Konosuba: No nos quedemos callados ante estos sentimientos.

Cita, aquella locura que jamás cruzo mi mente.

Si, había invitado a Darkness a una cita, hay muchas complicaciones con respecto a esto ya que Darkness podría malinterpretar el motivo del porque la invite. En parte fue para hacerla sentir mejor y quitarme esas miradas acusatorias de mi, pero también quería saber que había sucedido aquella noche.

Estoy seguro de que fue algo en verdad importante si Darkness terminó llorando por eso, solo espero no haberle propuesto matrimonio.

La cita que tenía en mente no era algo tan extravagante. Había escuchado que algo muy parecido al circo había llegado a Axel hace un par de días, pero jamás tuve interés en algo como eso por lo que no pensé en si quiera ir al lugar.

Conozco a Darkness, ella es como una niña que se impresiona con cualquier cosa, y lo que realmente quiero en estos momentos es hacerla sonreír después de tanto tiempo.

Estos últimos días han sido más complicados para mí de lo que parecen, he estado intentado relajarme sin suerte en lo absoluto, todo por los problemas que Darkness me ha provocado.

Aunque, ahora que lo pienso, tendría una cita con Darkness y estaría completamente a solas con ella, quiere decir que ella podría hacerme cualquier cosa sin que nadie venga a salvarme está vez… ¡¿En qué carajos estaba pensando?! ¡¿Por qué la invite a una cita?! ¡Pude haber hecho un viaje con todos y no tener que involucrarme en un problema como este! ¡¿Por qué nunca pienso las cosas bien?!

Haa~, bien, ya saque todo lo que me molestaba. Estaba claro que no podía cancelar la cita de repente, si lo hacía estaba seguro de que mi vida social, por poca que sea, moriría para siempre.

–Espero que no suceda nada raro.

Dije mientras buscaba la posición más cómoda para dormir, por pensar en todas esas cosas no podía conciliar el sueño en lo absoluto, estaba un poco preocupado de que todo se saliera de control, digo, no es que no me guste Darkness, es atractiva, atenta y tiene una figura fuera de… de mi mundo, pero que sea masoquista es algo que no puedo soportar por completó.

Mientras me encontraba hundido en mis pensamientos escuché a alguien golpear mi puerta, era un golpeteo suave a diferencia de lo que usualmente suelo escuchar.

–Ka-Kazuma, ¿estás despierto?

La voz, pertenecía a Darkness, digo, ¿quien más vendría a mi cuarto a mitad de la noche? Pero aún así me sorprendió, pensé que Darkness sería más pasiva estos días por miedo a que cancele la cita, pero parece que me equivoque.

–¿Qué sucede? ¿Acaso quieres intentar hacer otra locura?

Lo último lo dije de broma, solo espero que ella lo noté y no se lo tome en serio.

–N-no, no es eso… quería ver si podíamos hablar.

Me levanté de mi cama, confiando con que lo que decía Darkness era cierto, por esa misma razón tome la cuerda de mi mochila por si algo inesperado sucedía, una vez con mi protección lista abrí la puerta.

En el pasillo se encontraba Darkness usando solamente su camisón para dormir, en ese momento no sé a dónde debía ver para no ser considerado un depravado… o cierto, el rostro… ¡No me mires con esa mirada tan tierna y llena de culpa, es difícil verte de esta forma!

–¿Qu-qué sucede?

–Bu-bueno, es acerca de nuestra cita…

–¿Qué hay con eso?

–Veras… ¿Re-realmente quieres salir conmigo? ¡N-no me malinterpretes, se que tú fuiste el que me pidió la cita! E-es solo, no quiero que tengas que salir conmigo solo por compadecerme.