The Rules |Jeon JungKook|

⚜️Capítulo 29⚜️

Soo rin se encontraba comiendo en el patio de la escuela junto a sus amigas, las 4 esperaban a que los muchachos volviesen de la cafetería a comer con ellas, por mientras, hablaban bastante tranquilas.

-¿Segura estás bien linda? Te noto decaída -Choa había hablando con Oh Mi hace un rato, y supo de el estado de su delegada al llegar a la escuela, estaba algo preocupada por su bienestar.

Aunque no eran la única así, Kyung soo estuvo toda la clase tratando de sacarle información a Rin del porqué el poco brillo en su rostro. Channyeol también hizo lo posible porque le contase, e incluso Hae la llevó a un lugar apartado en busca de explicaciones. Nunca, jamás en todo el tiempo que llevaban conociendo a Soo la habían visto en ese estado, con un lenguaje tan seco y cortantes para con ellos, y con esa mirada baja y lúgubre.
Pero no consiguieron nada, Soo se había negado a contar cualquier detalle de lo ocurrido con JungKook, no solo no le parecía correcto, sino que la llenaba de vergüenza pensar en ello.

-Ya les dije que no me pasa nada, no pude dormir y ya ¿Acaso nunca tuvieron una pesadilla? -la delegada empezaba a cansarse un poco, valoraba mucho la preocupación de sus amigos, pero tanta insistencia se estaba volviendo irritante.

-¿Acaso tú nunca la tuviste? Jamás te había visto así por un mal sueño- habló Hae Yeon, en un tono algo fuerte- ¿Sabes que pienso? Que esto es culpa de la rata de Bagtan.

-¿JungKook te hizo algo? ¿Trató de sobrepasarse contigo? -la voz de Choa se mostró aún más preocupada al recordar que la chica estuvo totalmente sola con él la noche anterior.

-¿Cuántas veces debo repetirlo? Estoy bien y JungKook no hizo nada, además de ser un impertinente -la vista de Soo permanecía en el pasto bajo sus piernas, su mirada la delataría y quedaría más que claro que estaba mintiendo.

-Bueno... ¡Si quieres podemos hacer una pijama! Dormiré contigo y así ya no tendrás miedo por ese sueño feo ¿Que dices Soo? - Oh Mi sabía perfectamente que su delegada ocultaba algo, pero no quiso atosigarle más, solo conseguiría que se enojase, tenía como prioridad que Soo volviese a estar tranquila.

-Me agrada la idea, ojalá mamá no tenga problema con ello- la pelinegra levantó su mirada ligeramente, y observó a su amiga ahora un poco más relajada.

No duraría mucho así.

Una sombra obstruyó el Sol para la delegada, y al levantar su cabeza buscando el porqué se encontró con Jeon, y no era precisamente la persona que tenía más ganas de ver en esos momentos.

-¿Que quieres? - al verlo Hae Yeon se puso inmediatamente a la defensiva.

Pero JungKook no tenía ni el genio ni las energías para lidiar con ella, así que simplemente le hizo la vista gorda y se enfocó en su objetivo.

-¿Podemos hablar? - la mirada del muchacho permanecía fija en Soo.

-¿Hablar sobre que? Déjala tranquila y vete a molestar a Ji eun, lleva todo el día jodiendo -Hae seguía interviniendo, impidiendo que la menor respondiese la pregunta.

-A solas... -JungKook agregó esa condición mientras hablaba entre dientes, su paciencia estaba en menos veinte, y gracias a Hae cada vez bajaba más.

-¿A solas? Es que ahora sí que perdiste la cabeza, por supuesto que no va a... -Hae estaba por ponerse de pie y encarar a Jeon de manera furtiva, pero Soo fue más rápida y colocó su mano frente a ella, para posteriormente pararse frente al miembro de Bagtan.

-Mas vale que sea rápido, estoy ocupada- Soo intentó mantener su tono habitual, monótono y serio, quería portarse lo más natural posible. Dirigió su mirada por un segundo a sus amigas, tratando de tranquilizar a Hae principalmente- no tardaré mucho, si los chicos vuelven solo espérenme aquí.

Las tres chicas asintieron, aún algo desconfiadas de JungKook, pero optaron por seguir el juicio de su amiga y no insistir en que se quedase.

JungKook no le dió tiempo de arrepentirse ni a las chicas de intervenir, y tomó con cuidado la muñeca de Soo, para así guiarla hasta un lugar más apartado.

....

Ninguno de los adolescentes contaba con que Jennie llevaba rato siguiendo a JungKook, y al verlo alejarse de todos junto a Soo rin algo dentro de ella le dijo que sería un chisme increíble, no solo para Ji eun, sino para toda la escuela. Les siguió sigilosamente, con su teléfono nuevo en mano y lista para grabar o tomar las fotos que fuesen necesarias.

~⚜️~

Tras unos minutos de ser guiada por Jeon, Soo empezó a impacientarse, y al llegar a uno de los pasillos del segundo piso, que se encontraba totalmente vacío, se soltó del agarre del mayor y habló con firmeza.

-Di lo que tengas que decir de una vez, no me vas a tener dando vueltas todo el día- sonaba más fría y tajante de lo habitual, y Jeon lo sintió justo en su pecho.

La verdad es que JungKook solo estaba dando vueltas mientras buscaba las palabras correctas, no sabía por donde empezar, ni como convencerla de que realmente estaba arrepentido.

-Perdóname -soltó repentinamente, acompañado por una reverencia, permaneciendo así durante algunos segundos- sé que lo que dije estuvo mal, no debí decirlo... fuí un idiota, y realmente estoy arrepentido.

Pero Soo Rin seguía muy enojada, y vamos, estamos hablando de Jeon JungKook, era difícil dicernir si estaba siendo honesto o solo trataba de librarse de un regaño.

-No pienso golpearte con el palo solo por lo que dijiste, no soy tan infantil- respondió la delegada en un tono seco y cortante- tampoco estás castigado, de todas formas, no puedes meterte en un problema peor, y no le diré a nadie lo que dijiste -se tomó un momento antes de seguir- si eso es lo que te preocupa, me voy, es increíble que me hagas perder mi tiempo de esta forma.

Al ver que la menor se daba media vuelta, JungKook fue rápido, y la tomó de la muñeca, para así atraerla hacia él, una vez la tuvo a pocos centímetros, la tomó de ambas manos, aún con su mirada fija en el suelo.

-No lo digo por los problemas que pueda tener, tu lo dijiste, no puedo estar más jodido -negó ligeramente con su cabeza- yo solo... no quiero que todo se vuelva raro entre nosotros, realmente no debí portarme así contigo, me pasé de la raya, y lo comprendo. Tú no lo mereces, y por eso quiero disculparme, y pedirte que ambos olvidemos lo que pasó anoche... ¿Si?

-¿Crees que eso hará que esté bien contigo? Si que tienes agallas - chistó la pelinegra, aún dudando de la veracidad de las palabras de Jeon.

Pónganse en su lugar, la pobre no durmió en toda la noche y le habló sobre temas delicados, es entendible.