[[ How is mama? ]]

Diez

Dos años después.

Los nervios la estaban consumiendo. Sentía que se iba a desmayar, nunca antes estuvo en una situación similar.

La canción empezó a sonar y eso significaba una sola cosa, era la entrada de la novia.

La felicidad que sentía era inmensa, las lágrimas querían salir.

-¿Lauren Jauregui quiere llorar?- escuchó a sus espalda.

-No- dijo secándose la pequeña lágrima que se escapó de su ojo -claro que no, solamente me entró algo- habló aún con la vista en la novia.

Camila se río a lo bajo -Como digas macho- murmuró entre dientes.

La verdad que lauren no podía soportar las lágrimas que luchaban por salir. ¡Maldita sea su mejor amiga se iba a casar!

No podía creer que su pequeña, no tan pequeña, se iba a casar.

¡Su chocolatito se iba a casar!

Lo quería gritar, quería que todo el mundo sepa la felicidad que sentía por su amiga.

Verla en aquel vestido blanco, caminar hacia aquella persona que se conocen de toda la vida.

No contuvo más y las lágrimas salían sin poder detenerlas.

-Eres una bebé- murmuró Camila entre risas.

-Las bodas me ponen sentimental-

-Es la primera boda a la que vienes, Lauren-

Lauren solo la ignoró y siguió prestando atención a la novia.

Parecía que todo pasaba en cámara lenta, cada paso, cada detalle que podía observar detenidamente de su mejor amiga.

Verla en esa situación la hizo recordar viejos momentos, de cuando iban al colegio juntas, las pijamadas y bobadas juntas. Esos momentos en donde no había mucha preocupación.

-Ahora los anillos- en ese momento entró la pequeña Ariel con una canasta con pétalos de rosas.

Tiraba los pétalos por todos lados, daba pequeños saltos y tiraba los pétalos. Las risitas de los invitados hizo que la pequeña corra hacia su mami -Lo hiciste bien, bebé- susurró Camila en el oído de la pequeña -Los anillos, Ariel- murmuró con una sonrisa.

La pequeña se quejó y escondió su cara en la falda del vestido de Camila, pequeñas risitas aparecieron de nuevo, Camila con una sonrisa nerviosa entregó los anillos.

-Ahora repita después de mi- habló el cura -Yo, Normani Kordei Hamilton...-

-Yo, Normani Kordei Hamilton...- las manos temblorosas de la morena no la ayudaban de nada.

-Te quiero a ti como esposa y me entrego a ti...-

Te quiero a ti como esposa y me entrego a ti...- su corazón estaba latiendo a mil por hora.

-... y prometo ser fiel en la prosperidad, en la salud y en la enfermedad...-

-... y prometo ser fiel en la prosperidad, en la salud y en la enfermedad...- no paraba de sonreir, de verda estaba pasando.

-...y así amarte y respetarte todos los días de mi vida-

-...y así amarte y respetarte todos los días de mi vida.- sus ojos se llenaron de lágrimas.

-...Y con este anillo hago entrega de mi promesa hacia ti, Dinah Jane Milika Ilaisaane Hansen Amasio-

-...Y con este anillo hago entrega de mi promesa hacia ti, Dinah nombre largo Hansen- murmuró ya con un nudo en la garganta, una pequeña lágrima rebelde resbaló en su mejilla pero Dinah se apuró en limpiarlo.