RECUERDOS

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⟨⟨Capítulo IV⟩⟩

El sonido de la alarma lo despertó. No recordaba cómo fue que llegó ahí. Lo último que lograba recordar era que estaba con Mihawk en el bar.

Tomo su celular vio la hora y fecha, eran las malditas cinco de la mañana y era el día de la presentación, el nunca se despertaba a esa hora el día de una presentación, le gustaba descansar lo más posible para así obtener energía.

Toc... Toc... Toc

Se escuchó tocar la puerta, se levantó y abrió.

-¡¿Mihawk?!-

-Así es, ¿como te sientes?-

-No recuerdo nada de lo que pasó-

Los ojos de Mihawk brillaron y se lamió los labios.

-No se preocupe, tomo unos tragos de más y yo personalmente lo traje hasta su habitación... No le tomé mayor importancia, debe de estar listo para la gran pelea-

-Si... Solo necesito dormir más-

-¿Dormir?-

-Si, entre mayor energía conserve tengo más posibilidades de ganar, yo siempre me despierto una hora antes de la pelea -

-Entiendo, lo dejaré dormir, nos vemos en la arena-

-Antes de irse, puede decirme a ¿Qué hora será la pelea?-

-No se la han dicho?-

-La verdad no lo recuerdo, creo que de no haber sido por mi celular ni siquiera sabría qué día es-

Mihawk sonrió

-Será a las doce del día- salió de la habitación.

Zoro no tomó mayor importancia y se dispuso a dormir, no sin antes poner su alarma.

"-Vaya hasta que llegas marimo, creí que me dejarías plantado en la primera cita-

-Fue culpa de las calles, se mueven-

-¿Las... Calles se... Mueven?-

No lo resistió, comenzó a reír a carcajadas.

-¡Ey! No te rías es enserio-

-JAJAJA no lo puedo creer, está bien entremos al restaurant Jajaja-

-Ya no te rías-

Ambos entraron. El restaurant era muy elegante, el recibidor era una sala muy amplia de paredes blancas, justo en medio una torre alta de mármol rodeado por enredaderas con flores, de la parte más alta brotaba agua muy ligeramente, lo cual lo volvía más excéntrico.

Justo antes de pasar a las mesas se encontraba una señorita la cual llevaba el orden de las reservaciones.

-Buenas tardes, a ¿Qué nombre está su reservación?- preguntó la señorita al verlos acercarse a ella.

-Nombre de Roronoa Zoro-

-Roronoa Zoro... Lo siento mucho, pero su reservación estaba a las 8 PM y ya son las 9:30 PM le dimos su mesa a otra pareja-

-¿Qué? no puede ser posible-

-Lo siento, pero el tiempo de tolerancia es de 30 minutos, no de hora y media-

-Eso me parece muy injusto, espere tres malditos meses para poder reservar, ¡Exijo! Hablar con su supervisor-

Sintió como le daban pequeñas palmadas en el hombro, volteo y se encontró con la mirada de Sanji.

Una vez másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora