequeños regalos tanto para el infante como para Jason. Para cuando se dio cuenta que el alfa estaba más cómodo y con mas libertad por su casa era tarde, ya que Thomas le tomo cariño y despegar al pequeño del petirrojo era difícil, menos aún que se olvidase de sus citas. Al menos, ya no eran peleas constantes por dominio en la casa, Tim aprendió a que ese era solo territorio de Jason, el cual aun siendo un omega podia quebrarle los huesos sin titubear, por lo que llevo la fiesta en paz y tuvo que admitir que Jason, era más sensato que otro alfa que estuviera en sus circunstancias. Por que nadie dejaría que un extraño que reemplazo tu lugar en la familia, entrase a tu casa y conviviese con tu hijo como aceptase tu ayuda económica, sin contar la ayuda a curarle las heridas, la comida caliente y un techo donde refugiarse si no quería estar en la mansión por el motivo que fuera. Definitivamente, Tim no podía estar enojado con Jason.