The Rules |Jeon JungKook|

⚜️Capitulo 24⚜️

Soo Rin entró al aula, justo a tiempo para salvar a JungKook de una pregunta de la cual no estaba muy seguro de la respuesta, este se lo agradeció internamente.

Pese a que aún se sentía avergonzada por lo ocurrido en la mañana con respecto a los bombones, decidió hacer borrón y cuenta nueva para dar la clase como si nada, hoy los chicos repasarían geometría.

Mientras Soo anotaba los ejercicios en el pizarrón, Hoseok, que estaba a punto de quedarse dormido, pensó que podría divertirse un poco.

-Señorita delegada, tengo una pregunta- levantó su mano y habló en un tono infantil, simulado ser un niño de primaria.

-¿Que quieres ahora Jung?- respondió Soo Rin sin dejar de escribir, con la vista fija en la pizarra.

-¿Es cierto que usted y un estudiante se dan regalitos de amor?- preguntó aún con su tono de niño pequeño.

JungKook giró su cabeza de forma violeta hacia Hoseok y lo observó fijamente con una mirada asesina, el plan del pelirrojo iba a la perfección.

-¿Disculpe?- Soo Rin se dió media vuelta, fingió no entender de lo que hablaba, simplemente para darle tiempo de arrepentirse.

-Oí que un niño le dió chocolates ¿Es su novio?- Jimin se unió al juego, también se estaba aburriendo mucho.

Soo Rin mantuvo la compostura, claramente era mucho más madura que eso.

-Las preguntas se hacen solo si tienen relación con la clase, si no, pueden abstenerse de emitir algún sonido que entorpezca el ambiente de trabajo- dicho eso volvió su atención a los ejercicios.

-¿Estaban ricos? ¿O no los comió?-Hoseok seguía con las preguntas imprudentes, mientras Seok Jin intentaba callarlo haciéndole señas desde su pupitre.

-¿No prefiere comerlos con su perrito a solas?- Jimin soltó una risotada ante su comentario, por otra parte, la sangre de Soo estaba echando humo.

-¿Ustedes no aprenden verdad?- caminó hacia el escritorio y de este sacó la vara de madera de su maestro, pero cuando se acercó hacia Jimin un brazo la tomó de la cintura y la detuvo.

-Por favor no se rebaje a un punto tan ridículo, lo único que quieren es hacerla enojar y perder tiempo de clase en lo que los reprende, solo ignorelos y siga- era Yoongi, el cual se había parado de su asiento y se encontraba abrazando a la delegada por la cintura, visto desde fuera parecía la escena de un drama.

La menor no dijo nada, solo hizo la vara a un lado y siguió con la clase, ignorando cualquier otro comentario que llegase a escuchar.

-Cuando salgamos arregla las cosas con ella, sino van a molestarlos hasta el año que viene- soltó Yoongi para JungKook una vez volvió a su asiento.

-No me digas que hacer- respondió el Maknae, solo para recibir como respuesta la mirada penetrante del mayor-... bien... hablaré con ella, pero solo porque yo quiero, no porque me lo hayas pedido.

-La aclaración está de más- dicho eso ambos volvieron a fingir que le prestaban a tención a Soo Rin, Yoongi simplemente la observaba a la espera de que se callase y JungKook navegaba por su cabeza pensando en que podría decirle para iniciar una conversación.

~⚜️~

La clase acabó, los chicos se encontraban recogiendo sus cosas, hasta que una mano delgada detuvo a JungKook.

-Recuerda que no puedes irte aún Jeon- tomó con cuidado la muñeca del mayor, quería comportarse como siempre y hablarle con firmeza, pero la discusión de hace un rato, aunque fuese por una tontería, la seguía molestando, la obligaba a tratarlo con algo de calma.

El castaño bufó, lo había olvidado, incluso había hecho planes para cuando al fin fuese libre de las garras de Soo Rin, pero parece que estos tendrían que posponerse.

Solo soltó un "ajá" lleno de fastidio justo antes de tirar su mochila contra el suelo, su semblante había cambiado, se veía totalmente serio.

-Suerte pequeño- Nam Joon despeinó ligeramente el cabello de Jeon mientras caminaba rumbo a abandonar el salón.

-Ojalá pasen una noche entretenida- bromeó Hoseok siguiéndole el paso al líder.

-¡Haz que valga la pena!- y con ese grito emitido por Jimin todos los miembros de Bagtan desalojaron el salón, dejando sola a la delegada con JungKook.

Ambos quedaron en silencio durante unos segundos, Jeon la miraba fijamente con ambas manos en los bolsillos de su chaqueta, los dos estaban incómodos, y JungKook odiaba sentirse así frente a alguien, en especial siendo Soo, así que decidió romper el hielo de una vez por todas.

-¿Y bien? ¿Qué haré estas dos horas extra? -preguntó sin darle mucha importancia a el asunto.

De pronto el ambiente ya no estaba tan cargado.

-¿Dos? Ya veo el porqué de tus notas, para ti son tres Jeon- corrigió Soo cruzándose de brazos.

-¿Tres? -gritó algo desorientado, estaba seguro de que eran dos- con el viejo acordaste que serían dos -se escuchaba molesto.

-Con el directo hablamos de quedarnos hasta las 9:00pm ¿O es que ya no lo recuerda? -habló con indiferencia- para haberse librado de una expulsión,tres horas extra por unos días no deben ser nada.

-Usted ha de amar ver mi rostro- bufó enojado y se acercó más a su delegada- ¿que haré entonces?

Y con esa pregunta la delegada olvido toda vergüenza o lástima que hubiese sentido por Jeon momentos atrás.

Soo formó una sonrisa cínica, era la primera vez que estaba feliz de tener la oportunidad de estar a solas con JungKook.

~⚜️~

TaeHyung salió de la escuela y se encontró con la camioneta de su padrastro en la entrada, corrió hacia ella y subió al asiento del copiloto, el hombre lo observaba desde el asiento del conductor con una sonrisa.

Tenía un brillante cabello oscuro totalmente liso, lentes pequeños y negros que hacían aún más intensa su oscura mirada, su piel era pálida y sus mejillas rosadas, y aún conservaba su bata de doctor, parecía un actor de algún drama hospitalario.

-¿Que tal tu día TaeTae?- preguntó el hombre con una sonrisa antes de volver a poner en marcha la camioneta.

Pero el castaño no respondió, se quedó en silencio observando cada una de las facciones y detalles del rostro de su padrastro.

-¿Pasa algo?- el hombre lo observó algo confundido y angustiado, pensó que el joven no se sentía bien y tendría que volver a la clínica con él- ¿Te sientes bien hijo?- tocó la mejilla del menor asegurándose de si tenía o no fiebre.

Tae habló sin hacer pausas y observando a si padrastro directamente a los ojos.

-Cada vez que veo tu rostro me convenzo más...- TaeHyung hizo una pequeña pausa para echarle un último vistazo- eres exactamente igual a tu hija.