Naruto: el último Jinchūriki

SOLSTICIO DE INVIERNO, PT. 2 "El JINCHŪRIKI ASURA ".

DISCLAIMER:

Naruto pertenece a Kishimoto y Avatar, la leyenda de Aang, pertenece a Konietzko y DiMartino.

ACLARACIONES:

(bla) *bla= notas de autora

bla, bla = flashback u onomatopeyas.

❀❀❀❀❀❀❀= cambios de escenario

Después de todo lo acontecido en el Monte Myoboku, como agradecimiento los pueblerinos le dieron a Naruto y sus amigos comida suficiente para un largo viaje, e incluso algunos recuerdos. Todos se encontraban durmiendo a excepción del rubio quien se encontraba hablando con Kurama.

—¿Entonces dices que en todo este tiempo estuviste dentro de mi alma o algo así?

—*Sí.

—¿Pero cómo pasó eso?

—Al parecer en el momento que el rayo te tocó, sentí cómo mi espíritu se conectó al tuyo y me encontré dentro de tu misma esencia. Como si fuéramos uno solo.

—Qué profundo. No sabía que podías hacer eso.

—Ni yo.

—Bueno, lo de hablar tengo que entendido que solo puedes hacerlo conmigo, pero ahora esto... ciertamente es como si fuera una especie de superhéroe. 

—Ja, no te creas tan importante mocoso.

—Oye, desde cuándo eres tan arrogante, zorro.

—Y desde cuándo hablas con los animales —dijo Sai quien se acercaba a Naruto.

—Ah, bueno... Kurama y yo...

—No te molestes, de seguro son cosas que los Jinchūriki que hacen y bla, bla, bla.

 —Eh... sí, je.

—Y a dónde piensas ir, porque dudo que hayas desatado a tu zorro solo para sacarlo a hacer del baño.

—No, yo... bueno... yo...

—¿Nos pensabas abandonar? —preguntó temerosa Sakura.

—¡No! Claro que no, Sakura-chan. Lo que pasa es que necesito hablar con Asura, pero no quiero arriesgarlos. Debo llegar al templo antes de que se ponga el sol —decía el rubio al momento de treparse a Kurama.

—No te dejaremos ir al País del Fuego, Naruto —decía Sakura.

—Al menos no sin nosotros, cosita.

—Espero que tengan un buen viaje, gracias por todo —decía Homura haciendo reverencia y despidiéndose de los jóvenes.

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Unos minutos después, Homura se disponía a ir a dormir, pero cuando abrió la puerta principal de la casa mayor, vio que había alguien ahí.

—¿Pero qué?

—¿No puede dormir? —dijo Sasuke al momento de aventar al anciano —. ¿Has visto de casualidad al Jinchūriki por aquí?

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Ya retirados de ahí, Naruto y los demás estaban en camino volando por los aires... sí, literal estaban volando.

—¿Desde cuándo tu zorro de nueve colas vuela? —seguía asombrado Sai.

—Desde ayer que nos conectamos de manera espiritual. Pienso que hay habilidades que no sabíamos y ayer empezamos a descubrirlas, dattebayo.

—Sí, ya vi, son muy espirituales.