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MATT

Mi día comenzó muy bien, tenia a una chica con un tirante que se había  caido sobre el hombro, todavía faltaban algunos minutos antes de que se despertara y mientras la veía dormía con una camisa ajustada, justo ahora se le marcaba justo en los lugares correctos, ella se estremeció por alguna razón y su tirante cayo del todo, ahí estaba esa conexion de su cuello a su brazo totalmente expuesta, sentí el impulso de besarla justo en el cuello en su pulso, me acerque un poco y pasó:

¡Ella se despertó! antes ronroneó no se que cosa y después se estiró para despertarse por completo.

Aproveché y me pare a toda prisa, mi momento se acabó, pensaría que era un acosador, si supiera que la estaba viendo, durante no se cuanto rato, mientras dormía.

Era hermosa.

Diablos

¡Si que era un acosador!

Entre a la ducha y me concentre en la erección matutina que mate con una ducha semí fría.

Puse ambas manos sobre los azulejos y me dije es solo que si, hace ya demasiado que no salgo con nadie, es solo que esta ahí casi sin ropa, junto a mi, salí de la ducha pero mi mente no paraba así que si rememore lo del baño y si, estaba para follarsela su sonrisa era, y bueno baje la vista, ¿adivinen quien decidió regresar?.

Desayunamos y salí casi corriendo rumbo a al teatro, ahora que había dominado los diálogos y los tiempos, los gestos y las marcas, bueno era pan comido pero aun así me gustaba, se podría decir que moría en la escena 6 pero aquello me daba tiempo para castings y para pasear por un rato con Corbin.

Pero hacia mucho que mi agente no me llamaba.

Ya había pedido el tiempo para faltar la semana en el teatro y me prometieron esperar a por mí, pero la verdad si no estás, estas fuera.

Literalmente.

Saliendo del teatro tome un atajo, tal vez fue mi imaginación pero aquella chica se parecía a la asistente de Anne, pero no, no es posible.

Seguí mi camino y llegue a lo de Corbin.

—Hey idiota.—saludé.

—Hey princesa—respondió.

Le di el puño, el lo impactó.

—El próximo sábado pásate por la casa.

—¿Para que?

—Le voy a pedir a Estela que se case, conmigo.

—Vaya si que vas enserio.

—Es lo correcto no, vamos a tener un hijo juntos.

—Amigo no me digas que es solo por el bebé.

—No, no yo la amo ya no nada es igual sin ella—dijo muy serio—¿Tu como estas?—me preguntó.

—Aah igual—respondí.

—Así que con tu abstinencia.

—¿Como?—pregunté con curiosidad.

—Mas bien con tu... Anne.

—Recuerdas cuando me prohibiste hablar de Calabaza porque según tu estaba diciendo puras estupideces...

—Si—dijo acordandose.

—Pues te digo lo mismo de Anne, no digas nada nunca.

—Vaya sigues siendo una princesa, ven hay un pato que quiero que pruebes. Sabes que te daré un poco para que los dos lo prueben.

SE RENTA NOVIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora