ℓο գυє нοѕєοκ գυιєяα { 𝓱𝓸𝓹𝓮𝓰𝓪 | 𝓼𝓸𝓹𝓮 | 𝔂𝓸𝓸𝓷𝓼𝓮𝓸𝓴 }

◇◇nueve◇◇

— Bien, me llamaste porque no entendías algo ¿verdad?— Hoseok asintió apenado haciendo reír a Yoongi.

— Eres muy bueno en música y bueno, eres la mejor persona que conozco para ayudarme— Yoongi asintió, él no estudiaba música como quisiera, él estudiaba medicina, no es que quisiera la misma carrera de Hoseok para pasar tiempo con él, sino que le apasionada todo lo que tuviera que ver con esa carrera, lastimosamente Yoongi no tenía la fuerza para decirle "no" a su madre, todo lo que ella dijera, él lo hacía, sin rechistar, su madre manipulaba su vida, así que por eso compartía clases con Namjoon y no con Hoseok.

— ¿Qué se supone que no entiendes ahora?.

— Antes de empezar ¿quieres café?.

— Esta bien, pero no le agregues un kilo de azúcar, sabes que no me gusta el café como a ti— hizo gesto de asco, no toleraba las cosas dulces, a no ser que fuera su dulce dongsaen.

— En eso diferimos, hyung, me gustan mucho las cosas dulces... como tu— Yoongi miró sonrojado a Hoseok pegándole al menor en su hombro, este solo rio mirando de forma cariñosa al mayor.

— ¡Deja de ser tan meloso!— a Yoongi le fascinaba que Hoseok le dijera cosas lindas, pero no podía ilusionarse por bromas que el menor hacía recientemente, cosas como decirle lindo, elogiarlo por todo, "coquetearle", cada cosa que hacía ponía el pobre corazón de Yoongi al borde de colapsar, pero eran solo eso, bromas... ¿verdad?.

— ¿Me acompañas a servir el café? Se que eres mi invitado, pero me da miedo ir solito— Hoseok hizo un puchero de miedo, Yoongi solo bufo y se levantó de la silla para ir a servir su propio café.

Llegaron a la cocina y, como era de esperarse, no había café hecho en la cafetera.

— No se porque algo dentro de mi me decía que no habría café hecho— Hoseok sonrió apenado, Yoongi se dirigió a la estantería del café, conocía el departamento de Hoseok como la palma de su mano, solo que está vez el café se encontraba más arriba de lo usual, demasiado alto para él que solo media 1.74, en cambio Hoseok medía siete centímetros más que él, se esforzó colocándose de puntitas para alcanzarlo, pero fue totalmente inútil. Hoseok se quedó callado mientras veía a su hyung con ternura y diversión, era tan adorable ver como se esforzaba por alcanzar aquel tarrito de café, la camisa que Yoongi llevaba puesta se levantó cuando este se estiró más, dejando ver sus blanquecinos muslos y su redondo trasero, los ojos de Hoseok se posaron en la zona por unos segundos, pero de inmediato retiró la mirada.

— ¿Y si me ayudas, Hoseok? En vez de quedarte ahí parado.

— C-claro, perdón— tímidamente se acercó detrás de Yoongi, poniendo su mano en aquella delgada cintura por casi inercia, alcanzando el tarro de café con facilidad— No era tan alto después de todo ¿verdad?— miro a su hyung por unos segundos, este tenía un sonrojo sobre sus adorables mejillas.

— P-para mi si era alto, ahora quítate— Yoongi lo quitó levemente con un puchero sobre sus labios, acercándose a la cafetera para preparar el café.

— El café estará listo dentro de poco, mientras explícame en que necesitas mi ayuda— Hoseok asintió rápidamente.

— Veras, es un musical, tengo mi parte de baile y así, junto con Jennie, pero no me sale esa parte porque por algún motivo no estoy sintiendo la música como debo, además que no me meto en mi papel como debería, eres muy bueno actuando hyung, te he visto hacerlo, así que en eso necesito tu ayuda.

— Hoseok, hay personas mejor que yo en esto, para tu baile esta Jimin-ah y para tu actuación esta Taehyung, serían de mejor ayuda que yo— el café ya estaba listo así que Yoongi empezó a servirlo en dos tazas.

— Pero me entiendo más contigo hyung, vamos... ¿Me ayudas? Por fis, por fis, por fis— Hoseok empezó a jalar su brazo delicadamente, como todo un niño pequeño, Yoongi solo pudo reír por como Hoseok actuaba.

— De acuerdo, de acuerdo, solo deja mi brazo en paz, vas a terminar arrancándolo— Hoseok abrazo a Yoongi apretándolo contra su pecho, este con un claro sonrojo lo aparato rápidamente volviendo a servir el café.

— Échale a tu café el azúcar que quieras, toma— le pasó la taza al menor quien se veía eufórico a más no dar.

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Ya llevaban al menos dos horas con lo mismo, y Hoseok aún no entendía como hacer que le saliera fluido.

— Hoseok-ssi, te están saliendo asombrosos los pasos de baile, pero no lo estas mezclando bien con la actuación, hasta ese perchero que tienes en tus brazos actúa mejor que tu— Hoseok suspiró frustrado.

— No se como mezclarlo y no sabes cuanto estoy considerando botarme por esa ventana— Yoongi volteó los ojos riendo.

— No seas dramático, solo es un perchero, y si no puedes hacerlo fluido con un perchero ¿Cómo vas a hacer el solo con Jennie?— el menor asintió cabizbajo— hey, estoy bromeando, claro que vas a lograrlo, eres Jung Hoseok, nada que sea de baile te quedará grande. Voy por un vaso de agua, ya vengo, sigue con el perchero— Hoseok se sentía un poco mejor, su hyung siempre lograba animarle. Yoongi se retiró hacía la cocina para luego volver rápidamente hacia la sala.

Escuchó la puerta sonar, le entregó a Hoseok su vaso con agua para luego verlo extrañado, Hoseok solo levantó los hombros dirigiéndose a abrir la puerta.

— O-oh... noona...— Yoongi escuchó la voz de Hoseok nerviosa ¿Quién era?. Se acercó a la puerta, conectando su mirada con la de aquella chica de pelo castaño y corto, busto bastante grande y un rostro hermoso.

— Hola, Hoseok ¿podemos hablar?.

De todas las personas posibles que vivían en Seúl, tenía que ser Jihyo quien estaba ahí.