juzgame tú [Terminado]

capitulo 22✔️

Las cosas se han tornado difícil, me duele ver a Kevin en esta situación, y esta situación me recuerda tanto a los momentos que pase con David, trato de ser fuerte y darle fuerzas a Kevin, es algo difícil, pero él es un chico comprensivo y que a pesar de todo se ha mantenido bajo perfil.

—Si quieres puedes quedarte conmigo esta noche –intento de que mi voz no se corte y parecer fuerte, pero es imposible –no quiero dejarte solo, mamá está allá con Claudia, nos están esperando.

—Está bien –su mirada se dirige hacia Mike y sé que busca alguna respuesta en el –algo me dice que tu hermano tiene que ver con estas decisiones de Katherine, pero no lo culpo, son solo adolecentes.

—Hablaré con él en casa, tu solo relájate, mañana vendremos a primera hora y Katherine necesita verte fuerte ante la situación.

Kevin no dijo nada solo se puso sobre sus pies, le haga seña a Mike de que nos siga y así poder llegar a casa. Todo el camino fue en un rotundo silencio, Katherine estaba viva y fuera de peligro, pero eso no quiere decir que la preocupación no esté a flor de piel, algo le preocupaba y no podemos ayudarla sin conocer que es.

Al llegar a casa mamá y Claudia están súper preocupadas, mamá abraza a Kevin como si fuera un hijo más, supongo que eso es lo que el necesita justo ahora una familia, y mi familia le ha recibido con los brazos abiertos.

—Les prepare un té, no quero un no por respuesta –dice mirando a Kevin.

Todos miramos a Mike quien no ha dicho una sola palabra y se dirige a su habitación cabizbajo.

—¡Mike! –Claudia lo llama, pero él no responde, supongamos que el siente algo de culpa después de todo él estaba ahí con ella.

—Déjalo, hablare con el luego –digo agarrando a Claudia de la mano, y ella asiente.

—¿Cómo está? –mamá pregunta y todos sabes que se refiera a Katherine.

—Está fuera de peligro, mañana podremos ir a verla —la voz de Kevin es débil y con destello de tristeza.

—Vuelvo en unos minutos –le susurro a Kevin a los oídos –te dejo en buenas manos, te amo.

Necesitaba hablar con Mike, él ha estado mal desde entonces y no ha recibido una palabra de consuelo, es mi hermano y es un adolecente, no quiero que nada de esto le perjudique.

Al llegar a su habitación Adán esta con el abrazándolo, ambos están llorando y es obvio, son gemelos, y no es la primera vez que lo veo llorar uno por el dolor del otro. Cuando niños uno se cortaba un dedo y lloraban los dos, siempre están juntos a pesar de las diferencias de las personalidades, ellos sienten el dolor uno del otro.

—Adán, ¿puedes dejarme un momento con Mike? –él no dice nada, solo se pone de pie y sale de la habitación cerrando la puerta detrás de el— ¡Mike!

—Fue mi culpa –dice, pero no me sorprende –desde el día de la fiesta Katherine ha estado distante conmigo, no he sido el mejor novio, pero juro que lo he intentado, esa noche no hice más que pasarme de copas y divertirme, pero nunca la engañaría, termino conmigo porque pensó que era un inmaduro y discutimos grandemente, porque por una acción tan simple no puede haber una reacción tan drástica –su voz se corta y lágrimas caen por su rostro.

—Mike ...

—No luche por ella, lo acepte, soy un maldito orgulloso que no luche por ella, no sabía que estaba teniendo problemas en la escuela con sus calificaciones y sus maestros, extraña a su madre y yo como tengo la mía no pude entenderla, fui egoísta, cuando me llamo que necesitaba hablar fui, pero terminamos discutiendo porque yo necesitaba una razón justificable por la cual ella terminara conmigo, fue mi culpa y merezco que Kevin haga conmigo lo que quiera, ¡soy un idiota!