Al día siguiente metimos las maletas al auto, bueno, en realidad las metió David y nos dirigimos al hospital.
La doctora se encontraba aplicando el gel mientras David tomaba mi mano con fuerza - tranquilo- dije besando su mano, cosa que lo hizo reír - perdón estoy emocionado- dijo con una gran sonrisa, mientras veíamos la pantalla
- ambos están bien- dijo la doctora luego de darle el pañuelo a David para limpiar mi vientre - iré a imprimirla y les diré el sexo cuando regrese- dijo la doctora saliendo de ahí, David no hablaba solo limpiaba con cuidado, tengo que admitir que yo también estaba emocionada -¡felicidades!- dijo la doctora entrando a la habitación haciendo que David se levantará rápidamente -¡son mellizos!¡Niña y niño!- terminó de decir, con cierta emoción, me encontraba riendo de felicidad en cuanto a David... El corrió a abrazarme como un niño - gracias princesa, gracias- apenas podía hablar supongo que se emocionó de más, levanté su cara para verlo y limpiar sus lágrimas - gracias a ti, eres muy bueno- dije burlándome, "dios mío" este hombre me ha dejado en cinta a la primera y encima de mellizos, estaba realmente feliz - ya no llores, se te hinchara la cara- dije haciendo que riera, me ayudó a levantarme e inmediatamente me abrazó por detrás - gracias doctora- dijo feliz - nos vemos dentro de un mes- dijo mientras salíamos del consultorio
-¡Voy a ser papá!- dijo riendo mientras me apretaba -hey cuidado- dije golpeando su mano
- perdón amor- dijo besándome
-David cálmate- dije riendo, la gente del hospital nos miraba con curiosidad, y se reía porque David le decía a todo mundo que tendríamos mellizos, estaba un poco apenada por sus acciones en ese momento, pero era realmente feliz.
Decidimos ir directamente a casa de David y pasar al centro comercial allá, el camino era un poco largo
- llegaremos en una hora más- dijo David sin quitar la vista de el camino
- deberías dormir un poco- dijo estirando su mano a la mía - lo haré- dije entrelazando nuestros dedos, no podía abrazarlo ya que iba conduciendo pero me conforme con su mano, me quedé dormida al rato.
-ya llegamos- la voz de David me despertó -vamos al centro- dijo, y yo me talle un poco los ojos estaba un poco nublado y hacía frío - ponte la chamarra- dijo señalando lo que tenía encima, cuando salí me ayudó a ponermela y caminamos de la mano hasta la entrada, el lugar era grande y no había muchas personas alrededor, caminamos a una tienda de ropa y entramos, estábamos buscando ropa interior "especial" decía David, cuando la encontramos sugirió que compraramos unas tallas más grandes y fue lo que hicimos, nos atendieron rápidamente y luego de unas caricias en mi barriga salimos de ahí -¿estás cansada?- preguntó mirándome mientras caminabamos hacia el auto
- no, ¿Por qué?- pregunté cuando ví su cara de preocupación -¿Pasa algo?- nos detuvimos un momento - no pasa nada- dijo besando mi frente para luego abrir la puerta para entrar - la casa no está lejos de aquí- dijo arrancando el auto, tenía razón llegamos en menos de quince minutos era una casa realmente grande, el jardín se veía lindo aunque un poco descuidado, cuando bajamos del auto comenzó a llover hací que tuvimos que correr adentro, David saco rápidamente la llave para dejarnos entrar - métete- dijo empujándome un poco -ven, quítate eso está mojado- dijo mientras quitaba la chamarra
-vamos arriba- dijo sonriendo mientras tomaba mi mano y subíamos, caminamos por un largo corredor hasta que llegamos a una puerta -¡mamá!- dijo David antes de entrar -¡ya llegamos!- dijo corriendo a abrazar a la señora que se encontraba sentada frente a la ventana - mi muchacho- dijo apretando sus mejillas, mientras David hacia un gesto -¿Dónde está ella?- preguntó, yo permanecía en la entrada hasta que David me tomó la mano y me acerco
- es ella- dijo sonriendome -¡madre mía! Pero qué bonita eres cariño- dijo tomando mis manos - g-gracias- dije un poco apenada, ella me sonreía ampliamente -¿Cómo te llamas corazón?-
- mi nombre es Aide, Aide Cooper, mucho gusto- dije sonriendo un poco
- es un lindo nombre, soy la abuela de David, Marjorie pero llámame Mari- dijo bajando la mirada a mi vientre, ella sonrió enormemente y me recordó a David -¿Puedo?- preguntó mirándome -claro- respondí rápidamente -¿Ya sabes que es?- me preguntó, pero antes de que hablara
- son dos ma, ¡son mellizos!- dijo pasando su brazo por mis hombros con una sonrisa llena de orgullo
