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Jaemin llegó a su casa para quitarse el uniforme y ponerse ropa más cómoda. Suspiró mirándose por el espejo.

Jeno va a venir a mi casa.

Sonrió y se sonrojó notablemente. Negó con la cabeza llevando sus manos a sus mejillas y justo en ese momento llamaron a la puerta. Se asustó y se miró una ultima vez en el espejo arreglando su cabello. Salió de su habitación y bajo por las escaleras hasta llegar a la puerta, abrió con el corazón golpeando fuertemente en su pecho.

- Hola - le sonrió amablemente Jeno al menor y este sintió su corazón acelerarse ante su sonrisa.

- Hola, pasa - le sonrió de vuelta haciéndose a un lado para dejar pasar al mayor, relamió sus labios nervioso y cerró la puerta detrás de si mismo.

- Pues, manos a la obra - Murmuró Jaemin después de que se acomodaran en el escritorio dentro de su habitación. Jeno asintió emocionado por trabajar con el menor y ambos comenzaron a trabajar en su proyecto que consistía de una presentación sobre un momento histórico de la historia de Corea. Después de unas cuantas horas estaban a nada de terminar y el menor se estiró mientras bostezaba.

- Deberíamos tomar un descanso - murmuró Jeno moviendo su cabeza de un lado a otro destensando su cuello. El menor asintió de acuerdo y se puso de pie acercándose a su mesita de noche donde tenía su celular.

- Pon algo de música mientras voy por algo para tomar y unas botanas - Jaemin le sonrió y el pelinegro solo pudo observarlo totalmente perdido por su sonrisa y asintió a penas con la cabeza. El castaño asintió también saliendo de la habitación con camino a la cocina para buscar algo.

Jeno si estaba buscando música, pero un mensaje le llego al dueño del celular y la ventana que mostraba el mismo ocupo toda la pantalla y al pelinegro le resultó difícil ignorarlo al leer su propio nombre.

- Mark tonto hyung.
"Más vale que mañana me busques y me digas que besaste a tu crush. O la historia de que hicieron algo interesante y no solo tarea, no seas aburrido y haz algo con lo que sientes por Jeno."

Y Jeno se quedó sin palabras, cerró la ventanilla procesando lo que acababa de leer y un sonriente Jaemin entró por la puerta con dos vasos, uno en cada mano, y una bolsa de papas fritas en su boca. Jaemin rió por la penosa situación y le extendió un vaso con soda al mayor quien lo tomo después de un rato.

- ¿Aún no te decides por algo? - preguntó el recién llegado al darse cuenta de que Jeno no había puesto nada e hizo un pequeño mohín mirando su celular.

- Ah, n-no se me ocurrió nada, lo siento - este le extendió el celular a su dueño y Jaemin se limitó a poner sus canciones en aleatorio dejando su celular en el escritorio después. Le extendió las frituras al mayor y espero a que las tomara para beber de su refresco. 

Jeno dejó pasar el mensaje, ya pensaría que hacer con el hecho de que sus sentimientos hacia el castaño frente a él sean correspondidos.

El resto de la tarde la pasaron contando historias sin mucho sentido mientras comían de aquellas frituras y bebían sus refrescos. Y en cuanto el sol desapareció, Jeno se despidió caminando hacia su casa con la cabeza echa un lío.



Notes - L.J.N&N.J.MDonde viven las historias. Descúbrelo ahora