Mi Novio Un Narcotraficante

Sorpresas

KATI

Todo fue tan rápido, por un momento llegué a pensar que esos tres cabezones se matarían. Pero aunque parezca raro tengo una capacidad de calmarlos y hacer que los 3 dejen a un lado su lado matón.

¿Quién diría? Yo, una chica que para todos era tan simple dominando a tres hombres que se creen muy valientes. Que están acostumbrados a matar y hacer daño.

Mi último recuerdo es cuando comencé a sentir humedad en mi vientre, y vaya impresión al ver que era sangre. Pero aún mas impresionante esos tres hombresotres pasmados sin moverme al verme sangrar sentía como iba cayendo al suelo y lo último que mis ojos vieron fue a Rafael apresurado a agarrarme.

Por unos momentos escuché las voces de Rafael y Osmar como siempre discutiendo, esos dos y sus locas peleas. Parecen dos niños peleando por un dulce, en este caso yooo soy el dulce.

Después de eso ya no supe nada más. Hasta ahorita alcanzo a escuchar la voz del hombre que me tiene tan enamorada no puedo abrir los ojos, los siento pesados pero aún así siento una alegría inmensa al escuchar su voz. Tal parece que amenaza a alguien... ¡Ay Osmar! ¿En serio?

Después de eso todo volvió a ser silencio, hasta que escuché un ruido, creo que es la puerta abriendose.

-Ni se te ocurra tocarla pendejo- Dijo Osmar amenazante.

-Calmate wey ni que fuera de tu propiedad- Contestó Rafael.

-Pero claro que es mía pendejo, qui-ta-te.- deletreó Osmar con voz fuerte.

-Fue mía primero, yo la conocí primero que tu idiota-Contestó Rafael con desición.

-Mira cabron en cuanto Kati esté bien y salga de esta tu y yo nos partiremos la madre ¿cómo ves?- Dijo Osmar parandose frente a Rafael.

-Pues de una ves pendejo, orale entrale a los putazos- Gritó Rafael.

-Ya callensé, ni estando en el hospital dejan de pelear. Parecen gallos de pelea- soltó Kati con su dulce y debil voz.

Ambos hombres voltearon a verla y sonrieron como tontitos al verla despierta.

-Mi amor- Dijo Osmar

-Mi reina- siguió Rafael tensando a Osmar al instante

-Hola a los dos, como va todo- Dijo Kati tranquila.

-Todo salió bien te hirieron, pero el doctor alcanzo a quitarte la bala sin dañarte ningún organo- Se aproximó Rafael tomando la pequeña mano de Kati.

-Te lo advierto wey, sueltala, no la toques- Dijo Osmar cerrando los puños.

-Sabes ya me tienes hasta la chingada, vamos acabar cin esto de una ves- Contestó Rafael soltando a Kati.

Al instante sacó su arma y la puso en la frente de Osmar.

-Jalale puto, ora como vas no que muy macho, jalale- Gritó Osmar con el enojo a flor de piel. Sacando el también su arma y poniendola de igual forma sobre la frente de Rafael.

Kati cubrió su cara con ambas manos, esos dos parecían niños pequeños.

Cuando todo parecía no poder empeorar entró una enfermera a la habitación y se quedó sin habla al ver trenenda escena.

-Vete, cierra la puerta, orale como vas bonita, sal de aqui- Dijo Osmar volteando a ver la pobre enfermera.

-Ya escuchaste guapa, salte o a ti también te toca plomo, no se si te das cuents pero si eres un poquitin de inteligente sabrás que la cosa esta calientita, salte- Dijo Rafael viendo fijamente a la mujer.