once.

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Isidora.

Caminaba por el hospital en el que trabajaba mi vieja ya que se había olvidado la comida en mi casa y vine a traersela.

Pasando por el pasillo de terapias intensivas veo una cabellera verde bastante reconocible sentada en una de las bancas de la sala de espera, con las manos en la cara y su espalda subía y bajaba rápido.

- ¿Tomas?- pregunto acercándome a él y levanta su cabeza mirándome y se limpia las lágrimas que tenía en sus mejillas- ¿qué paso?- dejo la bolsa en el piso y me siento a su lado abrazandolo

- E-es mi mejor amigo- responde con la voz quebrada, partiendo mi corazón en ocho partes al verlo así- p-parece que lo quieren desconectar, dicen que no va a salvarse- al decir eso último quiebra entre mis brazos y yo acaricio su espalda intentando calmarlo

- Mi mamá es enfermera acá- suelto mirando el techo e intentando no comprometer a mi madre, Tomas se ve bastante capaz de hacer un quilombo para que no desconecten a su amigo- le pregunto si puede hacer algo, pero no te puedo prometer nada.

El no dice nada, solo me abraza y su respiración comienza a calmarse pasados los minutos.

- Gracias posta- se endereza quedando cara a cara conmigo, suelto una sonrisa tierna y el pasa un mechón detrás de mi oreja, haciéndome poner nerviosa

- No pasa nada, para eso están los amigos ¿no?- sonrio intentando disimular el calor en mis mejillas o controlarlo pero fue medio inútil, ya que el se río

- ¿Los amigos se chapan?- eleva una ceja y yo abro los ojos

- Algunos si, otros no- titubeo tragando saliva cuando el moja sus labios con su lengua, haciéndome desear besarlos- l-le voy a dejar esto a mi mamá y vuelvo- murmuro agarrando la comida y salgo trotando así paso ese momento incómodo para mi

Al fin la encontré en unos de los pasillos hablando con uno de los médicos muy animadamente.

- Mamá- interrumpo y ambos dirigen su atención a mi- toma, te olvidaste esto en casa- le extiendo la bolsa y ella la agarra con una sonrisa

- Julián, ella es mi hija Isidora- me agarra de los hombros y sonríe presentándome.

- Hola, un gusto- me extiende la mano y yo la tomo con una sonrisa falsa

- Ma, hoy nos juntamos en lo de Ale, pero más tranqui- sonrio y me alejo de ellos en dirección hacia donde estaba Tomas sentado y con la mirada perdida.

Era tan hermoso.

- ¿Vos le dijiste a Ysy que me invité a la juntada?- pregunto cuando estaba enfrente suyo y me mira sonriendo

- ¿Se nota mucho?- se cruza de brazos dando esa pinta de chico malo que tenia, esa pinta que tanto me gusta. .

- Un poco nomas- muerdo la parte interior de mi labio y el se para, quedando a centímetros de mis labios.

- ¿Puedo?- mira mis labios y con una mano me agarra de la cintura acercándome a su cuerpo.

- Si querés- levanto mis hombros y une nuestros labios, así que por inercia paso mis brazos detrás de su hombro y lo acerco más hacia mi.

A la mierda lo que me dice Alejo, ya me enganché y no hay vuelta atrás.

























𝐃𝐎𝐌𝐈𝐍𝐆𝐎 ⸺ 𝐂.𝐑.𝐎 [𝐓𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚𝐝𝐚]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora