Capitulo 7

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-Capítulo VII-

Harry se inclinó sobre su cama, cansado. Honestamente, ¿quién pensó que una carrera como cantante y guitarrista era tan difícil? Harry miró a un lado, al espacio vacío en su cama. Marvolo estaba en algún lugar de Albania buscando la diadema de Rowena Ravenclaw. Cada vacante que tenía Harry se gastaba para visitar a su esposo, pero dormir en un hotel con su esposo no era lo mismo que dormir en su cama. Claro, Harry podía ver cómo Marvolo se estaba perdiendo un día más en las artes oscuras y no quería nada más que detenerlo, pero ... Harry se llevó una mano a la frente y le recordó de dónde había venido.

-NEA-

"¿Estas viniendo?" Walburga preguntó, sorprendido.

Harry asintió, mirando a Sirius. Hoy era la primera vez que iba a la escuela. Dumbledore acababa de convertirse en el director y en poco tiempo comenzaría la Segunda Guerra Mágica y todavía no Marvolo. Harry acompañó a los Black a Kings Cross e inmediatamente buscó a sus padres. Los Potter eran fáciles de localizar y Harry podía ver el parecido ...

-NEA-

Voldemort se acercó a Evans, los ojos del hombre estaban pegados al hijo del Potter.

"¿Evans?" el hombre se volvió perplejo, solo para que creciera y una sonrisa apareciera en su rostro. "¿Me extrañaste?"

Evans asintió, inmediatamente apoyándose en su abrazo. Voldemort lo sintió mirando a los niños y lo dejó. Sabía que Evans amaba a los niños, así que dejó que su esposo los mirara tanto como él quería. Aunque quería toda su atención en sí mismo, por ahora lo dejó. Voldemort miró hacia donde le habían robado la atención de su esposo, para ver a una chica de cabello rojo oscuro, probablemente 11. Ella estaba sonriendo con un chico de cabello negro, sus ojos verdes brillaban. Voldemort se tensó ante el parecido, así que por eso ... Voldemort pasó el brazo por los hombros de su esposo, que no se había movido de su lugar contra su pecho, y miró al Negro asintiendo con la cabeza. Los dos señores negros asintieron y Voldemort retiró su Evans.

"Yo ..." Evans comenzó a discutir y Voldemort podía escuchar el casi llanto en su voz.

"Me di cuenta de cómo se parecía a ti". Voldemort discutió solo para escuchar el hipo de Evans. De inmediato agarró la cara de su marido, lo levantó y lo besó. "Si realmente quieres un hijo podríamos adoptar y ..."

Evans sacudió la cabeza, como cada vez que lo había propuesto.

"Te conozco. No eres de tipo familiar ... Además de Lord Voldemort y la guerra y ..."

"Evans ..."

Evans sonrió.

"¿Te quedas? ¿Lo encontraste?"

Voldemort asintió, caminando hasta su casa.

"He venido para quedarme. Ya no me iré ... Sé que no apruebas lo que voy a hacer pero ... Realmente quiero hacerte feliz, si quieres".

Evans lo miró pero sacudió la cabeza. Voldemort suspiró, el hombre no había cambiado un poco. Entraron en el Callejón Diagon y Evans prácticamente lo empujó a su casa.

"¿Estamos ansiosos?" se burló de su amante.

"Han pasado meses desde la última vez que te vi". Evans discutió prácticamente corriendo hacia su puerta principal.

"¿Y?"

Evans resopló, mirándolo desde la puerta principal.

"Te extraño, pero si quieres dormir en el sofá, me dejarás cuidarme sola ..."

Los ojos de Voldemort crecieron ligeramente ante la implicación de lo que Evans quería. ¿Quién era él para rechazar tal propuesta?

Voldemort subió detrás de su esposo y subió las escaleras hacia el departamento. Era algo pequeño, lo único que había podido comprar con el dinero que ganaba en Borgin y Burkes. Seguramente la sola idea de tener a su esposo lo había hecho encenderse, pero sabía que no debía sujetarlo y simplemente llevarlo. Había pasado un tiempo desde que habían estado juntos. Voldemort sonrió mientras seguía a Evans a la habitación, alguien estaba bastante ansioso hoy.

¡Nunca más! (traducción) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora