Pokémon MMEC Equipo DarkStars

Capitulo 2. El manantial Subterraneo

||Lago Subterráneo, Distancia del Pueblo Hojaldra desconocida. 2 de agosto del 7,813||

El sonido de múltiples corrientes de agua desembocando en un manantial eran presentes en el lugar, todo esto mientras el Shinx empezaba a despertar con un leve dolor en su cabeza, posiblemente debido a un golpe en tal lugar, por lo que se levantó sobándose levemente el área afectada, viendo su alrededor con los ojos entrecerrados mientras sentía la arena y piedras de la arena debajo de sus patas. 

--¿Aquí nos trajo esa corriente?-- Se preguntó el felino antes de mirar más a su alrededor, notando que a cierta distancia suya se encontraba la pokémon marrón tirada en la orilla de igual manera que él, preocupado al instante por saber si se encontraba bien, el felino fue rápidamente dónde ella, aún sin recuperarse del todo, por lo que tambaleante termino cayendo encima de la pobre vulpina. --Auch...--

Se quejó momentáneamente el felino, intentando el recuperar la compostura con tal de ponerse de pie, cosa que logró para ver a la pokémon semi despierta por el repentino descuido del felino, al verla, el Shinx se hizo a un lado dejando que la pokémon marrón se levante con cierta pesadez. 

--Creo que ahora estamos a mano.-- Mencionó la vulpina refiriéndose a lo ocurrido con anterioridad en el sendero antes de ser perseguidos por los Combee. Tras ponerse algo más espabilada, la pokémon empezó a ver por todos lados en búsqueda de su hermano, al cual vio semi enterrado en la arena. --¡Ríu!-- Dejando al Shinx de lado, la pokémon corrió a socorrer al perro azul, llegando cuanto antes para empezar a desenterrar la mayoría de su cuerpo cubierto por la arenilla del lugar. 

--Gracias Hermanita...-- Agradeció el pokémon para salir por su parte de la arena, de la cual empezó a sacudirse con tal de quitarse la mayor cantidad posible, la cual, se encontraba en todo su cuerpo y algunas parte de su cara. --¿Dónde se supone que estamos?-- Preguntó el pokémon mirando algo asombrado el lugar al que habían llegado, pues era una clase cúpula con diferentes agujeros redondos que daban lugar a entradas de luz natural, además de tener un par de corrientes que llegaban al lugar constantemente. 

--En un tipo de manantial subterráneo.-- Comentó Tesla al analizar bien su alrededor junto al pokémon.

--Pues menos mal dio con este lugar y no con una cascada jaja...-- Bromeó con cierto nerviosismo, el cual, no aligero para nada el ambiente, por lo que se quedó algo mudo antes de mirar bien al Shinx. --Oh cierto, perdón por lo de antes.-- 

--Ya pasó, al menos escapamos de esos Combee, solo salgamos de aquí y ya.-- Sugirió el felino antes de notar como las entradas de luz del lugar empezaban a a disminuir su luminosidad. --Y parece que se está haciendo de noche, genial...-- Dijo con cierto fastidio antes de explorar levemente los alrededores del manantial.

--Salir de noche es peligroso con esos pokémon salvaje, lo mejor sería descansar por aquí esta noche.-- Mencionó la Vulpina mientras se recostaba en un montículo de arena a lo que el otro pokémon solo responde con un suspiro.

--Tan perezosa como siempre, ¿eh?-- Cuestionó de una forma burlona.

--No es pereza, es sencillamente la verdad, si salimos estamos expuestos.-- Replicó nuevamente la vulpina.

--No lo digas como si mandaras aquí, ni siquiera sabemos si el Shinx quiere...-- Antes de lograr terminar su oración, Tesla ya había encontrado un par de ramas secas alrededor del lugar, junto con un par de hojas grandes que habían crecido alrededor del manantial, con ello, empezó a improvisar unas camas para no dormir en la arena directamente y empezó a formar una pequeña fogata que logró prender con electricidad pese a la humedad.

--Quedarnos será lo mejor, no podemos arriesgarnos a ser atacados, y para que no sea tan pesado dormir en la arena, es mejor usar de estas.-- Aseguró el felino para recostarse en forma de pan en sus hojas, cosa que la vulpina marrón siguió su ejemplo y se puso cuanto antes de la misma forma que el felino alrededor de la fogata para secarse bien, no sin antes mirar con una reacción de victoria a su hermano.