Capitulo 29

0 0 0
                                    

- No puedes estar hablando enserio- dije Cristina mientras gritaba.

Le había contado lo sucedido y ella no lo podía creer.

Al llegar al centro comercial comenzamos a explorar por todas las tiendas.

Siempre terminamos en la misma tienda "Victorias Secret" pero no me molestaba por que amaba esa tienda. Cada vez que entro parezco a pequeña en Disney World.

- Mira esté- dijo Cristina con un juego de lencería en mano

- Para que quiero eso?- dije riendo

- Para sorprender a tu enamorado- dijo pícara

- Cómpralo tú y sorprende a mi hermano- digo caminando

-ok, lo compraré-

-uhg, no me interesa saber las intimidades de ustedes- dije

- Oh, por Dios...no has tenido sexo con Liam?- dijo

- Este...tal vez..-

- QUEEEE!-gritó-nunca me dijiste..cómo fue-pregunto

- Es que... no éramos novios cuando pasó- dije nerviosa

- Pensaba que yo era la atrevida pero sabes? Tienes algo pícaro en tu interior- dijo

-JAJA, oye.. no se , eso pasó- dije sonrojándome

Luego de minutos dialogando como había ocurrido todo Cristina tomó un juego de ropa interior que siendo realista está bello.

- Qué tal?, para Liam hoy?, le podrás dar un postre antes de la noticia de que te vas a Europa- dijo Cristina

- No creo q sea buena idea-

- Por que no?... vamos... -

Después de ruegos de Cristina decidí comprarlo.

Estuvimos horas en las tiendas. Cuando anocheció fuimos a visitar a Siramyl.

-Hola!- dijo Siramyl abriéndonos la puerta

- Hola perra- dijo Cristina

- Hola belleza- contesto

- Vamos a mi habitación que tengo nuevas noticias- dijo agarrando la mano de Cristina la cual me la agarró a mi y seguimos en cadena para el cuarto.

- Tengo novio!- dijo Siramyl

QUEEEEEEEEEEEEE!!!!!!!- gritamos Cristina y yo

- Si, es Aarón- dijo

No podíamos creerlo, era algo raro que Siramyl tuviera novio. Ella nunca le gustó las relaciones. Nunca quizo nada serio con nadie, mucho menos quizo amarrarse a una relación.

Estuvimos horas poniéndonos al día hasta que una llamada interrumpió la conversación.

Una lágrima más, no hace daño...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora