࿐𝐢𝐦𝐦𝐨𝐫𝐭𝐚𝐥s࿐ 𝐒𝐨𝐮𝐤𝐨𝐤𝐮/𝐒𝐡𝐢𝐧 𝐬𝐨𝐮𝐤𝐨𝐤𝐮 |𝐅𝐢𝐜𝐭𝐨𝐛𝐞𝐫2019

XXI. Tesoro

Para Akutagawa, tener algo a lo que aferrarse era un punto débil, por eso mismo, era mal visto entre mafiosos, pero, lastimosamente, aunque no lo quisiera admitir, se había empezado a aferrar a algo.

Mejor dicho, alguien.

Por lo que era como un tesoro para él, tan frágil y delicado, a la vez que importante, alguien que en cualquier momento le podrían arrebatar, debido a su valor. Alguien a quien debía proteger.

Le amaba, no quería admitirlo, pero era cierto.

Akutagawa Ryunosuke amaba a Atsushi Nakajima.

Por eso mismo, le trataba siempre tan indiferente, creyendo que así sus sentimientos por él se irían, o que tarde o temprano, Atsushi se cansaría y se marcharía de su lado.

Eso nunca ocurrió.

Se enteró por otros medios -mejor dicho, Chuuya quien le preguntó a Dazai- si es que Atsushi tenía pareja, específicamente, si estaba saliendo con Kyouka.

Grande fue su sonrisa cuando descubrió que su relación no iba más allá que la hermandad.

Aún mejor, suponen que Atsushi es gay.

Como Atsushi era su tesoro, no podía permitir que tuviera una relación, claro, era por eso, no porque quisiera intentar algo con él.

Aunque quisiera, no podría, la mafia ante todo y esta le prohíbe tener algo a lo que aferrarse o una relación en sí.

Aunque, siempre se tentó a romper las reglas, hacer todo a su modo, que nadie le pueda mandar.

-Chuuya, ¿qué opinas?

-Declárate idiota.

Para Akutagawa, Chuuya era como una madre para él, quien se parecía a Dazai, a su manera, claro.

-Soy un mafi_

-Ocupa esa excusa una vez más y te rompo la boca.

Tragó duro, no era bonito enojar a Chuuya.

-Digo, no deberías poner tu trabajo antes que tu vida, si es Mori quien te preocupa, yo hablaré con él.

-No es eso...

-¿Es ponerlo en peligro? Si él en verdad te ama, eso no le importará.

-¿y si sale herido?

-Piénsalo de esta forma, desde que lo conoces, alguna vez, ¿pidió ser rescatado?

Akutagawa quedó mudo, sintió un nudo en su garganta y sus ojos empezaban a picar, porque Chuuya tenía razón.

Atsushi, a pesar de ser su tesoro, tampoco tiene que desvalorizar el poder que tiene, puede cuidarse solo y si ambos se complementan, serán imparables.

Atsushi no necesita ser protegido, necesita compañía.