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Diamante

Lo primero que se me pasó por la cabeza que era una trampa quien llamada tan tarde y encima citara a un departamento , era todo raro.

Pero la curiosidad pudo más conmigo y vine solo ,como específico.

Llegando al pasillo del edificio se escuchaban risas y gemidos , solo debía empujar la puerta para sacarme las dudas.

Así fue que me lleve la mayor sorpresa de mi larga vida.

Eran ellas enredada en la cama.


Sin basilar tome asiento en el sillón donde tengo una vista privilegiada de la escena.

Serena- ¡Diamante!!

Reacciona espantada a mi presencia tratándose de tapar al verme sentado mirando semejante situación.

Haruka- ¡Sorpresa!!!

Le grita la sinvergüenza levantando los brazos.

Serena- ¡¿QUE ...estas loca?!

Intenta razonar con ella
pero la descarada de su "amiga" está concentrada en tocárla y quererle quitar la sábana.

Haruka- Creí que te gustaría la idea... de que compartamos un hombre..

Me limito a observar, no he emitido palabra alguna.

Serena- ¡Dios Haru! No tienes idea... ¡Déjame ir..!!

Serena se levanta recogiendo sus cosas y se dirige a la puerta.

Haruka- ¡No , no me dejes, pensé que sería ecxitante!!

Se le adelanta y ruega de rodillas.

Haruka- El no tiene que hacernos nada...

Cautelosa comienza acariciar sus piernas y a besa su piel mientras sube ,es como si la tuviera hipnotizando.

De poco le saca lo que le cubre su bello cuerpo.

Serena- Haru .. no... Ahh...

La besa descaradamente derribando sus barreras.

Haruka- Ven...

La guía a la cama.
Se le sube y la recorre con su boca quedándose entre sus pierna Serena se tapa su cara entre jadeos.

Haruka- ¿Quieres que venga aquí con nosotras??

Para y le pregunta provocándole un gemido fuerte.
Sigo mirándolas atónito, procesando todavía si es verdad lo que veo.

Se levanta y le besa su boca apasionadamente.

Haruka- La decisión en tuya amor ...

Le susurra jadeante ,se miran cómplices entre ellas.

En cámara lenta veo extenderse la gloriosa mano de mi dorada en mi dirección.

Mi cuerpo se encamina inconsciente a la ellas.

Ambas como Eva en el paraíso se levantan a recibirme.

Serena se adelanta y trata de besarme pero la tomo por las muñecas.

Diamante- ¿Esto es lo que tú quieres?

Necesito que lo diga ella y no que la obligue la cobra venenosa a su lado.

Serena- ¡Si...!! Te deseo...

Fue todo lo que necesite para mandar al carajo 90 años de celibato.

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