-¡Dios mío! Pero qué bendición más grande- dijo levantándose para abrazar a David - serás un gran padre mi amor- dijo con lágrimas en los ojos - ven acá mi niña - dijo acercándose a mí - les deseo una vida llena de amor y felicidad- terminó para luego abrazarme -muchas gracias- dije, ella olía a lavanda, parecía una buena persona y me alegraba que apoyará a David y a mí, se alejo de mi tomando mis manos y mirando a David -¿le llamaste a tus padres?- preguntó - ah yo... Pensaba llegar como sorpresa- rápidamente le lancé una mirada, me dijo que había llamado antes de que salieramos de la casa -¿pasa algo?- preguntó la señora Mari con diversión al ver como David desviaba la mirada un poco - no pasa nada ma, vamos a dejar el equipaje a mi habitación- dijo David tomando mi mano para salir
- estás en tu casa cariño- dijo antes de que saliera
-gracias- respondí rápidamente, nos dirigimos a su habitación la cual estaba al fondo del corredor y entramos rápidamente, cuando cerró la puerta se puso de rodillas - perdón- dijo juntando sus manos como si pidiera piedad -¿Que haces? Levántate- le dije dando un golpe en su hombro - amor, necesito explicarte...-
- hazlo- interrumpí - por favor explícame - dije mirándolo, no estaba molesta estaba preocupada - verás... Siéntate- dijo llevándome a la cama
- mis padres trabajan, todo el tiempo, desde que tengo memoria no han pasado un momento conmigo, ninguno, la abuela me a criado ella es como mi madre...- formó un silencio antes de continuar - cuando la abuela enfermo, ellos no estuvieron con nosotros, era como si estuviéramos solos, no vinieron a verla ni una sola vez. Estaba seguro de que aunque llamara ellos simplemente no vendrían, así que decidí evitarme ilusiones y decepciones para ti, conociste a la persona más importante de mi vida y con eso me basta- terminó, se veía triste así que me levanté frente a él y lo abracé - no estoy molesta- dije recargando su cabeza en mi vientre mientras acariciaba su cabello -estoy feliz de haberla conocido, pero ellos merecen saberlo, mis hijos merecen conocer a sus abuelos- sentí como sus lágrimas mojaban mi barriga y levanté su cara para besarlo - todo saldrá bien- dije juntando nuestras frentes.- creo que deberíamos visitar a zanahorias- dijo mientras estábamos acostados viendo una película
- ¿zanahorias?- pregunté extrañada, mientras se levantaba - le enviaré...- guardamos silencio cuando se escuchó a alguien correr por el pasillo y luego tocaron la puerta, David sonrió malicioso -"hah" v-voy- dijo quejándose, me levanté rápidamente antes de que confundiera la situación
- "Auch"- le había dado un golpe y abrí la puerta, una chica peliroja estaba parada con un rubor enorme - ah yo...- trato de hablar, pero se vio interrumpida por las carcajadas de David -¡Zanahorias!- dijo acercándose a ella para revolver su cabello - ví el auto afuera así que corrí para acá- dijo aún con el sonrojo en su cara
- me alegra que llegarás a tiempo, ella es Aide- dijo mirándome -¡hola!- dijo tomando mi mano - soy Paola, amiga de David- luego se acercó a mi barriga y sus ojos casi salen de sus órbitas, cosa que me hizo reír un poco -¡Vaya! Pero si es enorme- dijo acariciando con una mano -¿Acaso son dos?- preguntó en tono de burla -¡son mellizos!- dijo David detrás de ella recargado en el marco de la puerta cruzado de brazos -¿¡Que!? No me jodas- dijo tapando su boca rápidamente - lo siento- dijo - ah no te preocupes- dije agitando mis manos para quitarle importancia - "waa" eres un loquillo ¿eh?- dijo pegándole en el hombro a David, haciendo que este se quejara -¡Felicidades!- dijo abrazándome - me han hablado muuuucho de ti- dijo separandose para tomar mis manos y jugar con ellas -ah, si no es indiscreción ¿Puedo preguntar tu edad?- preguntó sonriendo - ah yo... Tengo 18- dije un poco apenada -¡¿en serio?!- dijo mirando a David que se rascaba la nuca - eres súper tierna- dijo acariciando mi cabeza -oye pero...¿Que usas en tu cabello?- dijo tomando un mechón - se ve precioso,
¿Es natural?- preguntó - lo es- dije un poco orgullosa, el clima era húmedo por lo que mis rizos aparecieron
- creo que deberíamos ir a comer algo- interrumpió David.
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"Nuestro Pequeño Enredo" (TERMINADA)
Teen Fiction"la mayoría de las relaciones comienzan por amor, la nuestra... digamos que fue un enredo" Con solo 18 años Aide se encuentra en cinta luego de pasar la noche con un extraño, decide ser madre soltera pero al parecer este no esta de acuerdo con la d...