catorce.

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Tomás.

Al escuchar las palabras de Ysy senti como mi mundo se caía a pedazos, como mi vida empezaba a tornarse triste y oscura, como mi vista se nublaba debido a las lágrimas que se acumulaban en mis ojos y segundos después estaban recorriendo cada parte de mis mejillas.

Isi me llevo a afuera para que tome un poco de aire, en si lo necesitaba, estaba muy aturdido por todo y al ver a los chicos mal no ayudaba mucho, pero al ver a esa morocha, a esa niña que tanto me calmaba, me transmitía paz, esa paz que no pude encontrar por meses y años.

Ahora estábamos en el hospital, estaba por entrar a la habitación donde lo tenían pero no tenía la  valentía suficiente para ver a mi mejor amigo sin vida.

- Tomi ¿no vas a entrar?- Isi después de varios minutos de estar abrazada a mi se separa y corre los mechones que  caían por mi cara

- Tengo miedo reina ¿como se supone que vea a mi hermano muerto? ¿Como se hace para aliviar el dolor que tengo adentro?- vuelvo a abrazarla y ella no tardó en envolverme en sus cálidos y finos brazos

- Afrontandolo, así podes aliviar ese dolor- acaricia mi nuca y yo suspiro triste

- Prometeme que vas a estar acá, que no te vas a ir y que no me vas a dejar- susurro contra su cuello, ella se separa un poco pero al nivel de que nuestras caras queden a pocos centímetros

- Te prometo que cuando vos salgas de esa habitación voy a estar para sostenerte, apoyarte y ayudarte con lo que quieras, estoy para vos Tomi- sonrío como puedo y le doy un corto beso en sus labios

- Gracias- me levanto de la silla y me adentro en el pasillo en el cual estaba la habitación donde se encontraba actualmente.

Abro la puerta con mi mano temblando, no podía controlar el huracán de emociones que pasa dentro mío.

- Amigo...- suelto un suspiro acompañado de mis lágrimas en las mejillas al verlo asi- no me podes hacer esto, boludo la puta madre.

Me tironeo del pelo enojado y abro el cajón de la mesita de luz que tenía la habitación ¿para que? Nose porque el estaba en coma y era medio al pedo pero ahí yo guarde las cartas que le escribí durante meses

Día 1:

La vida no es lo mismo sin vos hermano y eso que solo llevo 1 día sin vos, te extraño.

Las lágrimas caen sin parar por mis mejillas mientras leía rápidamente y pasaba las cartas, sin poder creer lo que me estaba pasando.

Día 80:

Ya nose como seguir hermano, todos me dejan a un costado, nadie se pone en mi lugar. Dame fuerzas mi loco.

Dejo las cartas a un costado y me dirijo a la camilla y mordiendo mi labio acaricio el pelo negro de Lucas.

- Te fuiste hermano- mi labio temblaba debido a la frustración y tristeza que cargaba encima- me dejaste acá solo, solo sin nada ni nadie, todos me van a dejar como en Neuquen, todos me van a usar y voy a tener que ir con vos- lo abrazo y lloro desconsoladamente en su pecho frío.

- Señor Campos- abre la puerta la enfermera que atendió todo este tiempo a Homer- enserio lamento mucho esto, pero tenemos que trasladar a Lucas Gimenez a la morgue, luego de los estudios van a poder llevarlo al velatorio ¿si?- asiento separandome y beso la mejilla de Lucas

- Te amo hermano, siempre- cierro los ojos unos segundos y luego salgo de la habitación
































𝐃𝐎𝐌𝐈𝐍𝐆𝐎 ⸺ 𝐂.𝐑.𝐎 [𝐓𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚𝐝𝐚]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora